Toman normalistas y padres de familia por cuarta vez radiodifusoras en la capital

*No podemos tener la certeza de que sean nuestros compañeros los que estaban en estas fosas”, dicen los estudiantes de Ayotzinapa

Redacción

Chilpancingo

Por cuarta ocasión desde los ataques que sufrieron estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, ubicada en Tixtla, el 26 y 27 de septiembre en Iguala, donde fueron asesinados tres normalistas y 43 permanecen desaparecidos; padres de familia y estudiantes tomaron radiodifusoras en la capital.
La tarde de ayer unas 50 personas, entre padres y normalistas, la mayoría con el rostro cubierto por playeras o pañuelos, arribaron al andador Zapata en el centro capitalino y entraron al edificio en donde se encuentran instaladas las radiodifusoras Capital Máxima y ABC Radio, desde las cuales transmitieron un mensaje sobre la situación que viven.
Sobre las fosas clandestinas que fueron halladas en Iguala por declaraciones de los policías municipales de Iguala detenidos como responsables de los hechos violentos, dijeron que “no podemos tener la certeza de que sean nuestros compañeros los que estaban en estas fosas”. Indicaron que el hallazgo de estas fosas podría tratarse de “una estrategia (del gobierno) para engañarnos”.
Informaron que una comisión de antropólogos forenses provenientes de Argentina, llegará al lugar en donde se encontraron los restos humanos para determinar de manera precisa y confiable si se trata o no de los 43 normalistas detenidos-desparecidos.
Señalaron que el sábado por la tarde fueron citados por el gobernador, Ángel Aguirre Rivero, para ser informados sobre la identidad de los restos humanos encontrados en Iguala, pero “no pueden mantener un diálogo con el gobernador por que él es el asesino intelectual” de los normalistas.
Recordaron que el primer asesinato de normalistas ocurrió el 12 de diciembre de 2011 en donde fallecieron dos estudiantes y más recientemente la masacre en Iguala el 26 y 27 de septiembre. Culparon al gobernador, Ángel Aguirre Rivero, de ambos hechos.
“No podemos tener ningún diálogo porque sabemos que él (el gobernador) es el asesino de nuestros compañeros, nosotros lo que queremos es exigir que paguen los responsables, que se finque la responsabilidad a los actores materiales e intelectuales de esta ejecución”, puntualizaron.
Solicitaron la solidaridad de la sociedad y la invitaron a unirse a su movilización, así como a analizar las situaciones que se viven en Guerrero pues “ahora no se trata de exigir materiales para nuestra escuela, no se trata de exigir plazas, se trata de la vida de 43 de nuestros compañeros que están secuestrados y que hasta la fecha no sabemos de su paradero”.
Por otra parte, los padres de familia hicieron un llamado a las autoridades, la ciudadanía y los responsables de la desaparición de los 43 normalistas para que los apoyen en su lucha por encontrar vivos a sus hijos.
“Lo que importa es la vida de nuestros hijos, les pido que los devuelvan, por lo que más quieran, ustedes también son hijos, también los parió su mamá. No estamos de acuerdo en nada con lo que están haciendo como gobierno, como gobierno dicen que nos van a ayudar, que nos van a apoyar. Ahí andan pidiendo votación para que estén arriba, ya están arriba ¿qué más quieren?”, expresó una madre de familia.
Otro de los padres de familia pidió a la ciudadanía que comprenda la desesperación de todos los familiares de los normalistas desaparecidos.
Además utilizaron el espacio en las radios para informar que de manera paralela se llevaba a cabo un bloqueo en la Autopista del Sol para presionar a las autoridades para que se presenten con vida los 43 normalistas.
Finalmente, los normalistas exigieron al gobierno que cesen los asesinatos y las desapariciones “de lo contrario se aproxima la próxima revolución mexicana”, concluyeron.
El grupo conformado por alrededor de 50 personas, entre normalistas y padres de familia, llegó a las instalaciones de las radiodifusoras a las 12:40 de la tarde, los mensajes que transmitieron duraron 15 minutos, tras los cuales se retiraron para incorporarse al bloqueo que mantenían en la Autopista del Sol el resto de los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa en compañía de maestros y otros padres de familia.