Ricardo Castillo Díaz

MAREA ALTA

  Vocabularete

De plano que el viernes pasado el gobernador René Juárez Cisneros tuvo uno de sus mejores momentos de revelación.

No se trata de la primera ocasión en que el Ejecutivo estatal responde con ese tipo de florecitas como las de “delegadete”, “que se largue” y “que me lo quiten”. Ya lo habíamos escuchado decir, por ejemplo, que se siente “a toda madre”.

Pero que ahora se refiera a un funcionario federal con este tipo de expresiones, nos lleva a pensar que ese vocabulario –que raya en lo vulgar y que denota el grado de menosprecio que puede llegar a sentir el gobernador– ya ha de haber alcanzado a más de uno.

Porque si así se refiere del delegado de la Profepa, Inocente León Pineda, qué no dirá René Juárez de otros que tampoco le caen ni tantito.

¿Alcaldete le habrá endilgado en secreto a Zeferino Torreblanca Galindo con quien no la llevó tan bien que digamos, y de quien también habrá rogado aquello de “que me lo quiten”?

¿Diputadeta le dirá por la espalda a la coordinadora de los diputados locales del PRD Adela Román Ocampo, quien en menos de tres meses ya le lanzó como tres fuertes críticas?

¿Coordinadorcete le habrá puesto al ex priísta Florencio Salazar Adame de quien tampoco es muy amigo que digamos, según leemos en los artículos del funcionario foxista publicados en estas páginas, y que por cierto no le gustan ni tantito?

¿Que cómo nos atrevemos? Pues porque esa es una de las joyas favoritas del gobernador. Quién no recuerda que en su cierre de campaña como candidato a gobernador en la colonia Emiliano Zapata, hace exactamente cuatro años, en 1999, el priísta dijo que en el Zócalo de Acapulco el PRD puso a un “candidatete” a leer un discurso que ni siquiera entendía.

Claro, se refería al multitudinario acto que al mismo tiempo encabezaba Félix Salgado Macedonio, el perredista que estuvo a un milímetro de ganarle.

Y mejor ahí le paramos porque capaz que nos cuelgan el de periodiquete.

¿O ya nos lo había colgado?

De la columna de Nino Canún

Pues otro que está a punto de ganarse un lugar en ese vocabularete es el conocido conductor de radio Nino Canún, y no deberá extrañarnos que dentro de poco sea llamado “periodistete”.

Resulta que Nino Canún se atrevió a escribir sobre el gobernador de Guerrero, y no precisamente para hablar bien de él.

Nos referimos a la columna Pero… ¿Y usted qué opina? que apareció publicada el sábado pasado hasta la sección El País, en la página 5B del periódico Novedades Acapulco.

Canún cuenta allí que en su programa radiofónico, el catedrático de la UNAM, Eduardo López Betancourt “apareció por segunda ocasión” y acusó al gobernador de Guerrero “de utilizar su administración para saltar de la extrema pobreza a la opulencia”.

Nino agrega que López Betancourt concluye que René Juárez se ha convertido “en uno de los hombres más ricos de la entidad”.

A continuación, dos de los tres párrafos demoledores que el conductor de radio le dedica al gobernador. Lo entrecomillado pertenece a lo que expresó el controvertido catedrático de la UNAM, que por cierto es de Guerrero:

“Hoy en día es dueño de un centro comercial en la ciudad de Querétaro, donde por cierto vive una de sus tantas familias… Hace unas semanas policías guerrerenses encargados de cuidar a los hijitos y a una de las señoras de Juárez Cisneros provocaron un escándalo cuando se enfrentaron a elementos de seguridad del estado de Querétaro”.

“Ese es el cambio que se obtiene en nuestro país por ser arrastrado… y todo debido a que la honestidad no va de la mano con este mandatario, quien seguramente cuando pierda la gubernatura a manos del PRD, terminará en la cárcel igual que sucedió con Mario Villanueva Madrid, en Quintana Roo”.

¡Sooopas! Dirán los malosos. ¿Le aguantarán el corte a Nino y al periódico que lo publicó?

¿Y usted… qué opina? de lo que dijo el universitario que fue efímero secretario de Gobierno con Rubén Figueroa, el padre.

Más sobre la contaminación

Mire cómo cambian las cosas.

Apenas hace tres meses el gobernador del estado andaba en un canal distinto al del entonces alcalde del principal municipio del estado.

Y ahora en completa sintonía están Juárez Cisneros y el actual edil de Acapulco, Alberto López Rosas.

Minutos después de que el gobernador exigió la cabeza del delegado de la Profepa, el presidente municipal hizo lo propio al reunirse con cónsules acreditados en el puerto.

Pero más curioso resultó que López Rosas haya expresado que las del periódico Reforma –donde comenzó a publicarse el reporte oficial sobre los niveles de contaminación de playas– eran notas informativas con “un informador anónimo” y con “fuentes abstractas” de la Profepa.

Y es que desde la primera nota de ese diario capitalino de circulación nacional, el pasado lunes 3, quedó bastante claro desde el primer párrafo que se trata de “un diagnóstico elaborado” por dicha dependencia.

Por si quedara duda, líneas más abajo de la referida nota se cita la declaración del director general de Zona Federal Marítimo Terrestre e Impacto Ambiental de la Profepa, José Iturriaga de la Fuente.

Más sorprendente resulta la opinión de López Rosas, cuando en el mismo texto aparece la versión de su director municipal de Ecología, Miguel Balleza García, a quien Reforma no omitió buscar.

Pero el que de plano se ve realmente desencanchado es el presidente de la Fundación Colosio del PRI.

Mientras a quien se le llama “el primer priísta de Guerrero” dice que la bahía de Acapulco no está contaminada, su ex secretario de Salud Carlos de la Peña Pintos dice todo lo contrario.

Como queriéndole hacer un favor a su partido, en declaraciones aparecidas ayer domingo el priísta doctor De la Peña le echó la culpa al gobierno perredista de López Rosas, que según dice, ha tratado de minimizar el asunto del cochinero en las playas.

¡Por fin! ¿Hay o no hay?

¿No será que De la Peña sabe demasiado? Es pregunta.

El colofón del caso Bringas

Ahora que se fue el señor Miguel Bringas de la Dirección de Recursos Humanos del ayuntamiento, hay una embarazada que podrá estar más tranquila.

Se sabe que esta mujer cuenta con seis meses de embarazo y que el bebé podría nacer bajo el signo de Tauro, por allá de mayo.

Piensa separarse temporalmente de su cargo en un par de meses pero regresar de inmediato. Cuentan que ella misma comenta que se incorporará con todo y su chilpayate. Para borrar un poco el episodio de Bringas, suponemos.

Es la perredista Rossana Mora Patiño, secretaria de Desarrollo Social. [email protected]