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Opositores a La Parota piden a López Rosas no enviar policías municipales

 Responderán a las agresiones y será responsabilidad de la autoridad lo que suceda, le dicen al alcalde. El presidente municipal asegura que no ha enviado ni enviará la policía porque busca la paz y que tomará una decisión con base en el diálogo con los campesinos  

Karina Contreras  

El alcalde Alberto López Rosas se reunió con comuneros opositores a la presa La Parota, encabezados por Marco Antonio Suástegui Muñoz, quienes pidieron que se abstenga de enviar la Policía Preventiva, como lo solicitaron autoridades ejidales de comunidades a quienes la Comisión Federal de Electricidad (CFE) les prometió obras sociales, y que actúe con responsabilidad porque, de lo contrario, responderán a las agresiones y será responsabilidad de la autoridad lo que allí suceda.

Alrededor de 90 comuneros opositores al proyecto de la hidroeléctrica, que la CFE pretende construir en los Bienes Comunales de Cacahuatepec, llegaron desde las 11 de la mañana al ayuntamiento con la intención de entregar un documento al alcalde.

López Rosas dijo que no ha enviado ni enviará la policía porque busca que permanezca la paz en esa zona que se mantiene en conflicto desde hace un año y medio. Agregó que tomará una decisión responsable que le corresponde como gobierno municipal, la cual será con base en las pláticas que sostenga con los comuneros.

El documento

En el documento, que está signado también por autoridades ejidales que están contra el proyecto, le piden a López Rosas que no envíe la Policía Preventiva a la zona en conflicto para que los desaloje de los plantones que tienen para evitar que ingrese maquinaria de la CFE, como lo solicitaron autoridades ejidales de San José Cacahuatepec, Cruces de Cacahuatepec, El Rincón, entre otros, el pasado 30 de octubre.

El escrito dice que la empresa está “incitando a la violencia en los bienes comunales de Cacahuatepec y en los ejidos amenazados con ser desplazados y desalojados de nuestras tierras”, y agrega que quienes hicieron la solicitud fueron acompañados “por asesores rebasados y desprestigiados, por haber demostrados sus interés y sus acuerdos firmados con la CFE a espalda de los pueblos”.

En otro punto manifiestan que a la CFE no le corresponde hacer obras sociales, pues su función es generar, conducir y distribuir energía eléctrica, y añaden que los tres ámbitos de gobierno han faltado a sus deberes, al no atender ni ejecutar obras sociales que les corresponden, y sí permiten que la empresa “impunemente” programe obras con el objetivo de dividir y violentar a los pueblos de la zona”.

Precisan al gobierno del estado que actúan de manera legal, pues defienden sus tierras. Recuerdan que no han aprobado la Manifestación de Impacto Ambiental del proyecto y que todavía hay una audiencia en el Tribunal Unitario Agrario (TUA) número 41 para anular la asamblea del 25 de abril.

No nos traiciones: comuneros

El alcalde López Rosas llegó al Ayuntamiento alrededor del medidía e, inmediatamente, fue abordado por los comuneros opositores, a quienes dijo que sólo los podría atender 10 minutos, pues estaban fuera de agenda, y les recordó que la audiencia con ellos es el 23 de noviembre.

Luego, López Rosas y los campesinos se dirigieron a la sala de Cabildo donde empezó un diálogo informal. Allí, el portavoz de los comuneros, Marco Antonio Suástegui Muñoz, le informó al alcalde que su lucha no es contra los particulares sino contra la CFE, y que los bloqueos no tenía porque desalojarlos.

Acusó que el escrito entregado el 30 de octubre por algunas autoridades ejidales era porque las cosas se estaban tomando de manera personal.

Agregó que como López Rosas siempre les ha dado su apoyo, por eso “hoy solicitamos que no intervenga mandando la policía, pues, de lo contrario, vamos hacerlo responsable porque los vamos a recibir a machetes”.

Se escucharon gritos como “Alberto no nos traiciones”, “No a la presa” y “Somos indios huarachudos, pero nos vamos a defender”. Una señora molesta le dijo que “le dimos nuestro voto, no nos traiciones, no queremos la presa”.

En su intervención, López Rosas les recordó que no ha envíado a los policías a la zona y que sus reproches eran infundados. Luego, dijo que recibía el escrito con respeto, pero que recordaran que era el presidente municipal y tiene la obligación de escuchar a todo.

Expuso: “soy el principal interesado en evitar que haya violencia en ese lado, estoy actuando responsablemente, si no actuara así fomentaría esas rivalidades, fomentaría esas pugnas que nos van a llevar hechos de violencia que no queremos y los vamos a tratar de evitar a toda costa”.

Añadió que atiende el asunto con mucha responsabilidad y que respeta su postura de no querer la presa, pero les pidió que prevalezca la cordura y la tranquilidad en ese lugar. Se comprometió a seguir platicando y la decisión que tome será con base en el diálogo.

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