Irrumpen federales en Carrizalillo y Álvaro Obregón; torturan y detienen a vecinos, señalan

*Marchan familiares de los agraviados en Iguala para exigir que los liberen, pero les informan que fueron trasladados a la SEIDO. Gendarmes, policías y marinos catearon 30 viviendas, relatan. Hay al menos 10 detenidos, reportan. Preguntaban dónde están las fosas, declaran

Alejandro Guerrero y Lourdes Chávez

Iguala y Chilpancingo

Policías de la Gendarmería Nacional, de la Federal y soldados de la Marina irrumpieron la mañana de ayer en Carrizalillo, municipio de Eduardo Neri (Zumpango), y Álvaro Obregón, de Iguala, de donde se llevaron detenidos al menos a 10 vecinos, a otros los golpearon y se habla de varios desaparecidos.
Cerca de las 7:00 de la noche unos 60 pobladores de Carrizalillo y de Álvaro Obregón acudieron a la sede regional de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Codehum) en Iguala y se quejaron de abuso de autoridad. Cerraron más de media hora la avenida donde están las oficinas.
A las 8:00 de la noche marcharon al Centro de Operaciones Estratégicas (COE) de la subsede de la Procuraduría General de la República (PGR), donde protestaron en exigencia de la liberación de sus familiares detenidos, en la marcha gritaron consignas en contra de los policías federales.
En declaraciones durante la marcha, el comisario municipal de Carrizalillo, Lucas Celso Salgado denunció que a las 6:00 de la mañana de ayer los efectivos federales irrumpieron en el poblado y catearon unas 30 viviendas luego recorridos en el poblado, que sobrevoló un helicóptero.
Dijo que los federales no dieron ninguna información “ni se presentaron con las autoridades” para dar a conocer del operativo, “nunca supimos a lo que iban y se trajeron a varios detenidos”.
Denunció que a los detenidos los agarraron en la calle y a otros los sacaron de sus casas, y hubo mujeres a las que golpearon.
El comisariado ejidal de Carrizalillo, Roberto Guzmán Montiel denunció la incursión policías federales al pueblo durante 8 horas, hasta la detención de tres mujeres de la localidad y dos hombres que sin razón aparente fueron sometidos y llevados detenidos a Iguala.
En una denuncia telefónica, la autoridad agraria informó que la población tiene temor de que sean usados como chivos expiatorios porque no los llevaron a la agencia del Ministerio Público.
El comisariado ejidal informó que como a las 6 de la mañana un helicóptero de la Policía Federal (PF) comenzó a sobrevolar Carrizalillo, y a las 7 entre 15 o 20 patrullas llegaron al pueblo y se instalaron en las calles, iban de un lugar a otro pero no buscaron a las autoridades comunitarias para informarles de su misión.
Estimó que como a las 2 de la tarde detuvieron a dos muchachas que pasaron cerca de los uniformados, y el papá de las jóvenes, Aaron Peña Celso y su esposa reclamaron la aprehensión así que los sometieron a todos.
También intervino Andy Montiel López, quien que trabaja con Peña Celso, y los cinco fueron llevados detenidos.
De la versión de que padres de familia de la Normal de Ayotzinapa irían a buscar a sus hijos a una mina de carrizalillo, posiblemente con el operativo policiaco, aclaró que no vieron a padres de familia, sólo a los policías armados.
Durante la protesta en la subsede de la PGR cerca de las 8:00 de la noche, los familiares de los detenidos encararon a efectivos de la Agencia de Investigación Criminal y golpearon carros oficiales que estaban estacionados afuera de las instalaciones.
Allí fue atendida una comisión de familiares acompañados por el coordinador de la Codehum en la zona Norte, Policarpo Gatica.
En la sede de la PGR se les informó que sus familiares fueron trasladados a las instalaciones de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) de la PGR en la ciudad de México.
Uno de los familiares de los detenidos, quien omitió su nombre por el temor a las autoridades federales, dijo que entre los detenidos están Aarón Peña, Andy Montiel, Sofía Peña, David Montiel, David Celso Montiel y otra joven de 17 años también familiar de los anteriores.
