Marcial Rodríguez Saldaña

A un año de la tragedia

Este 13 de septiembre se cumple un año del inicio de la tormenta tropical Manuel y el huracán Ingrid, que ocasionaron una de las más graves tragedias de las que se tenga memoria en Acapulco y en el estado de Guerrero. Es una fecha muy simbólica para nuestra entidad y país, en virtud de que cada año se celebra la proclamación de los Sentimientos de la Nación, hecha por José María Morelos y Pavón.
1. Al paso del tiempo, a doce meses de estos hechos trágicos se puede recapitular y decir que no hubo una actuación oportuna de las autoridades de los tres niveles de gobierno, de quienes tienen la responsabilidad de dar protección civil a la ciudadanía, de quienes cuentan con los instrumentos tecnológicos para conocer y advertir la presencia de huracanes, ya que no se alertó adecuadamente a la población, debido a que dejaron correr algunas horas claves desde que inició la tormenta para auxiliar a la gente, por lo que se pudieron evitar daños materiales, pero sobre todo la pérdida de vidas humanas.
2. La actuación del gobierno federal ha sido muy irregular, ya que se hicieron padrones para apoyar a los damnificados en donde hubo muchas personas excluidas, han existido cuestionamientos sobre el tipo de viviendas, la calidad de la construcción y el sobreprecio de las mismas, se han rehabilitado algunos puentes pero aún faltan muchos como el de Lomas de Chapultepec que comunica a Acapulco con la Costa Chica, y especialmente en las zonas rurales alejadas de las grandes urbes, en donde todavía no se han terminado la mayoría de los puentes, no se han reconstruido los caminos, por lo que miles de campesinos estarán incomunicados en esta época de lluvias.
3. Desafortunadamente a causa de esta tragedia en la que perdieron la vida cientos de guerrerenses, es que el gobierno federal volteó los ojos a nuestro estado para anunciar con espectacularidad el Plan Nuevo Guerrero con una inversión de 30 mil millones de pesos, pero aun cuando ya se va a cumplir un año de la tragedia, todavía quedan muchos pendientes en lo que se refiere a la reconstrucción, y no hay obras nuevas de infraestructura en comunicaciones ni acciones relevantes que impulsen la economía y fomenten el empleo, que reactiven la producción en el campo para que de manera integral proyecten el desarrollo económico y social que combata de raíz la pobreza en Guerrero.
4. Peña Nieto se comprometió a realizar las investigaciones para castigar a los funcionarios que autorizaron permisos para construir viviendas en zonas de riesgo, en donde precisamente hubo las inundaciones que provocaron Manuel e Ingrid y que ocasionaron que muchas familias perdieran su patrimonio, pero a la fecha, a casi un año de la tragedia, se mantienen en la total impunidad estos hechos sobre los cuales debe exigirse que se cumpla con la obligación que tienen las autoridades en turno, para que rindan un informe de qué es lo que han hecho hasta ahora en este tema.
5. Ojalá que a la mayor brevedad se termine la reconstrucción de todo lo que dañaron Manuel e Ingrid, que en lo que sea posible materialmente que forme parte de la acción humana del gobierno, se restablezcan las cosas al estado que existía antes de los huracanes, que se planeen las obras para que no se corran los mismos riesgos, que se apruebe un presupuesto suficiente para generar el mayor bienestar de los guerrerenses y se tomen todas las medidas de prevención para que no vuelva a ocurrir una nueva tragedia.

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