El enfrentamiento de Apaxtla, por problemas de narcos, dice el alcalde

 Se refiere a dos de los muertos, José Salazar Contreras originario de Sinaloa y Neftalí Esquivel Flores, de Cuernavaca, pero excluye de ese ilícito a los hermanos Heriberto y Ascención Trujillo Sotelo, que eran vecinos de esta cabecera municipal

 Teresa de la Cruz Apaxtla de Castrejón  

Para el presidente municipal de Apaxtla de Castrejón, Victorino Ávila Jiménez, el enfrentamiento a balazos en el que murieron cinco personas, entre ellas un niño de 7 años, es un hecho “aislado” y confirmó que el enfrentamiento tiene que ver con problemas de narcotráfico, pero deslindó de esa actividad a los hermanos Ascención y Heriberto Trujillo Sotelo, quienes eran vecinos de este municipio.

Consultado en sus oficinas, luego de la sesión de Cabildo en la que los ediles acordaron incrementar el número de efectivos de la Policía Preventiva Municipal, Ávila Jiménez expuso que en el momento en que aconteció el enfrentamiento, él se encontraba en la comunidad de Xochitepec “supervisando una línea de alta tensión” que servirá a esa comunidad.

Sin embargo indicó que al llegar a la cabecera municipal, aproximadamente a las 10 de la noche del sábado, el director de Seguridad Pública Municipal, Juan Móntufar Trujillo le informó de lo ocurrido cerca de la gasolinera en la entrada de Apaxtla, en la que murieron el niño de 7 años Cristofer Bahena Barut, los hermanos Heriberto y Ascención Trujillo Sotelo, así como José Salazar Contreras y Neptalí Esquivel Flores, quienes son vecinos de Sinaloa y Cuernavaca respectivamente.

Según Ávila Jiménez, el enfrentamiento se registró a las 5:40 de la tarde y ante los acontecimientos, los vecinos cercanos a la gasolinera avisaron a Seguridad Pública Municipal, y policías de esa dependencia acudieron al lugar, en donde se percataron de que un grupo de personas “vestía  playeras con siglas de la AFI” (Agencia Federal de Investigaciones), de la Procuraduría General de la República (PGR).

Señaló que un policía municipal le gritó a un supuesto agente federal para decirle que eran policías municipales, pero éstos “les pidieron no meterse, argumentando que se trataba de un operativo de la AFI, contra narcotraficantes”.

Por ello, dijo el acalde priísta, los policías municipales “decidieron no intervenir, aunque la ciudadanía dice otra cosa”, porque los comentarios que circulaban en el pueblo, señalan que éstos pudieron haber “evitado esas muertes”.

Luego justificó a los policías municipales y dijo que éstos fueron “sorprendidos” por los presuntos agentes de la AFI.

Informó el alcalde que la tarde del domingo, el delegado de la Procuraduría General de la República (PGR), José Alberto Rodríguez Calderón, vía telefónica “me informó que ninguno de los elementos de esa corporación estuvo aquí, y que tampoco tenían previsto algún operativo en este lugar”.

Dijo que lamenta que el uniforme de una corporación policíaca “sea utilizado por personas ajenas”, y agregó que “por eso he insistido bastante a la Policía Judicial, a la Policía del Estado así como a la PGR para que yo sea informado sobre operativos que lleven a cabo aquí, no quiero saber a quién vienen a aprehender, pero sí que el grupo sea de alguna corporación y me han avisado”.

–Entonces si no le avisaron de ese operativo ¿por qué no actuó la Policía Municipal?

–Fue difícil tomar esa decisión, sobre todo porque los dos grupos se estaban enfrentando, ahí ya es difícil actuar.

Agregó Ávila Jiménez que se trató de una “confusión”, aunque luego señaló que a pesar de que el delegado de la PGR “me confirmó que no eran de la AFI, yo sigo con la duda de que sean o no de la AFI”.

Tampoco –dijo– “nos podemos hacer de la vista gorda y decir que no hay problemas entre narcos”, pero ello en referencia a José Salazar Contreras originario de Sinaloa así como Neftalí Esquivel Flores, nativo de Cuernavaca, no así para el caso de los hermanos Heriberto y Ascención Trujillo Sotelo “ellos son personas tranquilas, eran agricultores, y fallecieron por que se atravesaron en medio de las balas”.

