CARTAS (Donoso, visceral, autoritario, inmaduro e ineficiente, responde Martínez Sidney)

Señor director:

El síndico Fernando Donoso Pérez se rasga las vestiduras. Las declaraciones vertidas a su prestigiado diario en las que reitera calificativos como el de “manipuladores” hacia los organizadores de la marcha contra la inseguridad, son viscerales. Esconden un grito lastimero y una postura autoritaria con la que intenta sumar por la fuerza al comité organizador al Consejo de Seguridad Pública.

Eso tiene nombre y se llama coptar a la sociedad. Avergonzante actitud de un servidor público que exhibe que sólo un 0.01 por ciento de la población acudió. Para una autoridad municipal –como lo indica la Ley Orgánica del Municipio Libre que son los síndicos– el clamor del 0.01 por ciento de la sociedad, ¿no cuenta aún cuando haya sido víctima de la inseguridad? ¿Acaso confunde autoridad con autoritarismo?

Los diarios homicidios, asaltos, robos, violaciones, tampoco, efectivamente, son exclusivos de la Costera y si el síndico lo sabe ¿dónde está su labor en estos dos años para frenar la ola delictiva?

Desconocemos por qué la marcha le causó tanto encono. Que más de mil ciudadanos hayan salido a la calle a manifestar su temor por los hechos violentos acontecidos en el municipio debe preocuparle, no molestarle al grado de que ya no encuentra cómo faltar al respeto a los organizadores.

En la entrevista publicada ayer por El Sur, va desde llamarnos protagónicos y manipuladores, hasta decir que saqué una mínima votación en mi campaña política de hace dos años –que nada tiene que ver con la marcha– y que la Canaco trae ambulantes de otras ciudades, por lo cual, luego de sus últimas declaraciones –a todas luces infundadas pues parten de supuestos– no me extraña la inmadurez con la que abre la boca, no para informar a la sociedad, sino para denostar, descalificar y exhibir así su bajo nivel de discusión.

Tal parece que es él quien se esfuerza en politizar la marcha y asumir el papel de protagonista de la post marcha en un afán de hacerse publicidad y justificar su ineficiencia como fiscalizador de los trabajos de las dependencias encargadas de la seguridad pública.

Con la humildad que ese “servidor público” debiera tener para con los ciudadanos que marcharon –porque la marcha no fue exclusiva de los empresarios– le ofrezco a nombre de mis compañeros organizadores una disculpa al síndico por haberle molestado con esa forma de expresión ciudadana que no ha sido capaz de asimilar.

De nuestra parte, aprovechamos para informar que aunque seguiremos alzando la voz y organizando movilizaciones cada vez que la inseguridad que nos afecta a todos así lo requiera, no responderemos más a sus provocaciones ni le daremos el papel protagónico que pretende asumir, pues preferiríamos que asumiera el de interlocutor de la sociedad y retomara su obligación fiscalizadora que a principios de esta administración desempeñaba muy bien.

Pues no queremos “palabras dulces”, sino que devengue el salario que cobra como síndico, así como la Procuraduría de Justicia ya detuvo al asesino de un empresario del giro de autolavados y arraigó al presunto homicida de una niña cobardemente asesinada, ni tampoco queremos más ofensas emanadas de su nefasto “intelecto”, que sólo busca desarticular las expresiones ciudadanas que escapan de su control, así como la delincuencia ha rebasado a la autoridad.

 Ingeniero Alejandro Martínez Sydney