Inconformidad por la reconstrucción del muelle de la isla de La Roqueta

Capitanía de Puerto impide el desembarque de pasajeros. La medida afecta la actividad económica en el lugar, dicen prestadores de servicios

Mónica Martínez García

A un día de comenzados los trabajos de reconstrucción del muelle de la isla de La Roqueta y de la prohibición de desembarque de pasajeros, concesionarios, restauranteros y prestadores de servicios turísticos de la isla trataron de impedir la continuación de la obra, pues argumentaron que la Capitanía de Puerto se ha cerrado a darles opciones para que se continúe con el desembarque de visitantes en otra parte de la isla, esto ayer después de que los inconformes tuvieron una reunión con el capitán de puerto, Antonio Pizá Vela.

Ayer por la mañana los prestadores de servicios turísticos sostuvieron una reunión con el capitán de puerto para darle a conocer su inconformidad, porque la dependencia federal no les notificó sobre la prohibición del desembarque de visitantes, argumentando que la medida es por “seguridad de los turistas”.

Por esto pidieron a Pizá Vela alternativas para que continúe la actividad, pues de ello dependen más de 100 familias, pero no pudieron llegar a un arreglo porque según comentó el concesionario Juan Carlos Abarca, a la reunión en la Capitanía llegaron representantes de cooperativas de lancheros “afines al capitán; y aunque ellos no tenían nada que hacer ahí porque la reunión era con nosotros, se metieron”, impidiendo que ambas partes llegaran a una negociación. Además de que dijo que el capitán de puerto “tenía mucha prisa porque a cada rato veía su reloj y ya ni pudimos concretar algo”.

Sin alternativas los inconformes regresaron a la isla con la intención de querer impedir la continuidad de la obra, pero tras hablar con el encargado de la construcción y concretar una reunión formal para hoy, el movimiento se suspendió y los inconformes se reunieron en uno de los restaurantes para determinar qué acciones emprenderán.

El concesionario Mario Iván Martínez dijo en declaraciones para El Sur que sus compañeros están de acuerdo con que los trabajos se lleven a cabo, pero dijo que su inconformidad es porque la actividad de desembarque de visitantes se verá afectada durante los dos meses que llevará la conclusión de la misma. “Queremos alternativas para obtener ingresos, pues son dos meses”, dijo.

Ahí mismo los prestadores de servicios turísticos acordaron plantear tres propuestas para el desembarque de pasajeros: la construcción de un muelle provisional alterno, permitir el desembarque de lunes a jueves y los fines de semana, quedando sólo los viernes para las obras de reconstrucción o bien que se abran espacios en el muelle para el paso de los pasajeros colocando la maquinaria en un lugar aparte.

El concesionario precisó que esta última propuesta fue la que hicieron a Pizá Vela, pero dijo que el funcionario federal la rechazó con el argumentó de que el encargado de la obra no estaría dispuesto a hacerlo, sin embargo “el mismo encargado de la construcción nos dijo que no había problema en hacer a un lado la máquina, entonces estamos indignados porque quién nos está hablando con dolo o quién nos está engañando”.

Incluso indicó que en caso de que se acepte construir un muelle alternativo, todos estarían de acuerdo en ayudar en la construcción con el fin de que se concluya pronto.

Estuvo presente el director del Zoológico, Armando Martínez, quien también manifestó su inconformidad con la suspensión del desembarque, pues dijo que se habían vendido varios paseos por el lugar a visitantes que llegarán al puerto en los cruceros que se esperan durante la semana.

“Son cuatro excursiones que se están truncando y es turismo internacional del que tanto hablamos e intentamos recuperar”, dijo el director.

El presidente del Consejo de Administración de Servicios Gastronómicos de Playa La Roqueta, Ignacio Fombona Álvarez, subrayó la preocupación que ellos también tienen pues dijo que ha habido turistas inconformes con la prohibición.