Dijo que fueron ocho los detenidos en Carrizalillo, dos de ellos mujeres y una de ellas menor de edad, además de que hay personas “desaparecidas” de las cuales no precisó la cantidad.
Una mujer de nombre Edith denunció que fue golpeada por los efectivos federales quienes irrumpieron en su casa y le colocaron una bolsa de plástico negra, y a sus hijos menores de edad los encañonaron.
“Me golpearon y me tiraron al piso, después me colocaron una bolsa de plástico negra y me gritaban que dónde estaban las fosas que no me hiciera pendeja porque yo sabía dónde estaban”, narró la mujer de unos 45 años.
Los pobladores de Carrizalillo también denunciaron que los efectivos federales robaron como dinero, alhajas y pantallas de plasma, consideraron que la acción era para buscar a los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos desde el 26 de septiembre.
Otras tres mujeres, entre ellas la señora Irma Arroyo Moreno denunciaron que en otro hecho los policías también catearon viviendas de la comunidad de Álvaro Obregón, del municipio de Iguala, donde sacaron detenido de su casa a Francisco Ortiz Fernández de 43 años, sin ninguna orden de aprehensión y quien se dedica a la agricultura.
La señora Irma Arroyo denunció que su hijo Gustavo Moreno Arroyo quien venía para Iguala a una reunión de productores de maíz, fue detenido en un retén que los federales tenían en la carretera Iguala-Cocula, en la entrada a la comunidad de Álvaro Obregón y lo detuvieron, asegurando también su camioneta en la que viajaba, una pick up cabina y media color azul.
Otra mujer embarazada, esposa del detenido Francisco Ortiz, llorando narró que los federales irrumpieron a su domicilio y a ella la aventaron y la encerraron en un cuarto, “se llevaron a mi esposo y una computadora”.
“Peña Nieto para que nos mandó a la Policía Federal para que nos acaben de matar, eso quiere, quiere más fosas nuevas para nosotros”, dijo molesto un habitante de Carrizalillo tras hacer un llamado al presidente de la República para que atienda las arbitrariedades de los agentes federales.
Por otro lado, sin abundar en el tema, aclaró que los policías federales y militares suben con regularidad a Carrizallo, pero la inseguridad sigue siendo un problema para la población.
Es un secreto a voces que los ejidatarios de Carrizalillo -que reciben un pago anual por la renta de sus tierras a la minera Golp Corp-, son extorsionados por grupos delictivos, pero el comisario no habló al respecto.
Del operativo policiaco, se supo de manera extraoficial que los policías de la Gendarmería entraron a la casa de una persona que sólo se identificó como Onofre, también conocido como El Pescado y a quien se le involucra con el grupo de delincuencial de Los Rojos.
Se estimó que hay más detenidos que no pertenecen a Carrizalillo, pero que son de la banda delincuencial de Los Rojos, aunque no se sabe cuántos.
Por otra parte, la Agencia Proceso informó que una pandilla de Iguala identificada como Los Peques, señalada como uno de los brazos armados del grupo delictivo Guerreros Unidos habrían sido los responsables de la agresión y desaparición de normalistas junto a policías municipales.
“Informes oficiales consultados por este semanario indican que este grupo de sicarios salió de la ciudad de Iguala con el respaldo de autoridades de los tres niveles y del Ejército, y se refugiaron en la comunidad de Carrizalillo, donde permanecen escondidos desde hace dos semanas cuando al menos 100 delincuentes que se posesionaron del poblado”, refiere.
Menciona que la PF realizó un impresionante operativo aéreo y terrestre en esta comunidad enclavada en la parte serrana de la región Centro, donde se ubica la mina de oro a cielo abierto Los Filos-El Bermejal, explotada por la empresa canadiense Gold Corp.
“Fuentes oficiales informaron que el operativo federal se enfocó en la casa de un sujeto identificado como Onofre El Pescado, encargado de las operaciones de trasiego de droga que se produce en la sierra y se concentra en la ciudad de Iguala para distribuirla al centro y norte del país”, menciona.