Rinden homenaje a dos guerrilleros caídos en un enfrentamiento con policías en Atoyac

La tumba de Isidro Molina, fallecido el 10 de noviembre de 1998, junto con otro joven de nombre Ricardo, fue visitada por integrantes de organizaciones sociales

   Francisco Magaña Atoyac  

Con un homenaje, organizaciones sociales recordaron a los guerrilleros Isidro Molina, alias Ricardo, y a Ricardo, muertos en un enfrentamiento con policías en San Juan de las Flores, municipio de Atoyac, el 10 de noviembre de 1998.

Las organizaciones sociales Consejo Cívico Comunitario Lucio Cabañas Barrientos y el Frente Ciudadano Atoyaquense visitaron la tumba del guerrillero Isidro Molina, quien junto con Ricardo –sólo se le recuerda con ese nombre– murieron en un enfrentamiento, donde también falleció un agente de la Policía Motorizada.

El acto se efectuó en el panteón municipal Libertad –donde yacen también los dos eperristas que murieron en El Guanábano-, ubicado en la periferia. Allí Isidro Molina fue reconocido por su padre Isidro Molina Sánchez, originario de Plan del Carrizo.

Los integrantes de las organizaciones, encabezadas por José Luis Arroyo Castro, del CCCLCB, y Estela Arroyo, del FCA, indicaron que recuerdan con orgullo a los jóvenes que entregaron su vida para buscar un cambio en el país, “el cual está hundido en la pobreza por falta de justicia y progreso para los más necesitados”.

Arroyo Castro dijo que aunque sólo está sepultado en ese panteón uno de los dos jóvenes muertos, también recuerdan a Ricardo porque peleó por un ideal.

Criticaron que el gobierno obligara a los jóvenes a tomar las armas, y exigieron la entrega del cuerpo del joven Ricardo para darle sepultura.

La tumba de isidro Molina fue cubierta con la bandera de PDLP, y a sus costados la imagen de los guerrilleros Lucio Cabañas y el Che Guevara.

Asimismo, se colocaron dos ramos de flores de cempasúchil y se entonaron el Himno Nacional y la Internacional.

En 2001, aparecieron –en estas mismas fechas– aproximadamente 40 encapuchados en el puente de Mexcaltepec, para conmemorar el Día del Guerrillero, y donde dejaron un artefacto explosivo que mantuvo por dos días a soldados de la 27 Zona Militar inspeccionando el lugar.