Son inocentes los acusados de secuestrar a Hugo Magno Terrazas, dicen familiares

* “Fueron detenidos ilegalmente y torturados por los comandantes Fortunato Zamora Paz y Víctor Castro Valente, ahora prófugos de la justicia acusados de secuestro”, argumentan

Esposas y familiares de cinco detenidos por el secuestro del empresario Hugo Magno Terrazas Ménez, ante la inminente sentencia del juez primero de lo penal, Esteban Saldaña Parra, salen en su defensa y afirman que son inocentes y que la propia víctima los exoneró.

Las esposas y familiares de los detenidos solicitaron al gobernador René Juárez Cisneros y al presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Raúl Calvo Sánchez, que “valoren las pruebas, porque son inocentes, fueron detenidos ilegalmente y torturados por los ex comandantes Fortunato Zamora Paz y Víctor Castro Valente, prófugos de la justicia acusados de secuestro”.

El empresario de la construcción Hugo Magno Terrazas, integrante de la conocida familia de políticos de La Sabana, fue secuestrado el 11 de enero de 2001 y rescatado por la Policía Judicial del Estado 24 horas después, cuando estaba amordazado en una casa de seguridad de la popular colonia Zapata.

Ayer por la mañana visitaron la redacción de El Sur Dulce María Escalera Amaya, esposa de Florentino Rojas Morales; Carmen Rojas Morales, esposa de Antonio Morales Téllez; Rosa Isela Castellanos Maya, esposa de Rubén Rojas García; una sobrina del detenido Alfredo Oliveros López –que no quiso dar su nombre– y Daniel Campos Castellanos, hijo de Salvador Campos Gómez.

Una de las pruebas de inocencia de sus familiares, afirma Dulce María Escalera, es la declaración del testigo del secuestro Carlos Alberto Cuevas Ramírez, quien dijo que el vehículo en que subieron a Hugo Magno “era color negro, en los asientos delanteros traían playeras color negro, del lado del conductor traía las siglas de la PGR y las siglas de la PJ en color amarillo”.

Dulce María dijo que su esposo Florentino y su cuñado Antonio fueron detenidos la madrugada del 12 de enero de 2001 en su casa, ubicada en la colonia Altamira, por el ex comandante de la PJE de Ciudad Renacimiento, Fortunato Zamora, sin orden de aprehensión o de cateo.

En esa ocasión “los judiciales tiraron las puertas de la casa a patadas y a cañonazos, se llevaron dinero, alhajas y varias prendas; los tuvieron cinco días bajo tortura y los amenazaron con matar a nuestra familia para que se declararan culpables del secuestro del señor Hugo Magno, y le sembraron una pistola, de lo cual fue absuelto por un juez federal”.

Las mujeres también presentaron copia de un escrito de fecha 6 de agosto de 2001, firmado por Hugo Magno, que entregó al juez primero Saldaña Parra, en el cual exoneraba a seis detenidos porque “en ningún momento participaron en el secuestro cometido en mi agravio, por lo consiguiente no es justo que se culpe a personas ajenas a este ilícito, pero que a los responsables se les aplique todo el rigor de la ley”.

Hugo Magno en esa ocasión ratificó el escrito el 15 de julio de 2002 y solicitó al juez Saldaña Parra que absolviera del secuestro a los detenidos Florentino Rojas, Antonio Morales, Rubén Rojas, Alfredo Oliveros, Salvador Campos y a Martín Pedro Santiago Clavel, debido a que al principio los involucró porque en la Judicial le dieron esos nombres.

De esa petición exceptuó a Ernesto Juárez Ríos, Trinidad Marín Villalba, Gregorio Gómez Robles, Abel Ramos Martínez, Alberto Hernández Ramos y, la única mujer, Blanca González Obregón.

En la casa del matrimonio formado por estos dos últimos fue encontrada la víctima.

Otra de las pruebas fue la diligencia del interrogatorio efectuado el 24 de septiembre de 2002 al testigo del secuestro Carlos Alberto Cuevas Ramírez, quien declaró que el vehículo en que subieron a la víctima era de “color negro y que en los asientos delanteros había unas playeras color negro, que del lado del conductor tenía las siglas de la PGR (Procuraduría General de la República) y las siglas de la PJ en color amarillo”.

Otra vertiente es la información de los 10 procesos penales que entregó la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) al ex juez sexto de distrito, Joel Carranco Zúñiga, de los antecedentes criminales del ex comandante prófugo Fortunato Zamora, principalmente por privación ilegal de la libertad, abuso de autoridad y desaparición involuntaria de personas. (Alfredo Mondragón).