Crónica de sucesos en el encuentro de gobernadores

 Banquetes y todo tipo de atenciones en la sede de la reunión de la Conago

 Ricardo Castillo Díaz  

Con el sello del Acapulco de la tradición hospitalaria, el gobierno del estado recibió este viernes en la exclusiva Zona Diamante a 22 gobernadores y representantes de diversos estados, que participaron en la Vigésima Segunda Reunión Ordinaria de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), y quienes resaltaron la acogida que les dio el puerto, su gente y el gobernador René Juárez Cisneros en su calidad de anfitrión.

Para gobernadores, sus comitivas, y hasta para reporteros enviados y locales, hubo banquetes, lujos y todo tipo de atenciones en el hotel The Fairmont Princess, en esta que es una de las zonas más caras para avecindarse en el Pacífico mexicano.

Aquí, el amplísimo salón Marquesa para la sesión plenaria de la Conago; cerca, el salón Atlantes, habilitado como una completa sala de prensa. Allá, el restaurante La Hacienda para la comilona de los gobernadores; el Veranda para la de los secretarios de Finanzas; el Chula Vista para el bufete de carnes, pescados y mariscos para reporteros; el gym y el spa para las esposas de los visitantes; y para sus hijos, las albercas y la extensa playa Revolcadero.

El arrullo del mar abierto y el ambiente que propició el gobierno de Guerrero en la organización, logró que los gobernadores colgaran los trajes y dejaran las formalidades, que incluso animó a algunos a terminar la jornada pasadas las 6 de la tarde, de shopping en La Gran Plaza como fue el caso del cuestionadísimo gobernador panista de Morelos Sergio Estrada Cagijal, acompañado de su rubia esposa.

René Juárez llenó de atenciones a la gobernadora perredista de Zacatecas, Amalia García Medina, a quien no se le despegó hasta que concluyó la reunión, y quien le correspondió al guerrerense con constantes agradecimientos públicos por su hospitalidad.

“Gracias, René, eres igual que siempre”, le dijo también el gobernador panista de Guanajuato, Juan Carlos Romero Hicks, en una de sus últimas intervenciones en la reunión de gobernadores.

Hasta el director de Comunicación Social, César Bajos prestaba su celular a los reporteros, algunos de los cuales –en otra de las muestras de la cortesía de los anfitriones– tuvieron acceso a la plenaria de la Conago, cuyas sesiones tienen fama por su privacía.

Hospitalidad, hasta para posibles manifestantes

Distribuidos en comisiones, los secretarios y subsecretarios del gabinete renejuarista atendían a los participantes de la Conago. Hasta el secretario de Gobierno, Luis León Aponte, dejaba dibujar sonrisas, aún en medio de las posibles protestas afuera de la sede de la reunión de gobernadores, como lo habían advertido ex braceros encabezados por Ventura Gutiérrez, y hasta los opositores a la construcción de la hidroeléctrica La Parota, grupos que al final no trasladaron sus protestas al lugar.

También en plan de anfitrión, incluso el mayor León Aponte dio la orden de recibir con cierta hospitalidad –distinta a sus conocidas recepciones cuando se trata de manifestantes que llegan a este tipo de eventos sin invitación–, a los cerca de 30 integrantes de la Alianza Ciudadana Bracero Proa que llegaron alrededor de las 11de la mañana a los límites de un hotel Princess sitiado por policías, en donde pretendían ser recibidos por alguna autoridad.

La petición central de esa agrupación en México ha sido la devolución del fondo de ahorro que se acumuló cuando trabajaron en Estados Unidos entre 1942 y 1966, con los intereses que han causado durante más de 50 años.

Este grupo de dirigentes de ex braceros pedía que René Juárez fungiera como interlocutor en la reunión que adentro sostenían los gobernadores, para exponerles tal petición, pero fueron interceptados por agentes de la Dirección de Gobernación, quienes les obstruyeron el paso.

El director Rey Hilario Serrano envió a un representante, quien solicitó que se formara una comisión para que entregara el documento a otro de los funcionarios estatales que estaban en la reunión.

Ventura Gutiérrez Méndez encabezaba este grupo, que finalmente logró que minutos más tarde el gobernador René Juárez leyera al pleno de la Conago la petición de los ex braceros para que en la siguiente reunión de gobernadores –que se celebrará en Zacatecas– sean invitados para que escuchen sus demandas.

El punto fue aprobado por unanimidad, y con ello el gobierno guerrerense volvió a impresionar a los gobernadores, como si se tratara de un empeño por demostrar cómo se atiende en Acapulco a los visitantes, aunque sea por este día.