No impide el caso Aguas Blancas su trabajo político, dice Figueroa

* El ex gobernador dice que no puede frenar la aspiración de su hijo, Rubén Figueroa Smutny, de buscar la diputación federal

Aurelio Peláez * El ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer negó que el caso Aguas Blancas sea un estigma para el trabajo político que en estas elecciones federales realizarán tanto él como su ex secretario de Finanzas estatal y senador Héctor Vicario Castrejón.

El ex gobernador de la entidad, coordinador de la campaña priísta en la zona Norte de la entidad, entrevistado ayer en este puerto, luego de acudir a la toma de protesta de Vicario Castrejón como coordinador de la campaña de su partido en Acapulco y la Costa Grande, se refirió al caso Aguas Blancas como un “lamentable acontecimiento… un caso desafortunado, muy triste, pero que ya se resolvió desde las leyes, por lo tanto no será un estigma que me impida cumplir con mi encomienda en el PRI”.

Durante el gobierno de Figueroa Alcocer, el 28 de junio de 1995, se dio la matanza de 17 campesinos, en un retén instalado por la policía estatal en el vado de Aguas Blancas, en la sierra de Coyuca de Benítez, que devino un año después en la renuncia del mandatario, a quien se atribuyó haber dado instrucciones para detener la caravana de campesinos que realizaría una mitin en Atoyac.

El ex gobernador rechazó asimismo que su participación activa en la campaña priísta tenga como objetivo abrir espacio a su hijo –Rubén Figueroa Smutny– hacia una diputación federal o a la candidatura de su partido a la gubernatura.

“Mi hijo fue diputado local por tres años, cumplió con su trabajo y no puedo cancelar sus aspiraciones legítimas” a una diputación federal, señaló. Dijo sentirse satisfecho del trabajo de Figueroa Smutny en la legislatura local y de su trabajo como servidor público, “pero lo que no puedo hacer es frenar sus aspiraciones”.

De la declaración del senador perredista Armando Chavarría Barrera, en el sentido de que la presencia de Figueroa Alcocer en las campañas priístas beneficiaría al PRD por la asociación de éste al caso Aguas Blancas, el ex gobernador señaló que el dirigente del PRD “ve con optimismo esta campaña”.

Rubén Figueroa afirmó que no buscará confrontaciones con otros partidos en esta campaña, “yo tengo respeto a los otros partidos”, y reiteró que el PRD estaba asumiendo con mucha confianza el actual proceso electoral.

El ex mandatario estatal afirmó que siente en el PRI “respeto y amistad de mis compañeros”, y que por ello empezaría a trabajar para atender sus reclamos y consolidar la unidad del priísmo rumbo a la próxima elección de diputados federales.

Descartó que el llamado que se le hizo para ser coordinador de campaña en la zona Norte, así como la participación del ex gobernador Angel Aguirre a una candidatura a la diputación federal en Costa Chica, sea para rescatar a un priísmo en debacle, y reiteró que lo que pretendían era contribuir a la consolidación de su partido en la entidad, en la que por cierto quedó con el PRD en un empate técnico en la pasada elección local.