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Exigen en Zumpango y Tepecoacuilco la presencia del Ejército ante el aumento de la violencia

*Pobladores de Mezcala, Carrizalillo, Amatitlán, Atenango, y Valerio Trujano se quejan de amenazas, extorsiones, secuestros y asesinatos por la delincuencia que opera en la zona. Urgen la aprobación de la Policía Rural en esas poblaciones

Alejandro Guerrero

Mezcala, General Canuto Neri (Zumpango)

Vecinos de las comunidades de Mezcala, Carrizalillo, Amatitlán y Atenango, de Zumpango, y de Valerio Trujano, en Tepecoacuilco, exigieron ayer en conferencia de prensa al gobierno del estado la presencia permanente de soldados del Ejército, de la Policía Federal y de la Estatal ante la presencia de grupos de la delincuencia organizada que los amenazan, extorsionan, secuestran y asesinan.
Ayer, cerca de las siete de la tarde, un grupo de 40 pobladores, entre autoridades comisariales y de bienes comunales de Mezcala, Carrizalillo, Amatitlán, Atenango y Valerio Trujano, convocaron a una conferencia de prensa en la comisaría municipal de Mezcala, los presentes pidieron la omisión de sus nombres y no tomar graficas por el temor a los grupos delincuenciales de los que han recibido amenazas.
Los presentes dijeron que los brotes de violencia e inseguridad que se han dado en los últimos días en Mezcala y otras comunidades cercanas “es por el reacomodo que hay de los grupos de la delincuencia organizada que operan en la zona”, aunque no identificaron cuáles son.
Una autoridad comunal asignada para dar las declaraciones a la prensa informó que este viernes, cerca de las nueve de la noche, el comisario municipal de la comunidad de Amatitlán, Natividad Diego García y toda su familia huyeron de este pueblo resguardados por efectivos del Ejército ante las amenazas que recibió por parte de un grupo de sicarios de que sería asesinado con toda su familia.
Pidió que las autoridades “nos brinden protección derivado de que en los últimos días han existido hechos de violencia como balaceras que ponen en riesgo la seguridad de los habitantes de los poblados, lo cual se debe al reacomodo de los grupos del crimen organizado”.
Informó, a pregunta hecha, que en las últimas semanas al menos tres personas han sido secuestradas y hasta ayer no habían aparecido.
Agregó que hay más gente que ha sido levantada, pero de la que no tienen registro porque no son del pueblo y otras más que no denuncian.
Dijo que han recibido amenazas de muerte, balaceras y secuestros, que atribuyen a un grupo de unos 100 hombres armados asentado en Amatlán y Tenantla.
Dijo que hasta diciembre pasado estaban sujetos al pago de piso a un grupo de la delincuencia organizada, aunque no dio a conocer la cantidad que se les cobraba a empleados de las minas y comisariados ejidales, “desconozco a quién se le hacían los pagos porque se hacían de manera muy particular”.
Dijo que toda la región, desde Mezcala hacia la zona serrana, como Carrizalillo, Amatitlán, Tenantla, Puente Sur Balsas y Atenango, y la zona en la que está asentada la minera, son las zonas en donde mayor presencia de los grupos de la delincuencia hay.
Se le preguntó qué grupos de la delincuencia son los que operan en la zona y dijo desconocerlo, pero afirmó que sí son grupos delincuenciales.
Señaló que el domingo 17 de agosto, cuando se registró un enfrentamiento entre grupos antagónicos de la delincuencia, fue asignado un grupo de unos 30 efectivos militares, los cuales no están de manera permanente resguardando la zona.
Dijo que cuando los militares se van es cuando ocurren los enfrentamientos, las extorsiones, los secuestros y los asesinatos.
Señaló que hay operaciones esporádicas de las fuerzas de seguridad pública, sólo cuando se registra el repunte de la violencia.
Consideró que el conflicto entre los grupos armados es porque están en pelea por la plaza, “antes este pueblo era muy tranquilo y a raíz de que existe una derrama económica considerable es que existe ese problema de inseguridad”.
Asimismo demandaron al gobierno del estado y al alcalde de General Canuto Neri, Ignacio Basilio, y al gobernador del estado, Ángel Aguirre Rivero, la aprobación de la creación de la Policía Rural, petición que lleva unos tres meses en manos del gobierno.
Ayer, en la visita a esta comunidad se notó sólo la presencia de dos unidades del Ejército a la orilla del pueblo, la cual minutos más tarde se retiró del lugar.

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