Elegir por consulta al nuevo líder del PRI de Acapulco, pide Añorve

* Desea que Apreza no se tarde mucho en decidir * Llama a poner un alto a los destapes para la gubernatura y a respetar acuerdos políticos

Aurelio Peláez * El diputado federal priísta Manuel Añorve Baños, expresó que una vez que ha trascendido que se prepara el relevo de la dirigencia del Comité Municipal del PRI en Acapulco, la dirigencia estatal debería promover que éste se diera a partir de una consulta a la base.

El ex presidente municipal de Acapulco, en entrevista telefónica, añadió que “se ha filtrado por varios actores políticos de que habrá un relevo en el Comité Directivo Municipal. En caso de que así se dé, lo que menos podemos permitir es que (la designación del presidente) sea a propuesta del Consejo Político y con votación del mismo consejo, porque lo que requiere el PRI de Acapulco es oxigenación con un proceso interno, que si se realiza correctamente daría legitimidad a quien lo presida”.

A pregunta de cómo debería realizarse este proceso, afirmó que “yo me manifiesto para que sea una consulta a la base, y que quede descartada cualquier crítica de imposición (de la nueva dirigencia) que no creo que sea lo justo para un PRI que tiene que empezar a levantarse”.

Afirmó que demorar el cambio de dirigencia y el comienzo de las precampañas a diputados federales en Acapulco, podría afectar las pretensiones de su partido de recuperar espacios en Acapulco. “Si se tarda más de diez días esta decisión (el cambio del comité), porque ya en este momento traemos el reloj en contra, día que pasa y no se toman decisiones es día que va a resentir la militancia, porque el PRI ya debería traer un programa de trabajo electoral rumbo a las candidaturas del noveno y el décimo distrito”.

Insistió en que “hay que darle prisa a la toma de las decisiones en el relevo del Comité Directivo Municipal, y si no se va a dar que también alguien encare esta situación y lo diga a la militancia priísta”.

De la posibilidad de que el PRI recupere el distrito 10 y no pierda el 09 (que recuperó en el 2000 llevando como candidato a Ernesto Rodríguez Escalona) y reconquiste los espacios políticos en Acapulco, Añorve señaló que “la elección misma (de diputado federal) es bastante complicada, pero si no hay democracia interna y no se hace un trabajo de tejido fino e incluyente, quienes resulten candidatos estarían condenados a una derrota electoral, y para estar en posibilidades de ser competitivos, este tejido fino se debe traducir en inclusión y en unidad política”.

Afirmó tener conocimiento de que el presidente del PRI estatal, Héctor Apreza Patrón, “ha estado recibiendo opiniones de los diferentes grupos políticos y actores del municipio y eso le va a dar un diagnóstico par tomar decisión. Lo que sería positivo es que ésta no tardará mucho”.

El diputado priísta, no obstante, evadió ahondar en su opinión acerca de la posibilidad de que el ex alcalde Zeferino Torreblanca Galindo contienda como candidato por el distrito 09 por el PRD: “Es decisión de él”, dijo.

–¿El PRD enviaría la carga fuerte?

–Ese es asunto de Zeferino. En su momento se verá quiénes son candidatos del PRD y PRI y del PAN, tampoco se tiene que ver a ningún candidato como Superman”.

–¿Sería esta elección en Acapulco un referente para la próxima disputa por la gubernatura?

–Pienso que todas las elecciones son distintas. Lo que pasa es que algunos piensan que Acapulco es Guerrero y no es así. Se vota en todas ciudades y municipios del estado y son distintas las posiciones regionales con Acapulco. Eso es algo que no se debe perder de vista.

Asimismo, en cuanto a que algunos priístas se destapen para contender por la gubernatura –como ya ha sucedido con el senador Héctor Vicario y el diputado federal Efrén leyva Acevedo– comentó que “la sucesión no se debe adelantar en el PRI, que la primera meta son las elecciones federales del 2003, que se debe respetar el acuerdo político de cerrar filas rumbo a esta elección y no encabezar proyectos propios que son legítimos. No los critico, pero son a destiempo. Yo creo que el PRI tiene que poner un alto y después de la elección federal, como en las carreras de caballos, que arranquen los que se quieran inscribir, pero sería grave que los aspirantes provoquen distracciones políticas en estos momentos”.

Añadió que “si queremos que el PRI sea competitivo para las elecciones del 2003 y del 2005, hechos son amores. Debe haber una política incluyente tanto en el Comité Directivo Estatal como en la renovación del municipal, porque ahora el PRI no es asunto de caudillos sino de inclusión. Si se entiende así seremos competitivos, si no cada día estaremos perdiendo terreno con las oposiciones. Hoy todos contamos, desde el más modesto priísta hasta el más encumbrado”.