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Torturan militares a policías rurales de Cocula, denuncia el líder de trabajadores de la minera Media Luna

Alejandro Guerrero

Iguala

Policías rurales municipales de cuatro pueblos de Cocula conformaron una alianza para exigir al gobierno estatal y federal el respeto a su autoridad, luego de que soldados del Ejército detuvieron, golpearon y torturaron a seis de ellos de la comunidad de Atzcala. En declaraciones vía telefónica ayer por la tarde, el presidente de la mesa de trabajadores de la minera Media Luna, en la comunidad de Atzcala, Daniel Román Cerón recordó que el 13 de diciembre se levantaron en armas los pueblos de Nuevo Balsas, Atzcala, Real de Limón y la Fundición ante las constantes agresiones, extorsiones, secuestros y asesinatos que cometían grupos de la delincuencia. Informó que el miércoles tuvieron una reunión entre habitantes de los cuatro pueblos encabezados por comisarios de Nuevo Balsas Juan Salgado Delgado; de la Fundición, Francisco Sotelo Soto; de Real Limón, Nabor Cervantes Román y Ángel Morales Román de Atzcala. Recordó que hace un año sufrían de secuestros, extorsiones, pago de cuotas, levantones y asesinatos por grupos de la delincuencia que tenían aterrorizada a la población que ya no salía de sus casas después de las siete de la noche. Denunció que el lunes, alrededor de las 9:00 de mañana, dos policías rurales del poblado de Atzcala, de nombre Donaciano Román Peralta y Daniel Martínez Rebolledo viajaban en taxi rumbo a su pueblo de Atzcala cuando fueron interceptados por dos camionetas de militares. Los soldados los bajaron y golpearon a pesar de que se identificaron como policías rurales. Posteriormente, alrededor de las 11 de la mañana de ese día, los militares interceptaron a una camioneta de la Policía Rural de Atzcala donde viajaban cuatro agentes: Gregorio Cuevas Morales, José Isabel Román Cerón, Alberto Rebolledo Cuevas y Alejandro Peralta Rebolledo. Los militares les ordenaron que entregaran sus armas y los sentaron en el piso y uno a uno se los llevaron a un barranco en donde los interrogaron y golpearon, también los amenazaron con ejecutarlos y degollarlos, o que les sembrarían armas para encarcelarlos. Los seis policías rurales, después de ser agredidos fueron al Ayuntamiento de Cocula para levantar un acta de lo ocurrido, además de presentar formal denuncia en el Ministerio Público por los delitos de abuso de autoridad y lesiones. Román Cerón dijo que su petición al gobierno estatal y federal es el respeto y reconocimiento a los cerca de 250 miembros de la Policía Rural Municipal que conformaron con gente de los cuatro pueblos y se armaron con escopetas y rifles calibre 22 para defender a sus familias y sus precarias pertenencias. “Queremos que nos volteen a ver para que por lo menos nos ofrezcan seguridad y que volteen a ver estas cuatro comunidades y no sólo cuando paga sus impuestos la mina”, exigió. Dijo que la minera Media Luna, asentada en Nuevo Balsas tiene a su disposición a unos 60 policías estatales pero sólo para su seguridad y no para la seguridad de los pobladores. “Estamos dispuestos a defender a nuestras familias y nuestro patrimonio porque el gobierno no ha podido resolver la problemática de inseguridad que hemos vivido desde hace años”, acusó. Recordó que el 13 de diciembre de 2013, los delincuentes mataron a un joven y una señora en Nuevo Balsas que vendía verduras en la calle, y los asesinaron porque no pudieron pagar la cuota que les pidieron. A partir de esa fecha formaron la Policía Rural Municipal y desde su creación ya no han sufrido las agresiones del crimen. Recordó que anteriormente los delincuentes les cobraban a los pescadores una cuota de dos pesos por cada kilogramo de pescado que sacaban del río y dijo que más de 300 pescadores de los cuatro pueblos llegaban a sacar hasta más de 40 toneladas de pescado, lo que representaba el pago de una cuota aproximada de hasta 60 mil pesos en una semana a los delincuentes durante tres años. Denunció que tenían secuestros cada ocho días, “ya nada más veíamos, y ahora a quién le va a tocar la bolita, porque hasta por 10 mil pesos te llevaban”. Trabajadores de la minera Media Luna, asentada en la comunidad de Nuevo Balsas, municipio de Cocula, iniciaron la noche del martes un paro de labores y bloquearon el acceso a la minera para demandar mejores prestaciones y mayor capacitación. Román Cerón informó que cerca de las 10 de la noche del martes unos 180 trabajadores, vecinos de las comunidades de Atzcala, pararon porque “hay ingenieros de recursos humanos, llamados cabos, de la minera que agreden verbalmente a los empleados”.

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