–¿Quiere decir que los hermanos Trujillo Sotelo no hicieron algún disparo?

–Al parecer no, porque sólo a Neftalí Esquivel se le encontró un arma .38 súper, además de una credencial que lo acredita como miembro de la Policía Federal de Caminos.

–¿Pero no se descarta que los hermanos hayan tenido relación con Neftalí Esquivel y José Salazar?

–Pues se conocían, pero no sé si ellos (los hermanos Trujillo Sotelo) dispararon, incluso ellos fueron muertos por la espalda, parecía que venían tras Neftalí Esquivel, ya que él recibió 38 impactos de bala así como el tiro de gracia.

Sobre la información que dieron testigos acerca de los dos muertos que se eran parte de los supuestos siete agentes de la AFI y que fueron recogidos por ellos mismos, Ávila Jiménez apuntó que “esa es una versión, pero no sabemos realmente si es así, ya que otra versión dice que se llevaron a los dos muertos y dos heridos”.

Expuso que lo lamentable del enfrentamiento fue “que afectaron a un niño de 7 años, así como a gente como los hermanos Trujillo Sotelo”, sin embargo consideró que este hecho es “aislado”, no es “algo exclusivo de Apaxtla, pasa en cualquier parte, aunque aquí es la primera vez”.

El alcalde recordó que años atrás “habíamos tenido balaceras por todos lados y por costumbre de algunos grupos que no niego que tengan que ver con el narcotráfico, ya que hay quienes se ocupan de esto, por las condiciones de pobreza y la falta de empleo, pero ahorita todo está tranquilo”.

Mientras insistía que en Apaxtla se vive en “completa tranquilidad”, se escucharon seis detonaciones de arma de fuego, y en tono sarcástico  expresó: “mira yo diciendo que hay tranquilidad y alguien está disparando al aire”.

Tras los disparos pidió al secretario general del Ayuntamiento, José Ramón Díaz, que investigara de dónde provenían los disparos, y éste respondió que posiblemente los hizo un hermano de los Trujillo Sotelo, “creo que es Lencho, parece que está dolido”.

Ávila Jiménez descartó que el enfrentamiento tenga que ver específicamente con algún cártel de narcotráfico, “eso sólo lo hemos oído en la televisión, pero aquí no hay personas a quién señalar”.

Pero sí consideró que la siembra de mariguana en ese municipio de la Zona Norte de Guerrero “es una forma de vida de algunos campesinos, que enfrentan condiciones de pobreza y que tienen que buscar las formas de llevar recursos a su casa”.

Aunque luego indicó que esta actividad hasta hoy ilícita, ha disminuido debido a la presencia del Ejército mexicano así como de la base que tiene la PGR en la comunidad de El Caracol, en este municipio.

Patrullajes policiacos

A dos días de que fueron muertos a balazos, con música de viento y en medio de un centenar de vecinos, partió el cortejo fúnebre de los hermanos Trujillo Sotelo, cuyos ataúdes iban en una camioneta. Antes les hicieron una misa en la iglesia central, y después partieron hacia el camposanto.

Desde el sábado hasta este lunes habían venido a esta cabecera municipal la Policía Ministerial (Judicial), la Policía del Estado (Motorizada), así como policías de la AFI.

Algunas calles de Apaxtla eran patrulladas por unidades de la Policía Federal de Caminos y Puertos (PFCP) así como por policías municipales, estos últimos hacían recorridos constantes.

Según el presidente municipal, una partida militar está en la cabecera municipal desde el domingo para hacer algunos recorridos sobre los alrededores de Apaxtla, pero éstos no se notaron.

Versiones de los vecinos indicaban que había algunos carros con vidrios polarizados de Policías Judiciales recorriendo Apaxtla, “pero esos andan de civiles”; otras versiones señalan que se trata de “amigos” de los Trujillo Sotelo que están “prevenidos por si regresan los agresores”.

Al entrar la tarde, algunas calles, sobre todo las cercanas a la gasolinera, era poco transitadas, por ahí sólo cruzan algunas señoras con flores de cempasúchitl que llevan al panteón por el Día de Muertos, incluso algunos establecimientos comerciales cerraron temprano.