CARTAS (No es la guerra de EU sino de Bush, dice Martínez Nateras)

Don Juan Angulo, director general de El Sur:
Al cuerpo de redacción, a los socios, editores, artículistas y sobre todo a los lectores:

El Sur es nuestro. El diario les pertenece a ustedes, a los fundadores y a sus trabajadores. No obtante extraño el cumplimiento de algunos ofrecimientos como la creación de un consejo editorial y las reuniones de socios para dialogar sobre el diario que necesita y merece Guerrero. Hoy, por ejemplo el citatorio a Maribel y lo que desde la sociedad debemos hacer para elevar El Sur al nivel que debe estar, son temas que ameritarían comentarios colectivos y debates en el diario.

Estoy en desacuerdo con la orientación editorial que engloba a la cobertura sobre la invasión a Irak bajo la frase “La guerra de Estados Unidos”.

La guerra en todo caso es la guerra de Bush, del sistema –no de los Estados Unidos. No es una guerra de los pueblos de los Estados Unidos de Norteamérica contra Irak. Si así lo fuese serían justificadas las agresiones y el repudio a cualquier norteamericano; a sus soldados y empresas, a los intelectuales, a los periodistas, a todos. No. Es fundamental entender y titular en consecuencia.

El mundo le debe mucho al talento y a la creatividad del pueblo norteméricano. Internet se ha convertido en el mejor medio para expresar y organizar la resistencia y la condena a la guerra, a la invasion; la concertación de expresiones por un mundo diferente; contra el neoliberalismo bárbaro. Internet y las computadoras y muchos inventos más son fruto de la inventiva del magnífico pueblo de allende el Bravo. Nada más por citar un ejemplo.

Hoy las manifestaciones en contra de la guerra, antes de que se iniciase la invasión, justo al principio y de manera permanente tienen en los pueblos, en la juventud y en la inteligencia de Norteamérica un verdadero baluarte; un frente interno de dignidad y resistencia.

Esto deben reconocerlo y reflejarlo en la línea general del diario.

Además una orientación de esta naturaleza nos es necesaria en una entidad como Guerrero y en un destino como Acapulco que debe ser hospitalario y especialmente abierto al multiculturalismo, a la solidaridad internacionalista, a convertir a Acapulco en hogar de los ciudadanos de cualquier país del mundo. ¿O qué nos ponemos a apredrear consulados, a repudiar turistas, a boicotear centros comerciales, a correr a los y a las springbreakers, a reproducir las enfermedades de un izquierda incapaz de entender la nueva realidad?

Insisto en mi llamado a ampliar las expresiones ahora por el cese inmediato de los bombardeos y de los ataques, por la salida de las tropas extranjeras de ese país, por el respeto a la integridad de Irak como país y a sus recursos naturales.Espero que ustedes y los lectores comprendan mi posición. ¡No a la guerra en nombre de nadie! ¡Cese inmediato a la invasión a Irak! ¡Un mundo mejor es posible! ¡No a la guerra de Bush!

 Arturo Martínez Nateras