Equipo especial para mantener sustentable la isla de La Roqueta, piden a Fonatur

Recorren autoridades federales, estatales e integrantes del Comité Insular de la isla la zona de obras

Karla Galarce Sosa

Integrantes del Comité Insular de la isla de La Roqueta pidieron la construcción de biodigestores, plantas desalinizadoras y equipo para mantener la sustentabilidad de la isla, durante el recorrido que hicieron con funcionarios de la Secretaría de Fomento Turístico (Sefotur) e ingenieros del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur) por las obras de remodelación que comenzaron hace un mes en tres áreas diferentes y que forman parte de los “compromisos presidenciales”.
El ingeniero de Fonatur, Gabriel de la Dolorosa Dávalos García, informó que en dos frentes de tres que constituirán los trabajos de remodelación de la isla, laboran 45 personas todos los días.
Añadió que la parte más difícil es el acarreo de materiales hasta la parte más alta de la isla, en lo que fue la casa del cuidador del faro. Allí, donde la Armada tiene un campamento, Fonatur-Mantenimiento remodela el espacio que ocupará un museo, que contará con una gran sala, una oficina y servicio de sanitario, mismo que funcionará con biodigestores, a modo de un baño seco.
El primer punto del recorrido comenzó en la parte posterior de los restaurantes, donde se concentran todos los materiales que poco a poco se han ido acarreando a bordo de lanchas y balsas. Varillas, alambre, cemento, graba, arena son acarreados en pequeñas cantidades en costalillas hasta la parte más alejada de la isla por los trabajadores.
Dávalos García informó que el espacio del museo podría quedar concluido en dos meses aproximadamente.
Dijo que ponderó esa parte de la remodelación porque es lo más alejado y, dadas las condiciones naturales de la isla, no deben meter maquinaria y, por tanto todo se realiza a mano.
“Se complica el traslado de los materiales que se hace a hombros y antes de que llueva más y los pasillos se vuelvan resbalosos, es que queremos terminar ésta parte”, explicó el trabajador de Fonatur a quienes participaron en el recorrido.
Detalló que el espacio llevará un falso plafón, un gran salón y servicio de sanitarios con una fosa séptica. Las obras de esa zona comenzaron hace mes y medio.
Dávalos García abundó que el traslado de los materiales desde el embarcadero de Caleta a la isla, se realiza a bordo de una balsa que soporta hasta 5 toneladas.
Otro punto visitado fue el denominado “Puente roto”, que será sustituido el viejo puente de madera por uno en forma de L y que medirá 16.4 metros por más de 15.
El ingeniero detalló que habrá una mejora en los andadores, un cambio del piso, será mejorada una escalera que conduce a la playa y que proviene del andador que conduce del faro, cuya superficie total será de 600 metros cuadrados aproximadamente.
En el recorrido estuvieron los subsecretarios de la Sefotur, José Luis Basilio Talavera y Eduardo Alcocer Molina, así como concesionarios de la isla.

Reclaman turistas abandono de lancheros en la isla

Una familia de turistas provenientes de la ciudad de México se quejaron ante funcionarios de la Sefotur, quienes volvían de un recorrido por la isla de La Roqueta pasadas las 6 de la tarde, porque ningún servicio de lancha los quería regresar de la isla al embarcadero de Caleta, de donde habían salido horas antes.
El señor Jorge Jiménez explicó que contrataron un servicio de snorkel para la isla, pero que ninguna lancha quería llevarlos a Caleta y en cambio les pedían “100 pesitos” por regresarlos.
El recorrido de los funcionarios de gobierno estatal e ingenieros de Fonatur se realizó en una lancha contratada para trasladar a los integrantes del consejo insular de la isla.
El turista dijo que los lancheros no les permitían subir a la embarcación que llevaría de regreso a Caleta a la comitiva porque se trataba de “un viaje especial”, pero al escuchar las quejas de los visitantes los funcionarios pidieron a los operadores de las embarcaciones de fondo de cristal, así como a sus líderes, quienes también aguardaban el regreso de la comitiva después del recorrido, que ofrecieran alternativas a los visitantes.
Al final los turistas, quienes dijeron visitar el puerto dos veces por año, volvieron con la comitiva y los líderes de embarcaciones recibieron una llamada de atención de la Sefotur.