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Pochotlaxco, la primera comunidad que desaparecería si se construye La Parota

*En otro sitio, lo convertirán en pueblo modelo

 La aceptación de la presa depende de la negociación, dicen vecinos, antes de una reunión con el residente de la empresa este sábado. Los vecinos le piden abrir un camino y la energía eléctrica

 Uno de los pueblos en riesgo de desaparecer si se construye la presa La Parota es Pochotlaxco. Según los planes de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) será el primer pueblo reubicado y con él se hará “el pueblo modelo” para convencer a los demás de que la empresa ahora sí va a cumplir a los campesinos para que le permitan llevar a cabo su ambicioso proyecto hidroeléctrico.

Este sábado, en reuniones con el residente de la CFE, Víctor Hugo Chávez Chávez, vecinos de Pochotlaxco dijeron que no hay un pacto definitivo para la construcción de La Parota, pues éste se va a dar de acuerdo a las negociaciones.

Uno de los comuneros, don Cipriano Nava, responde a la pregunta sobre su disposición a dejar sus tierras: “Vamos a ver cómo negociamos, lo que sí le digo es que no queremos terminar pidiendo limosna, pues nuestra tierra nos da de comer”.

Pochotlaxco, un pueblo con 100 años de existencia, es uno de los más abandonados, aislados de las comunicaciones y marginados de las obras públicas de la región que podría ser afectada. No tienen carretera, y tienen que caminar por veredas para llegar al pueblo más cercano y comprar lo necesario para el consumo diario.

Se localiza a pocos metros del río Papagayo, de donde según los planes de la CFE se abastecería la presa para generar energía.

Para llegar a Pochotlaxco se camina a pie cerca de 40 minutos por una vereda accidentada que se encuentra al margen del río Papagayo.

Es una comunidad familiar con alrededor de 80 habitantes que viven en unas 20 casas esparcidas en un terreno árido, la mayoría de bajareque y algunas de adobe, lámina de cartón, y teja.

Aquí no se conoce el agua potable, la energía eléctrica, el drenaje, la pavimentación, o algún otro servicio. No hay una tienda ni un centro de salud o algún tipo de servicio médico; escuela sí hay pero sólo primaria.

Está localizado en una loma cerca del río, en un terreno accidentado en donde andan sueltos chivos, marranos y perros flacos.

Don Cipriano Nava, un hombre de 72 años, antes de la reunión con el residente de la CFE, Víctor Hugo Chávez, comparte con esta reportera lo que es vivir en la miseria y marginación, y manifiesta que su pueblo en los 100 años de fundado ha estado siempre olvidado por las autoridades.

Comenta que para comprar cualquier tienen que caminar varios kilómetros para llegar a la comunidad de Las Parotas, pues a Pochotlaxco no hay acceso para los carros. Dice que algunas veces él usa su caballo, si no lo están ocupando en las labores del campo.

A don Cipriano se le pregunta su sentir por el proyecto de la presa La Parota, y responde: “Vamos a ver cómo negociamos, lo que sí le digo es que no queremos terminar pidiendo limosna, pues nuestra tierra nos da de comer”.

Dijo que él y sus vecinos no han participado en las protestas contra la presa, pero algunos comuneros le han dicho “que la CFE nada más los está engañando, que no les van a pagar nada y que nada más los van a sacar de su pueblo”.

Ya dijeron a la CFE dónde quieren ser reubicados

Pero al parecer, las posiciones de los opositores a la presa no han influido en los habitantes de Pochotlaxco, pues en la plática que sostuvieron este sábado con el residente de asuntos sociales del proyecto, Víctor Hugo Chávez Chávez, le informaron dónde quieren ser reubicados.

También le preguntaron si es cierto que a cada una de las familias le darían casa, a lo que Chávez respondió que la ley establece que tiene que ser una casa por familia formada, y dijo que las casas serán como ellos quieran y que éste será el pueblo modelo.

Informó que el pueblo modelo estará terminado en junio del próximo año y contará con todos los servicios públicos. Al funcionario le pidieron abrir un camino al pueblo y la energía eléctrica, que al menos servirían de aquí hasta que se construya la obra y se inunden los terrenos, lo que está programado para el 2010.

Otros le pidieron que la CFE los valore como tal para sacar adelante su proyecto ambicioso, y le manifestaron que a pesar de ser personas marginadas son concientes del proyecto. “Vemos al futuro, no somos egoístas, pero también se verá en qué plan”.

El comunero Justino Nava Carbajal manifestó que en este lugar la producción ya no se da, pues la tierra se ha ido deteriorando por las plagas y el medio ambiente contaminado. El maíz tiene que llevar el abono si no no crece, y otro problema es la sequía. Precisó que el pueblo ha ido sobreviviendo de la venta de algunos productos del campo, y el maíz para el autoconsumo. Dijo que antes había bastante ganado en el pueblo “muy florecido, pero la sequía ha ido acabando con todo”. Señaló que los comuneros han tenido que emigrar y trabajar de lavacoches y criados porque “si nos quedamos aquí nos morimos de hambre”.

Manifestó que con la presa La Parota están viendo a futuro porque no son egoístas, porque “hay otros que tienen necesidades del servicio que se va a florecer ahí”.

Reconoció que no hay un pacto definitivo por la presa La Parota, pues este se va a dar de acuerdo a las negociaciones que se den. Dijo que no los van a perjudicar para ayudar a otros, pero que simpatizan con el proyecto porque son personas comprensivas.

Manifestó que no han participado en ningún paro contra la presa, porque “esas inversiones a futuro llegan a beneficiar a muchas comunidades que necesitan el servicio, por lo que viéndolo así y si nosotros podemos ayudar de esa manera lo hacemos. Pero repito, depende de las negociaciones como se den y no nos vayan a querer comer el mandado”.

Nava Carvajal señaló que el proyecto La Parota, puede ser que sirva para que “Pochotlaxco vuelva a revivir y florezca con las posibilidades futuras que se pronostican”.

Las obras para San José Cacahuatepec

Cuando se empezaba a conocer el proyecto La Parota, San José Cacahuatepec fue de las comunidades más radicales que se oponían al proyecto, incluso, uno de los dirigentes del movimiento opositor, Gumersindo Joaquín Prudencio, es originario de ese lugar.

Ahora las cosas han cambiado, y este sábado alrededor de 40 comuneros encabezados por Joaquín Prudencio sostuvieron una reunión con el funcionario de la CFE, Víctor Hugo Chávez.

Durante la reunión de unos 20 minutos en la comisaría del lugar, el funcionario de la CFE y los comuneros ratificaron la minuta de acuerdos que se firmó hace más de un mes para que se les den obras sociales a cinco comunidades a cambio de la continuación de los estudios preliminares que requiere la empresa para confirmar si es factible o conveniente que la presa se construya en este lugar.

El San José Cacahutepec viven alrededor de 150 personas, y algunas casas son de material duradero, pero la mayoría son de adobe y teja. Su economía se basa en la venta del limón, maíz, sandía, jamaica y el frijol a baja escala, porque la mayoría es para el autoconsumo.

Las obras prometidas por la empresa a cambio de que los comuneros permitan los estudios son agua potable, rastrilleo de caminos, pavimentación de calles de las comunidades y una de las más importantes para San José: un centro de salud, pues el que actualmente tiene sólo es un cuarto. La CFE ofreció un centro de salud moderno que contará con las comodidades para los habitantes del lugar.

Aunque recibirán obras sociales, los comuneros especificaron que el permiso dado a la CFE es nada más para los estudios preliminares, no para construir la presa La Parota.

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