En Colibríes pasan cosas indignas de un equipo de la Primera: Rogelio Rodríguez

Adalberto Valle * Aunque la etapa de los Colibríes de Morelos comenzó bien en el intento de eludir el descenso, al derrotar a Pumas de la UNAM en el primer encuentro del Torneo de Clausura 2003, el portero acapulqueño de esta escuadra, Rogelio Rodríguez, lamentó que al interior ocurran cosas que “no son de un equipo de la Primera División”.

“Antes del partido con Pumas, nos reunimos (los jugadores) y hablamos y acordamos que lo íbamos a hacer (buscar la victoria) por nosotros, por nuestras familias y los que son casados, por sus esposas y sus hijos”.

Sobre la situación por la que atraviesa el más nuevo equipo en el máximo circuito del futbol nacional, cuyo presidente es el capitán Jorge Rodríguez Marie, propietario de Aerolíneas Internacionales, con sede en Cuernavaca, Rogelio Rodríguez comentó a El Sur vía telefónica desde el estado de Morelos, que están faltando “pequeños detalles” que parecen mínimos, pero que a la larga afectan al jugador en su desempeño, además de que les están retardando algunas quincenas.

“Mira, son cosas que pueden parecer sin importancia, pero que sí afectan al final. La falta de hielo para las bebidas en los entrenamientos, la falta de cintas para vendarnos y otras cosas, además de lo administrativo”, esto en referencia al atraso en sus pagos de poco más de un mes.

“Recuerda que nos hemos estado moviendo (de Celaya a Morelos) y eso (que paguen a tiempo) ayuda a la tranquilidad del jugador, sobre todo de los que están casados y tienen hijos, hay que buscarles escuela… pero bueno, estamos en esto y hay que sacar esto adelante y lograr quedarnos en la Primera División”.

“Yo creo que el triunfo del domingo (en casa de Pumas por 3-1) lo sacamos en base a lo anímico por lo que te comento que está pasando. Había molestia pero afortunadamente todo salió muy bien. Ahora eso ya pasó y hay que ver para adelante porque falta mucho para lograr el objetivo de salvarnos”, añadió.

Sobre el proyecto que dirige Jorge Rodríguez, quien pretende instalar a esta escuadra en breve en la ciudad de Cuernavaca, el Urco mencionó que “el capitán (Jorge Rodríguez) es un hombre honesto, que desafortunadamente se ha rodeado de gente vividora que no lo está ayudando y que al contrario, le puede hacer mucho daño”.

Agregó que “aunque no he hablado mucho con él, lo poco que he hablado me doy cuenta que es un hombre de muy buena fe y mucho, demasiado entusiasmo”.

Es importante contar con nuestra

propia casa

Luego de la aprobación del Estadio Mariano Matamoros de Xochitepec, por parte de la Comisión Revisora para que los Colibríes reciban el próximo sábado a Tecos de la UAG, el originario de Puerto Marqués dijo que es importante “estar en nuestra casa”.

“Aunque falten varios detalles y aunque la cancha no esté de lo mejor, al menos la conocemos más y estaremos en nuestro terreno con la afición que nos va a poyar y eso ya es una ventaja, sobre todo para nosotros, que estamos en una situación complicada, luchando por quedarnos”.

Acerca de Sergio Rubio, quien recientemente tomó el mando de los morelenses tras la partida repentina de Carlos Trucco, ahora técnico de la selección de Bolivia, Rogelio Rodríguez comentó que el grupo está consciente de que es un entrenador debutante.

“El mismo (Sergio Rubio) dijo que se pueden decir muchas cosas porque es debutante, pero que le habían dado la responsabilidad y que teníamos que estar unidos para sacar esto adelante. Sabemos lo que nos estamos jugando y que es un reto muy grande para él y para todos. Además, el señor sí sabe, eso se ve rápido”.

Respecto a mantenerse como titular en esta campaña con un nuevo director técnico, Rogelio agradeció la confianza de Sergio Rubio y se manifestó contento por tener continuidad en un equipo de la Primera División.

“Sobre todo porque Alex (Alexsandro Alvarez, el segundo arquero) es un gran portero y lo importante es que la portería esté bien cubierta”, platicó.

Ahora con el cambio del Atlético Celaya a Morelos, Rogelio Rodríguez está más cerca de su natal Acapulco, algo que siente como positivo, después de que en el último año ha tenido que moverse primero de Monterrey a Guanajuato y ahora a Cuernavaca a quince minutos de Xochitepec, sede actual de los Colibríes, en donde está viviendo.

“Pues han sido varios cambios, he tenido que estar moviendo las cosas, aunque no son muchas las que tenía en Celaya. Allá vivía en un amueblado que rentaba y aquí (en Cuernavaca) también, así que lo que tengo es ropa y algunos muebles y otras cosas y no es tanto el problema como para los que están casados y con hijos. Lo bueno es que tengo más cerca de Acapulco”, concluyó.