Acusan al presidente del mercado La Diana de negarse a arreglar la instalación eléctrica

Comerciantes del tianguis turístico del mercado de artesanías La Diana denunciaron que el presidente del Comité Administrativo, Felipe Martínez Reynoso, y la tesorera Dalila Hernández Díaz se niegan a convocar a una asamblea para tratar el diagnóstico de las instalaciones eléctricas que hizo el director de Protección Civil y Bomberos, Sabás Arturo de la Rosa Camacho.

En el informe se determinó que el uso de las instalaciones no son seguras ni confiables, y les recomendó hacer los trabajos preventivos de manera inmediata.

El diagnóstico quedó escrito en el oficio número DMPCB/CT/635/03, de fecha 21 de junio de 2004, dirigido al presidente administrativo y que recibió María de los Ángeles Varela Gómez.

En una carta que trajo el comerciante Policarpio Pineda Baltazar a la Redacción de El Sur, ayer por la tarde, y que firman unas 33 personas, señalan que le han insistido a su Comité que arregle el problema porque hay recursos económicos que ascienden a 340 mil pesos, cantidad suficiente para hacerlo. Y agregan que su negativa les ha generado desconfianza.

Indican que en el año 2000 se denunció penalmente a la mesa directiva ante la agencia del Ministerio Público del Fuero Común, en la averiguación previa Tab/3ª/1082/2000, por el delito de administración fraudulenta. La mesa estaba integrada en ese entonces por Eusebio Juan Bazán Herrera, como presidente y su esposa Dalila Hernández Díaz, como tesorera, quien continúa en este cargo.

Explican que por ser “muy influyentes lograron, quién sabe de qué modo, que el Ministerio Público (MP) consignara la averiguación como consulta de no ejercicio de la acción penal”, misma que fue remitida el 27 de septiembre de 2001 al director general Jurídico Consultivo, Carlos Alonso Gutiérrez, para que se complementara en el sentido de que los denunciados exhibieran los talones de los cheques con los que se cotejaran ingresos y egresos.

Pero que en lugar de eso, el MP envió nuevamente la averiguación a consulta de no ejercicio, de nueva cuenta sin haberla complementado, y entonces el 27 de junio del 2002, el entonces director José María Murillo Silva la remitió al MP para complementarla.

Abundan que los más raro es que la averiguación en un principio constaba de 2 mil 629 fojas y después de 2 mil 335, es por eso “que tenemos el temor de que el actual comité, haciendo uso de su influyentismo, se vuelva a gastar el dinero y no se lleven a cabo los trabajos que se requieren en el mercado.