Van 10 ejecuciones en el puerto desde febrero

Las dos ejecuciones de este viernes se suman a la de un joven asesinado a un costado del parque acuático CICI, de dos policías preventivos turísticos y dos colombianos, además de otros casos similares ocurridos en este año.

El sábado 13 de este mes, en la calle Fragata Endebaur, ubicada entre el CICI y Planet Hollywood, Gregorio Valeriano Olivera murió porque individuos vestidos de negro lo mataron de 17 impactos de AK 47 cuando, según testigos, huía de éstos.

Versiones señalan que ese sábado cerca del McDonalds ubicado cerca de la Casa de la Cultura se reunieron los individuos vestidos de negro y la víctima que era acompañada de otros dos hombres, luego de una discusión mataron a uno, subieron a otro a un automóvil con vidrios polarizados y se llevaron a otro que asesinaron.

El martes 12 de octubre, los policías preventivos turísticos, Marcos Medina Ojeda y Daniel Rodríguez Chávez, fueron asesinados cuando se encontraba parados cerca de la discoteca Ole Mamy.

El jueves 16, en distintos puntos de la periferia de la ciudad al estilo narco mataron a los jóvenes colombianos, Gustavo Adolfo Escobar Escobar y Diego Fernando Rivillas Hoyos. Al primero lo mataron en la avenida Veladero de la colonia Praderas de Guadalupe, asentamiento cercano a la colonia Carabalí; el segundo, en la colonia Jardín, cerca de la estación Tehuacán del fraccionamiento Costa Brava, en una bajada.

Otros casos similares, son el del abogado Juan Antonio Ávila Chávez asesinado el 14 de febrero, cuando viajaba en su camioneta en Pie de la Cuesta.

También asesinaron a el policía judicial del estado que perteneció al grupo Tigre, que funcionó durante el mandato de Rubén Figueroa Figueroa, y era adversario de los movimientos sociales, José Luis Montero Pérez, el 9 de marzo en La Curva del Capitán, a un lado de la colonia irregular Venustiano Carranza. Éste murió de tres disparos, uno en la cabeza y dos en el pecho.

El 19 de marzo, el taxista, Lucio Isauro Peñaloza Peñaloza, originario de Tierra Caliente, de 35 años, fue ejecutado de seis balazos en un predio solitario ubicado en calle Cantiles, del fraccionamiento Mozimba, a quien encontraron con las manos atadas hacia atrás con una correa de una mochila negra.