Demandan los desplazados por la violencia de San Miguel Totolapan informes sobre su reubicación
Jacob Morales Antonio
Chilpancingo
Habitantes desplazados por la violencia de la comunidad de Santa María Sur y El Barroso, municipio de San Miguel Totolapan refugiados en Chilpancingo desde junio, demandaron al gobierno de estado saber si los reubicaran y en qué lugar.
Unos 20 de los 140 refugiados en la capital llegaron ayer al acto de entrega de equipo médico a 15 hospitales en la explanada del Palacio de Gobierno con la finalidad de solicitarle al gobernador del estado Ángel Aguirre Rivero una respuesta directa de qué pasaría con ellos y sus familias.
Al término del acto realizado la tarde de ayer y luego de ser abordado el gobernador por reporteros, los habitantes trataron de acercarse al mandatario pero no los vio y se retiró del lugar.
En declaraciones, uno de los afectados por la disputa entre los grupos delincuenciales en la Tierra Caliente, dijo que querían saber qué pasaría con ellos y sus familias que desde hace tres meses se encuentra refugiados en un salón de fiestas en el barrio de Tequicorral de la capital.
Recordó que a pesar de tener el apoyo del gobierno con el refugio y despensas, están desesperados por estar en mejores condiciones, porque en el refugio están todos juntos; y demandó al gobernador decirles si los reubicarán, cuándo será y dónde, porque a sus comunidades no pueden regresar.
Desde el 5 de junio, 250 personas de las comunidades El Barroso y Santa María Sur, se trasladaron a Ajuchitlán del Progreso donde comenzaron a dispersarse con familiares y conocidos a ciudades como Iguala, Cuernavaca, Guadalajara, Colima, Estado de México y Acapulco.
Llegaron a la capital huyendo de la violencia y la amenaza de los grupos delincuenciales que se disputan la región, que a principios de junio les dieron un ultimátum de cinco días para que abandonaran los pueblos o entrarían a matarlos.