La renuncia del gobernador, clamor de 400 estudiantes, maestros y grupos sociales en la marcha en Acapulco

Mariana Labastida

Integrantes de organizaciones sociales, escuelas y sociedad civil marcharon en Acapulco para exigir justicia por los ataques a los estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa y la aparición de los 43 jóvenes desaparecidos desde hace 13 días.
Durante la marcha, los aproximadamente 400 participantes exigieron la renuncia del gobernador Ángel Aguirre Rivero y en los discursos resaltaron la petición de seguridad para todo el estado, “para volver a caminar por las calles en paz”.
Integrantes del Movimiento #yosoy132 Acapulco, estudiantes y maestros de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), maestros y estudiantes de escuelas primarias y telesecundarias, del Frente de Organizaciones Democráticas del Estado de Guerrero (FODEG), del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sociedad civil en general marcharon de la Diana al Zócalo para exigir la aparición con vida de los 43 jóvenes desaparecidos de la normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa.
Antes de iniciar la marcha, en la glorieta de la Diana, un estudiante de la Unidad Académica de Economía de la UAG, que sólo dijo llamarse David, leyó un escrito del que entregaron copias durante la marcha; en el texto, además de exigir justicia por la agresión a los estudiantes de la normal rural, recordaron los asesinatos de la Guerra Sucia, de Aguas Blancas, El Charco y los asesinatos de los normalistas Gabriel Echeverría de Jesús y Jorge Herrera Pino en el 2011 y de los integrantes de la Unidad Popular, Arturo Hernández Cardona.
Expuso que estaban reivindicando sus derechos humanos empezando por disentir, criticar, tener seguridad, educación y propusieron que las decisiones de los gobernantes pasen por consultas ciudadanas.
Dicho texto se leyó nuevamente al concluir la marcha en el mitin del zócalo, firmado por integrantes de Economía, Sociología y Derecho de la UAG.
Al frente de la marcha los integrantes del movimiento #yosoy132 Acapulco llevaban una manta en la que se leía “no están solos, su dolor es nuestro dolor, nuestra es también su digna rabia”.
A la mitad de la marcha, una manta de profesores decía “sr. Gobernador la escuela primaria Narciso Mendoza condena los hechos acontecidos en Iguala, contra los estudiantes de la normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, exigimos el pronto esclarecimiento, ¡vivos se los llevaron, vivos los queremos!” y una tercera, en la que se exige la presentación con vida de los 43 jóvenes estudiantes desaparecidos.
También llevaron pancartas como “Hasta cuándo pueblo vas a despertar!!, ¿qué no ves que están matando a tus jóvenes?”, “hoy fue #Ayotzinapa mañana podemos ser nosotros”, “hartos de sobrevivir ¡queremos vivir!”, “políticos homicidas el corazón le han deshecho a mi tierra tan querida”, “no + impunidad”, “ni terroristas ni delincuentes, estudiantes conscientes”, “vivos los 43”, “todos somos Ayotzinapa”, “desde cuándo exigir mi derecho a la educación se volvió delito ¡justicia!”, “la indiferencia mata a inocentes”, entre otras.
Durante el recorrido de la Diana al Zócalo los manifestantes, en su mayoría jóvenes y mujeres, gritaron consignas en las que exigían que “vivos se los llevaron, vivos los queremos”, llamaban a quienes los observaban pasar con el “únete pueblo, únete” y “el pueblo callado jamás será escuchado”.
Otros de los gritos que se repitieron una y otra vez fue “Aguirre farsante, matas estudiantes”, “desaparecidos presentación”, “hombro con hombro, codo con codo, Ayotzinapa somos todos”, “libertad, libertad a los pueblos por luchar”, “por qué nos asesinan, si somos la esperanza de América Latina”, “Ayotzi aguanta, el pueblo se levanta”.
Al llegar, del movimiento #yosoy132 Acapulco, Carolina Fiesco dijo a los asistentes que “todos podemos ser víctimas de la violencia que estamos viviendo”, y pidió que se colocaran las veladores que llevaban como ofrenda de paz, y mientras se hacía eso los asistentes gritaban “ni uno más”; después la joven continuó diciendo “hasta cuándo va a aguantar Guerrero, Acapulco, tanta inseguridad, tanta corrupción, hay que organizarnos, hay que exigir nuestros derechos, tenemos derecho a la seguridad, a la educación, son sus derechos por los que están luchando los compañeros de Ayotzinapa”
Se hizo un minuto de silencio por las víctimas de “este gobierno represor que nos está matando no sólo físicamente, sino psicológicamente, emocionalmente, estamos siendo acribillados”, y después dieron un minuto de aplausos por los estudiantes de la normal rural.
El pronunciamiento de los jóvenes del Movimiento #yosoy132 Acapulco reprocharon los hechos del 26 de septiembre cuando se agredió a los jóvenes de la normal rural, pidieron la presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos, continuidad de las investigaciones, esclarecimiento, deslindamiento de responsabilidades y castigo a los responsables materiales e intelectuales del hecho. Además de liberación de los presos políticos, presentación de los luchadores sociales de Guerrero y del país, y restauración del Estado de derecho.
Señalaron de inaceptables los hechos de Iguala, y responsabilizaron también de los actos al gobernador Ángel Aguirre Rivero por conocer la inmadurez política y estilo de gobierno del alcalde “asesino”, José Luis Abarca, y no cesarlo; así como al gobierno federal por estar enterado y no accionar contra él con el poder militar.
Por la FODEG, Bertoldo Martínez expuso que cuando asesinaron al dirigente de la Unidad Popular, Arturo Hernández Cardona, Héctor Arroyo Delgado que escapó se los dijo, que había sido el alcalde de Iguala, José Luis Abarca, “eso lo supo el gobernador, que era un asesino, la federación y la PGR nunca quiso atraer el caso a pesar de lo que digan ahora”.
Bertoldo Martínez dijo que si el gobernador tiene “tantita vergüenza en la cara no puede quedarse en el puesto”, y puntualizó que no es revanchismo político sino que se requiere otro tipo de gobierno, “porque este ya no nos sirve”.
Pidió que no se queden callados, que sigan exigiendo que se esclarezcan los hechos ocurridos en Iguala, porque “gobierno y narco son la misma chingadera”.
Reprochó que cómo es posible que se haya ido el alcalde José Luis Abarca, y consideró que lo dejaron ir y “quién sabe si aparezca, lo más probable es que va aparecer muerto, porque ellos así se llevan, así juegan”.
“Queremos que se haga justicia, cedimos parte de nuestra libertad para que nos garantizaran seguridad, ya no quiero ser rehén de mi casa, quiero caminar con paz, tranquilidad y seguridad, queremos que esos jóvenes de Ayotzinapa los regresen con vida, y así como fueron capaces de solapar a un criminal regresen a esos muchachos, tenemos derechos civiles, políticos y sociales, no nos regalan nada, es obligación del gobierno darnos seguridad, justicia y educación”, exigió Rosaura Reodulo, egresada de la Unidad Académica de Ciencias Políticas de la UAG.