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Rezan en Ayotzinapa para encontrar vivos a los 43 desaparecidos tras los ataques en Iguala

Las oraciones al señor Santiago son la esperanza para que sus hijos regresen vivos, a ese santo suplican los familiares de los 43 normalistas desaparecidos en la ciudad de Iguala la noche del 26 de septiembre.
Al centro de la cancha de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa fue colocado un altar con la imagen del señor Santiago, quien es el santo de los casos difíciles y fue un luchador social, según los que le rezan.
Alrededor de la imagen hay flores de todos los colores y veladoras. Un Cristo de un metro sobresale en la mesa que fue cubierta con un mantel blanco.
El santo tiene su templo en el barrio que lleva su nombre en el centro de Tixtla, los rezos no tienen una hora específica. Los familiares se acercan y piden al santo que sus hijos, hermanos, primos, sobrinos, y nietos regresen a casa y a la escuela para culminar sus estudios.
Una de las madres quien no quiso revelar su nombre por miedo a ser perseguida y asesinada como ha pasado a quienes piden justicia en el país, afirmó que mantiene la ilusión de que su hijo desaparecido regrese y haga realidad su sueño de ser maestro y darle a ella una mejor vida.
Los murales pintados en las paredes del inmueble reflejan los ideales de la lucha estudiantil y también las historias de la represión del gobierno hacia los normalistas de la escuela fundada en 1926.
Ahí, los familiares sentados con rostros tristes esperan noticias de las autoridades, quienes desde el día de la desaparición no han informado con certeza del paradero de sus hijos, dijo la mujer.
Ella, al igual que todos los familiares, espera que los 43 estudiantes se encuentren en algún lugar de Iguala porque se niegan a aceptar que fueron asesinados, como lo ha dicho el gobierno del estado. Reitera una y otra vez con lágrimas en los ojos que los policías fueron quienes se llevaron a sus hijos y ellos deben de decir donde encontrarlos vivos.
Mientras la mujer habla, una señora se acerca e invita a los familiares para que frente el altar oren para encontrar vivos a los adolecentes normalistas. Los familiares de los estudiantes y gente de Tixtla que se ha solidarizado y permanecen en las canchas reciben durante el día víveres de personas que llegan a la escuela, entre la ayuda que reciben hay ropa, comida enlatada como atún, frijoles, mayonesa y azúcar. (Jacob Morales Antonio / Tixtla).

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