Muestra el buque escuela Mollendo una exposición de la cultura peruana

Xavier Rosado * El Buque Armada Peruana (BAP) Mollendo estuvo tres días de visita en el muelle de Acapulco y permitió el acceso al público para que pudieran admirar sus instalaciones y una exposición itinerante de la cultura Peruana.

El buque de carga que desde hace cinco años fue adaptado para servir como barco de instrucción, transporta a 324 cadetes peruanos y 27 bolivianos durante 31 días, lapso en el que recorren los puertos de: El Callao, Balboa, Acapulco, San Francisco, Punta Arena para regresar a El Callao el 2 de marzo.

Los jóvenes pertenecientes al primero, tercero y cuarto años de la Escuela Nacional de la Marina de Perú, hacen este recorrido todos los años con el fin de complementar los conocimientos teóricos recibidos en las distintas áreas de navegación marítima, además de ser embajadores del Perú y de la Marina en las naciones que visitan.

Los cadetes tienen como comisión montar guardias para dar recorridos a los visitantes del barco y a su vez explicar la exposición itinerante La armada peruana que exhibe una historia de esta institución y algunos aspectos de la cultura de Perú, como su artesanía y su vestido.

También se venden souvenirs del barco como gorras, chamarras, sudaderas, vasos y tazas.

El cadete de cuarto año, Mario Bulnes, precisó que durante su travesía el crucero de instrucción recorre cuatro mil 814 millas marinas y arriba a ocho puertos, permaneciendo 18 días en el mar y 13 atracado.

“Todo es ceremonial en el barco, el comandante Héctor Soldi Soldi tiene que llegar a presentarse con los oficiales de la naval de cada puerto al que llegamos y como parte de este intercambio diplomático, organizamos una fiesta para los anfitriones en cada puerto”, expresó el futuro oficial de la naval peruana.

Agregó que entre las actividades académicas programadas a bordo del BAP Mollendo figuran conferencias, exámenes calificados, practicas de comunicación, ingeniería, logística y fundamentos de ciencias navales. Los miembros de la tripulación ofrecieron la noche del domingo una fiesta a bordo del barco para despedirse del puerto.