Caen hasta 30%las ventas, lamentan los vendedores

* Catorce de los participantes son semifijos seguidores de Dalia Serna

Karina Contreras * De los 300 puestos instalados el domingo en el bazar de Día de Reyes, ayer lunes sólo quedaban 30, mientras unos cuantos padres hacían la compra de última hora acompañados de sus hijos.

En el predio habilitado como mercado por el ayuntamiento, comerciantes lamentaban la caída de sus ventas hasta de 30 por ciento.

Uno de ellos, Raúl, quien sólo se cubría del sol con una sombrilla de playa, opinó que la propuesta del alcalde fue improvisada. Agregó que la falta de publicidad para el bazar provocó que sus ventas bajaran en 30 por ciento en comparación con el año pasado, cuando ocupó un espacio en la céntrica calle Mina.

Dijo que esperaba que se comenzara el diálogo para dar alternativas a los desalojados de las vialidades, y pidió al presidente municipal López Rosas que si va a continuar con el bazar procure las condiciones adecuadas.

Pero los locatarios que ocuparon espacios en el bazar dijeron que la venta buena, aunque no la que esperaban.

Pero razonaban que, sin duda, las bajas ventas también ocurrieron en el ámbito nacional “por las crisis económica”. Nada tuvo que ver con la publicidad, que fue “efectiva”, opinaron.

La mayoría de los entrevistados coincidió en que las ventas no fueron las mejores, y que ahora esperan las alternativas de la administración porteña.

Mientras se hacía el recorrido, se observó que los últimos comerciantes del bazar quitaban cuidadosamente el polvo de su mercancía, mientras trataban de llamar la atención de los indecisos padres que elegían entre un helicóptero de 70 pesos o una pista de cien. “Aproveche la oferta, patroncito”, “Pásele, pásele; estamos rematando”, invitaban los vendedores.

Como señal del bazar de Reyes sólo quedaban los 30 puestos, y las varas que sirvieron para sostener las lonas de los improvisados puestos.

En este bazar sólo estuvieron 14 semifijos de cerrada de Vallarta adheridos a la Fecope, de la líder Dalia Serna, mientras que los demás vendieron en las calles céntricas, y a quienes, a decir de la reina de las banquetas, les fue bien.