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Asume Miguel Giles Vásquez como obispo de Ciudad Altamirano

Más de 5 mil asistentes a una misa a la que asiste el nuncio apostólico, Giuseppe Bertello, el cardenal Norberto Rivera Carrera, el arzobispo de Acapulco, Felipe Aguirre, el de Monterrey, Francisco Robles Ortega y 22 obispos. Los jerarcas de la Iglesia, en conferencia de prensa, se niegan a hablar de política

Gregorio Urieta Ciudad Altamirano

El obispo Miguel Giles Vásquez, originario de Coatepec Harinas, estado de México, tomó posesión como obispo de la Diócesis de Ciudad Altamirano acompañado del nuncio apostólico Giuseppe Bertello, el cardenal primado de México, Norberto Rivera Carrera, y los arzobispos de Acapulco, Felipe Aguirre Franco y de Monterrey, Francisco Robles Ortega. Asistieron además 18 obispos de diferentes estados, entre ellos los de la región pastoral sur, Alejo Zavala Castro, de Tlapa; Salvador Flores, de Lázaro Cárdenas, y como representante de Efrén Ramos Salazar, obispo de Chilpancingo-Chilapa, asistió Humberto Cervantes.

El nuevo obispo de Altamirano viene a suplir a Carlos Garfias Merlos, quien actualmente es obispo de Ciudad Netzahualcóyotl, y fue relevado en la diócesis de Toluca por Francisco Chavolla, quien también estuvo presente.

La asunción del nuevo obispo se llevó a cabo en el Zócalo de la ciudad, adonde asistieron cerca de 5 mil personas (aunque los organizadores calcularon más de 6 mil), de diferentes parroquias de la diócesis que comprende el estado de Guerrero y varios municipios de Michoacán y el estado de México.

En la ceremonia participaron casi 300 sacerdotes y diversas organizaciones de seglares, laicos, adoradores, organizaciones dedicados a la vida consagrada, órdenes religiosas y feligreses, que participaron en una misa que duró casi tres horas, de las 12 del día a cerca de las 3 de la tarde. La misa fue oficiada por el arzobispo de Monterrey, monseñor Francisco Robles Ortega.

Asistieron también los familiares del nuevo obispo, entre ellos su padre Francisco Giles, quien bendijo a su hijo Miguel al iniciar la celebración.

Por la mañana el ahora obispo de Altamirano, Miguel Giles, el nuncio apostólico Giuseppe Bertello, el obispo Carlos Garfias, y el obispo de Toluca Francisco Javier Chavolla, participaron en una conferencia de prensa en donde evadieron las preguntas de los reporteros acerca de la situación política del país y de informe de labores del presidente Vicente Fox.

Incluso el moderador de la rueda de prensa solicitó a los reporteros que se limitaran a preguntar acerca de la cuestión religiosa. A solicitud de este medio para contestar sobre el informe, Miguel Giles argumentó que no lo vio, pues toda la tarde viajó desde el estado de México y por diversas parroquias de Guerrero.

Bertello manifestó que la Iglesia hace una interpretación de los acontecimientos sociales y económicos y que la Iglesia se manifiesta por buscar un camino en donde la realidad del hombre pueda ser desarrollada.

A pregunta expresa acerca del crecimiento de las sectas en el país y el estado, el ahora obispo Miguel Giles manifestó que “tal vez como pastores no estamos dando un buen ejemplo de vida cristiana” y que las sectas son subvencionadas desde fuera para su expansión.

Más tarde, Miguel Giles se reunió con los alcaldes de Pungarabato, Ambrosio Soto Duarte, y de Tlalchapa, Guadalupe Eguiluz Bautista, a quien acompañaba su esposo, el presidente estatal del PRD, Martín Mora Aguirre. A pesar de que fueron invitados los otros siete alcaldes priístas y perredidistas, no asistieron.

Por la mañana de este jueves, el obispo fue despertado por un mariachi que le tocó las mañanitas, producto de una “coperacha” de los fieles para recibirlo.

No vine a hablar del informe: Rivera Carrera

Entrevistado al finalizar la ordenación de Miguel Giles como obispo de Altamirano, el cardenl primado de México, Norberto Rivera Carrera, se negó a hablar del informe del presidente Vicente Fox, a pesar de la insistencia de los reporteros. Quien acostumbra hablar de todo, todos los domingos ante las cámaras de la televisión y la radio nacionales, contestó a las preguntas sobre el informe con referencias a la celebración religiosa.

–Monseñor Rivera, ¿primera vez que visita la diócesis más bella del mundo?

–No, ya en otras ocasiones he estado aquí. A su servidor le tocó hacer la visita apostólica hace tiempo.

–Señor, ayer fue un día muy importante para el país: el recuento de los beneficios del gobierno actual a los mexicanos ¿Qué le pareció el informe?

–Me pareció muy bien la toma de posesión del señor obispo. Su consagración aquí a Ciudad Altamirano, a eso vinimos.

Otra reportera le preguntó qué interpretación le da a ese clima de confrontación que hay en el país, a lo que Rivera Carrera contestó que “aquí cantamos cantos de comunión, rezamos por todos los fieles”.

–En la Cámara de Diputados se observó un clima de confrontación, señor, ¿qué opinión le merece? –se le insistió.

–Aquí en el presbiterio hay un esfuerzo de unidad….No les voy a contestar ninguna cosa política, yo no vine a eso.

–Su voz es muy importante para los creyentes católicos, por eso queremos conocer su opinión sobre eso (el informe).

–Así es, gracias a Dios.

–¿No nos va a comentar algo?

–No, no. Yo no vine a comentar el informe. Yo vine aquí a comentar a Monseñor Giles.

–El llamado del presidente Fox a tomar acuerdos, ¿qué le parece?

–Me parece muy bien, lo mismo que el del presidente de la Cámara (Manlio Fabio Beltrones).

Una reportera le dijo que “hay una gran decepción en el pueblo de México, señor, ya no confían en sus autoridades”, a lo que el cardenal contestó sólo con un “Ah, muy bien”. Y ya no dijo más.

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