Piden locatarios del mercado de Coyuca de Benítez respaldo al líder de la CTM para que no los echen

Asegura el alcalde Ramiro Ávila que de acuerdo con un dictamen de Protección Civil estatal, el inmueble “representa un riesgo” porque las columnas están fracturadas

Karla Galarce Sosa

Locatarios del Mercado Morelos de Coyuca de Benítez confrontaron al presidente municipal, Ramiro Ávila Morales y pidieron la remodelación del inmueble localizado en el corazón de esa ciudad.
Durante la reunión mensual de líderes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), a la que acudió el alcalde Ramiro Ávila Morales como invitado, los locatarios pidieron el respaldo del líder Antelmo Alvarado García para que no sean “lanzados” del establecimiento que alberga a 93 locatarios, “todos mayores de 60 años”.
En declaraciones por separado al concluir la junta, Ramiro Ávila habló de la existencia de un dictamen emitido por Protección Civil estatal en 2008, en el que señala que el mercado “representa un riesgo” para los usuarios y para los mismos locatarios, pues sus columnas están fracturadas.
Éste medio informó el 15 de septiembre pasado, que los locatarios impidieron que una máquina derribara el inmueble y obstruyeron vialidades para evitar su paso; además que el presidente del Comité de Comerciantes del mercado, José Pastor Navarrete informó que se cumplió la amenaza que les hicieron de desalojo y llegaron cuatro camionetas con policías antimotines, por lo que se prepararon para hacer guardia, ante el rumor de que los sacarían a la fuerza.
Ayer, el locatario Eduardo Salazar Labastida señaló que el gobierno estatal envió patrullas para resguardar el edificio y, desde entonces, los propietarios de los locales realizan guardias para evitar el derribo del inmueble.
Salazar Labastida, quien está agremiado a la CTM, declaró que las negociaciones para el cambio de locales están detenidas.
Durante la reunión de la CTM que se realizó en el salón San José de Coyuca de Benítez, los comerciantes denunciaron que la presencia de las patrullas y las máquinas representaban una presión psicológica, pero que después del asesinato de los tres normalistas y de tres personas más en Iguala el 26 de septiembre, los policías se retiraron.
Los comerciantes inconformes bloquearon el 7 de mayo la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo en protesta por el reparto de los locales del nuevo mercado; el 25 de julio el gobernador, Ángel Aguirre Rivero advirtió el uso de la fuerza pública para trasladar a los locatarios al nuevo inmueble, porque “no es posible que una inversión de más de 70 millones esté ahí como un elefante blanco”, y pidió que se vigilara la entrega de los locales a quienes lo merecen.
El 16 de agosto, en una llamada a El Sur, el presidente de uno de tres sectores de locatarios del mercado, Josué Pastor Navarrete informó que no se iban a mover del antiguo mercado mientras no se resolvieran las irregularidades del padrón de locatarios y acusó que la presidenta del comité y de la Comisión de Derechos Humanos La voz de los Sin Voz, Hilda Navarrete Gorjón benefició a personas que no son comerciantes, como a sus nietas, el reportero de Televisa, Isaac Flores Pineda y a ella misma con ocho locales.