“Misteriosa”, la caída de helicópteros de la PGR, considera Aguirre Franco

* Si estalla la guerra en Irak, sería una vergüenza, opina el arzobispo de Acapulco

Nelly Bello * El arzobispo Felipe Aguire Franco recomendó a la PGR y al Ejército evitar el castigo de “justos por pecadores” en las investigaciones que realizan ambas instancias en la sierra de Guerrero por la caída de tres helicópteros de la PGR la semana pasada y que estaban dedicados al combate al narcotráfico.

Entrevistado al final de su homilía en la Catedral, dijo que el combate al narcotráfico es una acción difícil para las autoridades y lo comparó con “un dragón de siete cabezas” por lo que previó que la investigación será “un galimatías” pues los reportes ofrecen dos versiones sobre la caída de los dos helicópteros el lunes, una es que alguien disparó y la otra que chocaron y en el caso de la tercera nave que “se atoró con unos cables”; “todo esta medio misterioso”.

Dijo que el narcotráfico es un problema pastoral pues los sacerdotes deberán, desde el punto de vista del Evangelio, buscar alternativas de trabajo y explicar a los campesinos que es un gravísimo mal que ocasionan al prójimo, además de quebrantar el quinto mandamiento de no matarás, “quien la siembra, la trafica y la consume”.

Deseó que la investigación aclare las versiones pero con respeto a la paz, habitat y dignidad de los pobladores de Xitopontla, en el municipio de Ahuacotzingo.

–¿A qué cree que se deban las distintas versiones?

–Se trata de hacer los crímenes perfectos, he ahí las confusiones de eventos dolorosos con la muerte de quienes combaten el narcotráfico. Esperamos que se aclare pero sin cacería de brujas ni castigos indiscriminados a los habitantes.

Insistió en evitar, por parte de PGR y Ejército, el hostigamiento a los campesinos, “para evitar que sientan la espada de Damocles en sus cabezas sólo por tener la desgracia de vivir donde aconteció ya sea el delito de maleantes o el accidente”.

Añadió: “No se debe tener en asoro a las personas que tienen derecho a la paz y el respeto a la paz, su habitat y dignidad de personas”.

Aunque dijo que no es portavoz de quienes piden la salida del Ejército, consideró que deben “tener en cuenta el derecho a la paz y la tranquilidad” de los pobladores pues “no tienen otras agravantes más que allí se hayan verificado los hechos, que las investigaciones sean sin la extorsión y tortura de las personas”.

Dijo que espera que no utilicen la caída de las naves como pretexto “para que paguen justos por pecadores”, insistió en pedir que “si no encuentran a los culpables, que no agarren parejo contra quien sea, eso hay que dejarlo para la edad de piedra”.

Sobre la posibilidad de guerra entre Estados Unidos e Irak, Aguirre Franco dijo que la comunidad católica renovó las oraciones para pedir que no se genere una guerra porque “sería una vergüenza por no encontrar los caminos del diálogo de una sana, digna e inteligente diplomacia; y una derrota para la humanidad porque todos perdemos”.

Dijo que había optimismo de que se aleje “el látigo de la guerra” porque la reunión del ministro de Inglaterra, Tony Blair, el presidente de España, José María Aznar, y el de Estados Unidos, George Bush, “son un síntoma de que no están tan seguros de que la guerra es la solución y tomarán en cuenta las oposiciones fundadas”.

Luego opinó sobre la prostitución infantil que calificó como un mal que “no es explicable ni justificable porque va contra la naturaleza” y atenta contra la inocencia y situación de indefensión de los niños.

Anunció que este jueves inaugurarán un Centro de Ayuda a la Mujer (CAM) en la colonia Progreso donde apoyarán a las mujeres jóvenes “que podrían caer en prostitución o el asesinato de fetos o que ya cayeron para que superen el trauma de matar a su propio hijo”.