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Liberan a un madrina de la AFI que intentó extorsionar a un restaurantero

 

Agustín Guerrero Flores, La Tinga, pagó una fianza de 20 mil pesos

 Jorge Nava  

Un madrina que presuntamente fue enviado por un comandante de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI), a extorsionar a un comerciante fue detenido en el momento del delito por policías ministeriales adscritos en Ciudad Renacimiento, el viernes pasado, pero luego de depositar una fianza de 20 mil pesos fue liberado.

Lo anterior consta en una denuncia que puso en esa representación el agraviado Sinforano Nandi Valente, propietario de la marisquería El Primo, localizada en la avenida Hermenegildo Galeana, del sector 2 de esa demarcación.

Nandi relató que el miércoles pasado, a las 14 horas llegaron a su negocio un hombre y una mujer que bajaron de una camioneta tipo pick up, color blanco, sin recordar si portaba placas; que el hombre aparenta una edad de 35 años y la mujer de 40, el hombre de 1.80 de estatura, quienes se sentaron en una mesa como cualquier cliente, y ordenaron mariscos.

Indicó que terminaron y lo llamaron a su mesa, donde el hombre le dijo que quería hablar en privado con él, le enseñó una pistola en la cintura, los invitó a la parte trasera del restaurante, donde le dijo que era agente de la AFI.

“Sabes que a mí ya me pasaron la información de que tú estás tirando (vendiendo) droga en tu negocio”, dijo el restaurantero que le inquirió el individuo y le respondió que era falso y los invitó a que revisaran su negocio.

Señaló que el individuo insistió: “No te hagas pendejo, yo sé que tú estás tirando perico (cocaína) y además para no hacerle al pendejo tengo el reporte de la Semarnat (Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales), de que tú estás tirando huevo de tortuga”.

Indicó que la mujer, molesta, le espetó: “Mira hijo de tu pinche madre, aquí ya te cargó la chingada; me vas a tener que entregar 10 mil pesos o si no, no te la vas a acabar, ahora si te pones bien con el dinero que te pedí no va a haber ningún pedo y si no te vamos a chingar, tú ya sabes cómo nos las gastamos”.

En ese momento cerca del lugar se encontraba un cliente asiduo José Luis Plácido Gallardo, quien era atendido por su hermana, describe el comerciante, y que escucharon el diálogo que tuvo con la pareja de extraños.

Relató que convenció a ambos para que le permitieran reunir la cantidad que le requirieron, mientras que los agentes le dieron como plazo el viernes en la tarde, y le advirtieron que “hay de ti pendejo si no nos entregas el dinero”.

Dijo que bajo esa manaza no quiso denunciar los hechos, pese al consejo de sus trabajadores y su cliente José Luis Plácido que presenció los hechos. El jueves finalmente acudió con el agente determinador del Ministerio Público (MP), del sector Renacimiento, Ernesto Jacobo García, para denunciar los hechos.

Mencionó que Jacobo García habló con el coordinador de la Policía Ministerial, Bertoldo Delgado Bahena, con quien le sugirieron que juntara el dinero, mientras se mantendrían alerta afuera de su establecimiento.

Declaró que el viernes, a las 4 y media de la tarde, vio que se estacionó un vehículo color gris, con vidrios polarizados, de donde salió Agustín Guerrero Flores, La Tinga, a quien conoce porque es un cliente asiduo de su restaurante, e identificó al copiloto del automóvil como Memo, policía ministerial que vive en esa colonia.

Después señaló que Agustín Guerrero se dirigió con él: “Qué pasó primo, vengo por el encargo”.

–Qué encargo –le respondió.

–No te hagas güey, ya sabes que vengo por el billete que te pidió el 103.

Al escuchar eso, Sinforano Nandi dijo que le ofreció que tomara algo, y mientras platicaban en una mesa sacó de su short el dinero y lo comenzó a contar, momento en que llegó el coordinador de la Policía Ministerial, Bertoldo Delgado con policías a su mando y se llevaron a La Tinga, a quien el detenido les informó que es madrina de la AFI.

Y el policía ministerial Memo resultó ser Guillemo García González, quien declaró al MP que ese día llegó un oficio de la Dirección General de la ex Policía Judicial donde le informaban que sería concentrado en Chilpancingo, y luego de enterarse, acudió con su esposa para decirle que vendería una televisión porque no tenía dinero.

Sostuvo que se encontró a Agustín Guerrero, quien se interesó en comprar el aparato, pero le pidió que lo llevara con el Primo porque le iba a pedir 500 pesos.

En la denuncia Tab/R/02/648/2004, se encontró que la fianza de 20 mil pesos que se fijó para dejar en libertad a La Tinga, la pagó Edgar Pérez Guerrero.

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