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El 90 por ciento de las mujeres indígenas son golpeadas, la mayoría por sus esposos

* La organización mixteca Ndu Na Ñuu Savi elaboró un diagnóstico de la violencia contra las mujeres indígenas, informa Hermelinda Tiburcio

 De la Redacción  

El 90 por ciento de las mujeres indígenas han sido golpeadas, y en el 71 por ciento de los casos los golpeadores son los esposos, según un estudio de la organización (Nosotros los Pueblos Mixtecos)

El diagnóstico se hizo con base en entrevistas en comunidades de 11 municipios indígenas mixtecas, nahuas, amuzgas y tlapanecas, entre el 23 de octubre y el 16 de diciembre, y se presentaron los resultados el 17 de diciembre, informó la dirigente de esa organización, Hermelinda Tiburcio Cayetano.

El informe también revela que son más golpeadas las mujeres adultas que las niñas. El 71 por ciento de las entrevistadas dijeron que fueron golpeadas cuando ya estaban casadas, 32 por ciento cuando eran muchachas y 45 por ciento cuando eran niñas, y algunas en dos o en las tres épocas de su vida.

El diagnóstico se dará a conocer en asambleas comunitarias, con el fin de sensibilizar a las mismas mujeres, a las autoridades de los pueblos y a los hombres, sobre el grave problema de la violencia contra las mujeres indígenas, dijo Hermelinda Tiburcio.

Explicó que la organización Ndu Naa Ñu Savi se dedicó a estudiar el problema de la violencia contra las mujeres indígenas a partir del trabajo que hicieron en la casa de salud de las mujeres indígenas en Ometepec, adonde muchas mujeres llegan con maltrato.

“Comenzamos a buscar la raíz del problema y encontramos que la violencia en las comunidades es muy relevante, pero las mujeres poco lo dicen, algunas que llegan golpeadas dicen que se cayeron, que se lastimaron, pero no quieren reconocer lo que les pasa”.

Explica que presentaron el proyecto para hacer un diagnóstico de la violencia hacia las mujeres indígenas al programa de procuración de justicia de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (Conadepi), y este organismo del gobierno federal apoyó a la organización con pocos recursos.

Así, 23 mujeres líderes de varias organizaciones integrantes de la Coordinadora Guerrerense de Mujeres Indígenas participaron en un taller, el 22 y 23 de octubre. Después, ellas fueron a entrevistar a las mujeres a sus comunidades, y con las entrevistas presentaron el primer diagnóstico.

Entre los lugares donde entrevistaron a mujeresindígenas están, en el municipio de

Copanatoyac, la comunidad de Patlicha; en San Luis Acatlán, las comunidades de Benavista, Yoloxóchitl y Poterillo Coapinole: en Tlacoachistlahuaca, Rancho Viejo y Llano del Tigre; en Xochistlahuaca, La Soledad.

En Ometepec, en la comunidad de Huixtepec; en Copalillo en la cabecera municipal: en Huitzuco, en la comunidad de Nanche Dulce y la cabecera municipal; en Chilapa, en El Limón; en Metlatónoc, Río Encajonado; en Igualapa, Llano Grande de los Hilarios, Llano Grande de Juárez y San José Buenavista, y en Atlixtac.

Dijo que con este estudio se documenta que existe la violencia física, psicológica, emocional y sexual contra las mujeres indígenas.

“La intención es que las mujeres se concienticen y que los comisarios también, porque ellos no hacen justicia y van a favor de los hombres, por eso los hombres siguen golpeando a la mujer”, expuso en entrevista.

–¿Crees que la violencia contra las mujeres indígena es mayor que contra las mujeres mestizas?

–La violencia contra la mujer es característica de toda la sociedad, pero en las indígenas es más. Las mestizas están más cerca del Ministerio Público, tienen más información, y tienen más recursos de todos tipos para apoyarse. En cambio las idígenas no tienen justicia, no tienen información, no tienen oportunidades, el nivel económico en que viven no les permite tomar decisiones de denunciar porque no pueden mantener ellas a sus hijos.

–Algunos piensan que el maltrato a la mujer es una característica del la cultura indígena.

–Decimos que en la cultura de los pueblos hay cosas buenas que hay que preservar y defender y hay cosas malas que hay que quitar, como la violencia contra las mujeres.

“Muchas mujeres que participamos en organizaciones indígenas planteamos que no negamos la violencia, reconocemos que existe y que es algo que no debemos preservar. Creemos que es necesario reconocer la violencia, y que lastima a las mujeres físicamente y en sus sentimientos, para poder darle un tratamiento al problema”.

Porqué son golpeadas las mujeres indígenas

En el documento Formas de violencia hacia niñas y mujeres indígenas (diagnóstico del estado de Guerrero), se plantea que la violencia es “cualquier comportamiento físico o verbal destinado a dañar o destruir, al margen de que se manifieste con hostilidad o como acto frío y calculado para alcanzar un fin”.

Una pregunta en las entrevistas, que fueron aplicadas a cien mujeres es ¿Alguna vez has sido golpeada? , y 90 dijeron que sí y 10 que no.

A la pregunta de cuál ha sido el motivo, las respuestas más frecuentes en las mujeres casadas son porque el esposo se emborracha, porque tiene otra mujer, porque no hago las cosas rápido, por ir a traer leña, porque no lavo la ropa, porque no hay comisa y no hay dinero, por quebrar trastes, porque no obedezco todo lo que él quiere, o por decirle al esposo que cumpla con su deber.

En las niñas, “por no hacer mandados” y en las muchachas porque tienen una amiga, o porque su papá la vio platicando con el novio.

Algunas de las entrevistadas respondieron que les pegan “por ser mujer”.

A la pregunta ¿de quién recibiste el golpe?, el 67 por ciento contestó que del esposo, el 17 por ciento de su mamá, el 10 por ciento del papá, y de otras personas en menor proporción.

Otra pregunta fue si tiene cicatriz y en qué parte del cuerpo. Las respuestas fueron: “en la cabeza, en la mano, en el labio, moretones en el cuerpo, me mordió en el pecho, en el dedo, en lomo, en los pies, en la nariz, en la cadera, en el brazo, mano, en codo, en la espalda, en el pie izquierdo y                                                 hubo casos que le escribieron “tengo cicatriz en el alma y en el corazón” y “puro golpes sin cicatriz”.

A la pregunta de con qué te pegó, respondieron: “Palo, reata o mecate, pedazo de cuero, leña, otate, pie, envase, mano, pedazo de olla, soga, machete, plato, cinturón, con silla, con la patada, con hacha, cable, con barra, con una bandeja, con huaraches, arrastrada y jalones de pelos, con lo que encontrara”.

Otra pregunta es ¿en tu comunidad has visto que golpeen a otras mujeres?, y 53 contestaron que sí y 15 dijo que no.

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