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El transporte público y puntos negros, las quejas de turistas esta temporada

Nelly Bello * Turistas que ayer acudieron a las terminales de autobuses de Cuauhtémoc, para regresar a sus lugares de origen, calificaron a Acapulco como un buen lugar, pero se quejaron por el servicio del transporte público, la velocidad y forma en que manejan los choferes.

Ayer, las terminales estaban llenas de personas con rostros enrojecidos por la exposición al sol y los cabellos trenzados, como mejor vestigio de la visita a las playas de Acapulco.

En entrevista, la turista del DF, Carla Romero, quien llegó el viernes, lamentó la pronta partida pues regresaría a los congestionamientos viales de su ciudad. “Es una locura”.

También la defeña Maricela Ortega lamentó los puntos negros de basura que hay en la ciudad, y lamentó que la autoridad municipal vigile la limpieza “en la zona de ricos” y descuide el área de colonias populares. Asimismo, criticó la forma de conducir de los choferes de camiones urbanos, “parecen locos o que trasladan animales, deberían controlarlos y no les hacen nada”.

El acapulqueño Carlos Montes, radicado por su trabajo en el DF, dijo que “la ciudad está bonita”, pero ahora aumentó el número de vehículos en el transporte público que circula por todos lados sin control.

La turista de Aguascalientes, Hortensia Ruiz, dijo que los tres días que estuvo en Acapulco fueron excelentes tanto en trato como en servicios públicos.

Mientras que la defeña Mónica Azpeitia, quien llegó el jueves, se quejó del congestionamiento que encontró en la Costera y el mal estado de los taxis; “hay veces que no dan ganas ni de sentarse”.

Reprochó que las playas luzcan sucias por la basura regada a temprana hora en la arena, pero en lo general aseguró que quedaba tentada a regresar.

El acapulqueño Manuel Moreno Carvajal, radicado en Estados Unidos, dijo que viene año con año el puerto para visitar a su familia, y que lo encontró limpio y con “excelente” trato de los prestadores de servicios turísticos, sólo consideró como mal aspecto la ubicación de puntos negros de basura.

La señora María Magdalena Virgen, de Zihuatanejo, estuvo algunos días en Acapulco junto con su familia y un amigo de Alemania, Patrick Santos, que después se fue en avión a su país.

La señora Virgen comentó que el turista alemán aseguró que regresaría al puerto para convertirlo en su segunda casa.

El defeño Joel Zavala señaló que luego de algunos años de no venir a Acapulco, lo encontró más como lugar de fin de semana “que para vivir”.

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