División de vecinos en torno a la construcción de un kínder en Tixtla

Una familia insiste en que al mismo tiempo se haga una cancha y una calle por intereses económicos, dice la OPCG

 Zacarías Cervantes Chilpancingo  

La división entre vecinos del barrio del Fortín de Tixtla, donde está el jardín de niños Mi Patria Es Primero, es lo que ha retrasado el deslinde del terreno por las autoridades municipales, requisito que requiere el Congreso para que apruebe el acta de donación del terreno y el Comité Administrador para la Construcción de Escuelas (Capece) para comenzar la obra, dijo ayer Gonzalo Molina González.

El también vecino de ese barrio reclamó airadamente a la directora del jardín de niños, Maricruz Zamudio Cienfuegos, que sólo esté gestionando la construcción de la escuela, cuando los acuerdos con el Ayuntamiento y en el Congreso son que también se construirá una cancha y se abrirá una calle en el mismo predio.

Mientras tanto, la directora dijo que los trabajadores y los padres de familia no están en desacuerdo en que se construya la cancha y se abra la calle, “pero a lo que le estamos dando prioridad es a la construcción de nuestro jardín y serán las autoridades municipales las que se encarguen de las otras obras”, dijo.

Por su parte, Pedro Nava Rodríguez, dirigente de la Organización de Pueblos y Colonias de Guerrero (OPCG), dijo que es prácticamente una familia –la de Gonzalo Molina González– la que está exigiendo que se construya una cancha y se abra la calle, porque resultarán beneficiados toda vez que tienen tiendas de abarrotes en las cercanías del terreno en donde se pretenden hacer esas obras.

Y es que la UAG donó al Ayuntamiento de Tixtla para la construcción de ese jardín más de 3 mil metros cuadrados, sin embargo ahora las autoridades municipales únicamente han aceptado entregar mil 800 metros para la construcción de tres aulas, un sanitario y la dirección, pero trabajadores y vecinos no se han puesto de acuerdo dónde quedarán ubicados esos mil 800 metros para el jardín dentro de los más de 3 mil metros y dónde la cancha deportiva.

Ayer la dirección del jardín de niños convocó a una reunión de padres de familia con el fin de tomar acuerdos y definir el espacio que le corresponderá al centro educativo y posteriormente se trasladarían al Ayuntamiento para insistir que las autoridades municipales cumplan ante el Congreso local con los requisitos con el fin de que los diputados puedan aprobar el acta de donación.

Por lo pronto una máquina fue a retirar los montones de lodo que se encontraban en la entrada de las tres improvisadas galeras en donde llevan a cabo sus actividades las maestras y los niños, sin embargo ayer los menores tuvieron que soportar las corrientes de aire con brisa que se introducía por los agujeros de las paredes, así como las goteras que se escurrían por entre la lámina vieja que sirve de techo a las aulas.