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Detener ya a los alcaldes ligados al crimen, urge Cuauhtémoc Salgado al gobierno

*Pedir ayuda a la federación no es una opción sino una necesidad “con la figura que sea”, asegura el presidente estatal del PRI

Rosalba Ramírez García

Chilpancingo

El presidente estatal del PRI, Cuauhtémoc Salgado Romero, exigió a los gobiernos estatal y federal que no continúen ocultando información de los vínculos entre autoridades municipales, corporaciones policiacas y grupos delincuenciales, y que detengan de inmediato a los que tienen nexos con el crimen organizado.
Consultado vía telefónica, el dirigente del PRI insistió al gobernador Ángel Aguirre Rivero que solicite ayuda a la federación para actuar “a la brevedad posible” contra los alcaldes que estén relacionados con el crimen organizado y contra cualquier autoridad estatal o municipal,  “ya tienen que actuar y no esperar a que haya desgracias de estas”, dijo en alusión a la matanza de normalistas y ciudadanos en Iguala.
Dijo que deben “detenerlos ya”, porque las autoridades conocen quiénes son los funcionarios públicos vinculados con el crimen organizado, y afirmó que la opinión pública ubica y habla de alcaldes vinculados con grupos criminales y que el Estado no se puede dedicar a “sólo tratar de desvanecer datos, todos saben de los lazos de autoridades con el crimen organizado y ¿cómo es posible que el gobierno del estado no lo sepa?”.
Adelantó que el PRI se deslindará de los alcaldes de ese partido a los que se les pudiera comprobar vínculos con la delincuencia organizada, porque dijo que el tricolor sólo les dio la oportunidad de contender, y “lo que ellos hagan ya es su responsabilidad”.
De la posibilidad de que el gobierno federal envíe un comisionado de seguridad como el de Michoacán, dijo que en el estado “no hay una respuesta inmediata (de las autoridades locales), las acciones siguen por parte de la delincuencia organizada”, por eso dijo que no es una opción sino una necesidad el pedir ayuda a la federación “con la figura que sea”.
Aquí el Mando Único de la policía “no existe, es de papel, fue para la foto”, porque no tenía sustento legal ni protocolo, como la aceptación de los cabildos antes de la firma.
Salgado Romero dijo que el gobernador sólo utilizó el tema como algo mediático, pues “en la práctica tenemos muy poco”.
El priista consideró que independientemente de que la recompensa que ofreció el gobierno del estado para la localización de los estudiantes normalistas es de “buena fe”, es la muestra de la desesperación por no tener información por ninguna vía, “no tienen nada, no saben nada”.
Agregó que con eso se deja claridad de “las deficiencias y debilidades de las instituciones en temas de inteligencia y de investigación”.
Asimismo, criticó el envío de trabajadores del gobierno estatal a “hacerla de investigadores”, porque consideró peligroso que se movilice a burócratas que no tienen preparación para investigar, incluso que no conocen protocolos de seguridad para su autoprotección.
Salgado Romero llamó al gobernador a ser responsable y retirar a los trabajadores de Iguala, sobre todo por el nivel de inseguridad que hay y que generó el asesinato de seis personas y la desaparición de decenas de ellos, y dijo que sólo podría complicar más la situación en el estado.
Le solicitó que no haga actos propagandísticos con la desaparición de los normalistas que el viernes pasado fueron detenidos por la policía municipal de Iguala, y convocó a la Fiscalía General del Estado a investigar y “asumir su papel”.
Le recordó al gobernador que puede pedir ayuda a la federación, “una llamada de ayuda haría que pronto se pueda resolver este asunto”.
Luego recordó que “Iguala es de los municipios donde la delincuencia ha estado presente todo este tiempo, que los vínculos (entre policía municipal y grupos delincuenciales) hoy se den a conocer no es noticia”, y llamó al gobierno del estado a no seguir ocultando información a los ciudadanos.
Afirmó que el gabinete del gobernador se ha dedicado más a la vida política del PRD que a la administración pública, y dijo que a partir del interés del gobernador y sus funcionarios por disputarse el control de su partido lo ha llevado a tener un “gobierno accidentado”.
Descartó que los hechos violentos en Iguala pretendan desestabilizar o “calentar” el proceso electoral que inicia este mes, como lo señalan ex dirigentes del PRD, y dijo que es resultado de “la carencia de acciones que en su momento no tuvo el gobierno del estado, fueron la falta de decisiones, Guerrero es una olla exprés”.

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