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Jaime Castrejón Diez

Los ensayos en un vacío político

Las elecciones del estado de México para presidentes municipales y diputados a la legislatura local se han convertido en una especie de ensayo general sobre las tácticas de los partidos políticos para la elección federal intermedia a mediados de año. Se trata de algo así como fue la Guerra Civil Española como preludio de la Guerra Mundial, se ensayaron armas, se trataron distintas estrategias y se hizo una evaluación de los métodos que después se aplicarían en el conflicto europeo.

Así vemos que el esfuerzo de dos de los partidos, del PRI y el PAN están absolutamente enfocados al pasado. El PRI tratando de hacer recordar a la gente las instituciones y las cosas buenas que en su tiempo fueron realizadas. La cancioncita idiota de ¡cuando tuve, yo te tuve, te mantuve y te di!, viene a confirmar el hecho de que el PRI quiere capitalizar 70 años de historia institucional, contra dos años del llamado gobierno del cambio. Sin embargo, es muy claro que el esfuerzo por hacer que las instituciones nacionales sirvan de justificación para el regreso del PRI no son tan fuertes como para hacer olvidar los cacicazgos, los latrocinios, la falta de apertura real en la mayor parte de los 70 años que gobernó.

Sin embargo, el hecho de utilizar la historia y atacar el actual gobierno, es parte de la estrategia que se está aprobando. Los resultados lo dirán, a pesar de la influencia del mandatario local, si los resultados en marzo les darán la razón o no. Si da, habrá más de lo mismo y si no, se pondrán a prueba los estrategas del PRI.

Por el lado del PAN se está utilizando una estrategia también enfocada al pasado, recordando tanto en anuncio de televisión como en el discurso político los daños que realizaron los priístas con la falta de democracia, la falta de honestidad y todos los defectos que ya se han utilizado por este partido en ocasiones anteriores, en algunos anuncios aparecen los rostros de quienes son repudiados por la ciudadanía. En el 2000 el resultado fue bueno, había un desencanto total con la falta de cambio en el PRI y la alternancia en el poder era una aspiración general, se considera como algo esencial para el desarrollo de México.

Sin embargo, los dos partidos y con el satélite del Partido Verde que en sus anuncios de cine tratan de ridiculizar el cambio, no son tan efectivos porque después de todo a la presencia del Partido Verde le falta estructura moral para que realmente tuvieran efecto en la ciudadanía. Sería bueno que los conductores del Partido Verde oyeran las opiniones que sobre ese partido y sus dirigentes se oyen en la sociedad civil, que lo consideran un negocio familiar, las alianzas con otros partidos no han permitido que tomen la posición que el electorado les puede marcar. Se parecen al perejil, aliado con otros la hace pero solo no sirve para nada.

Por el lado del PRD, no hay nuevas tácticas o enfoques que pudieran diferenciar a su campaña con las de otras épocas. Mucho ha tenido que ver el efecto Lula, es decir la izquierda que finalmente llega, pero cambiado su discurso, tal vez como no tienen un nuevo discurso solamente suavizan el discurso anterior sin una gran habilidad al hacerlo.

Lo interesante va a ser cuál es el sentido del voto, normalmente en elecciones intermedias hay un 20 por ciento menos de afluencia en las urnas y será menor a la votación del 2000 cuando se buscaba la alternancia, ahora muchos votantes se quedarán en casa.

Se ha puesto tan difícil la penetración a la conciencia ciudadana que el PRI utilizó el argumento de la pena de muerte cortejando a aquellos mexiquenses que se sienten inseguros en la entidad. Esto provocó una reacción que era natural y finalmente todos los partidos en el Congreso de la Unión rechazaron el uso de la pena capital.

Algo que está empezando a surgir, es la presencia de López Obrado con su concepto del “clientelismo compasivo”, tratando de asegurar votos, de tal forma que hasta el mismo presidente Fox ha empezado a salir y buscar a través de la posición populista la recuperación de su imagen y al mismo tiempo impulsar a su partido para que tenga la mayoría suficiente para poder pasar sus reformas en el Congreso de la Unión en las elecciones de julio.

Uno de los eventos interesantes que hubo en la semana, fue en la Universidad de California en San Diego, donde una pregunta, que es una reflexión rondada en el seminario ¿vendría a gobernar, como en Brasil una izquierda por default en México? Esto es algo que debe pensarse, nadie quiere regresar al priísmo. Pocas gentes creen que la campaña, hablando de quitar el freno al cambio, realmente ayude al PAN y la sombra de un posible posicionamiento de la izquierda en el vacío político que existe pudiera ser en estos momentos un factor muy importante.

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