Advierte Arango que Punta Diamante necesita orden en los prestadores turísticos

El empresario señala que les interesa tener seguridad más que exclusividad en la zona. Informa que han recibido quejas contra las cuatrimotos y los caballos en las playas

Magdalena Cisneros

El empresario Manuel Arango Arias dijo que en la zona de Punta Diamante se necesita orden en la prestación de servicios turísticos porque ha recibido quejas contra las cuatrimotos y los caballos que hay en las playas más que contra los vendedores ambulantes y advirtió que si no se efectúa “va a dañar a todo el mundo”.

Hace unas semanas, el gobernador René Juárez Cisneros, el alcalde Alberto López Rosas acompañados de funcionarios estatales y municipales se reunieron con inversionistas de Punta Diamante, quienes pidieron mayor exclusividad en el área.

El viernes consultado por este medio uno de los inversionistas de esa zona, el empresario                       Manuel Arango afirmó que les interesa tener seguridad más que exclusividad en la zona, pero que ésta no se refiere a la personal sino para la gente en las playas, donde se necesita un orden y control porque “en lo demás lo tenemos, como dijo el gobernador del estado está en paz, no tenemos nada más qué pedir”.

Sobre la promesa de Juárez Cisneros de que pondrá su mejor esfuerzo para terminar con la anarquía que altera el orden en esa zona, antes en un acto, el empresario respondió que “yo no sé cómo lo expresó, pero entiendo lo que quiere decir, él sabe que si no nos podemos de acuerdo, si no hay un orden va a dañar a todo mundo, los prestadores de servicios para tener éxito ellos mismos necesitan orden, todos los necesitamos”.

Para tener orden, agregó, es cuestión de diálogo, por eso el gobierno convoca a empresarios y prestadores de servicios turísticos para llegar a un acuerdo “es ordenamiento, no creo que sea anarquía, es anticiparse de que no vaya a haber una anarquía, que se haga y que nadie salga perjudicado y se beneficie a todos, no es fácil, obviamente, pero si no es eso, qué hacemos”.

El también presidente de la inmobiliaria Parque Reforma aseguró que no ha recibido quejas contra los vendedores ambulantes que hay en las plazas de esa área sino contra los vehículos automotores que hay en la playa –cuatrimotos– porque “una persona menor de edad puede venir en un vehículo a 40 kilómetros por hora y donde puede haber niños de 3 años jugando en la arena, ese es un peligro enorme”, y contra los caballos porque aunque es muy bonito observarlos “sus desechos ahí quedan tirados”.

Manuel Arango concluyó que son formas de trabajo pero hay que buscar mecanismos donde ellos puedan trabajar y quizás establecer lugares con esos servicios, “pero que no sea necesariamente un vehículo pasando a 30 kilómetros por hora en una playa”.