Damnificados de Tixtla impiden el Grito y marchan por la Independencia; exigen resolver inundaciones

*Piden también apresurar la reconstrucción, y reubicación de las viviendas afectadas por Manuel el año pasado. En reunión con los inconformes, informa el alcalde, Gustavo Alcaraz, que hay una alerta naranja porque las presas de Agua Potable y El Molino podrían desbordarse por las lluvias. No hay maquinaria para desazolvar los canales que se desbordaron el domingo en la ciudad, reconoce

Jacob Morales Antonio

Tixtla

Damnificados por la tormenta Manuel marcharon e impidieron el acto oficial del Grito de Independencia en Tixtla, la noche del lunes, y ayer marcharon en el desfile cívico para exigir al alcalde, Gustavo Alcaraz Abarca, y al gobierno del estado la solución definitiva al peligro de la inundación de la laguna Negra.
Ayer en una reunión improvisada a las afueras del Palacio Municipal el presidente informó a los inconformes que existe una alerta naranja, por el exceso de agua en las presas de Agua Potable y El Molino, que podrían desbordarse por las lluvias.
Reconoció que no hay maquinaria para desazolvar lo canales de los ríos Coxtlapa y Jaltipan que pasan por la ciudad y se desbordaron el domingo.
El lunes 15 unos mil vecinos marcharon del barrio de El Santuario a la Presidencia Municipal en el centro de la ciudad para demandar a los tres niveles de gobierno apresurar la reconstrucción, reubicación de las viviendas afectadas por el meteoro del año pasado, y la solución definitiva para no padecer otra vez la inundación de la laguna Negra.
Los inconformes salieron alrededor de las 4 de la tarde de las inmediaciones de la iglesia del barrio. Consignas como “Pueblo despierta, la laguna está en tu puerta; La laguna está creciendo y Gustavo está durmiendo; Si Morelos viviera que chinga les pusiera; Pueblo escucha y únete a la lucha: iniciamos nuestro grito de independencia, con un grito de solución a los damnificados (sic)”, se oían en el trayecto.
Mientras los oradores en las bocinas repudiaban al presidente Enrique Peña Nieto que informó en los medios de comunicación que todo estaba bien en Tixtla y lo invitaron a regresar a la ciudad para que constate que son pocos los avances en la reconstrucción.
La gente de los barrios de San Antonio, Camposanto y Cantarranas exigieron al gobernador Ángel Aguirre Rivero y al goberno federal asumir su responsabilidad y atender a los damnificados porque luego de un año siguen padeciendo afectaciones.
Alrededor de las 7 de la noche del lunes 15 los inconformes tomaron el escenario donde se realizaría el acto oficial del Grito de Independencia, que fue suspendido por la protesta, y hasta después de las 12 de la noche permanecieron ahí los manifestantes. Al lugar arribaron integrantes de la Policía Comunitaria en apoyo a los damnificados.
El integrate del Consejo de Damnificados, José Juan Casarrubias, exigió información adecuada a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) sobre las condiciones de la laguna Negra, y reclamó por el nulo avance en la petición del proyecto integral para dar fin a las inundaciones.
Dijo que las familias temen una nueva inundación de las aguas negras como la de hace un año, porque las lluvias recientes han incrementado el caudal de la laguna que se encuentra a unos 600 metros de las casas.
Expresó que la lluvia del domingo provocó que los ríos Coxtlapa y Jaltipan se desbordaran, y afectó a 19 familias por la falta de limpieza de los canales.

Protesta en el desfile cívico

Ayer unos 500 damnificados marcharon en el desfile cívico del 16 de septiembre en Tixtla, y frente al templete gritaron consignas contra el alcalde que presidió el acto y demandaron una solución al peligro de otra inundación de la ciudad por el aumento en el nivel de la laguna.
Las familias que acudieron a ver el paso de los contingentes de las diferentes escuelas de educación básica, media superior y superior apoyaron a los inconformes con aplausos, mientras un grupo de policías resguardó el templete donde se encontraba el presidente y funcionarios municipales.
Luego de la protesta, los inconformes se trasladaron al Palacio Municipal y colocaron una manta que decía “Peña Nieto, Tixtla también es Guerrero. Estuvimos 3 meses bajo el agua y aún seguimos abandonados”.
Minutos más tarde arribó el alcalde Alcaraz Abarca quien prometió a los damnificados que este miércoles una comisión sería atendida por el gobierno del estado en Acapulco.
En la reunión improvisada frente al Palacio Municipal, el alcalde dijo que la basura provocó las afectaciones a las casas de las colonias Niños Héroes y el barrio del Santuario por el desbordamiento de los ríos. “No es culpa mía que las lluvias estén de esta manera y ustedes dicen que yo soy el culpable”, expresó.
Llamó a los tixtlecos a estar alegres por la fiestas patrias porque la mayoría de los habitantes de Tixtla lo estaba, pero los ciudadanos presentes le respondieron que tienen miedo por las lluvias y el aumento del nivel de la laguna.
El alcalde informó que el municipio se encuentran en alerta naranja por el aumento de las presas de El Molino y Agua Potable que podrían desbordarse, además por las constantes lluvias y la formación de la tormenta tropical Polo.
En breves declaraciones alos medios dijo que el lunes no se presentó a dialogar con los inconformes por la presencia de integrantes de la Policía Comunitaria, a quienes se refirió como gente armada, y dijo que po eso “no había condiciones”, y además porque no fue convocado. Reconoció que no hay avances en el proyecto de construción del proyecto de saneamiento de la laguna y para evitar que se salga de su margen.