Reclaman a la PGR por el caso del asesinato del ex contralor Armenta

 Ya pasaron cuatro años del homicidio y no hay ningún avance en la investigación, denuncia José Manuel Armenta Tello. El secretario privado del gobernador urge al delegado Rodríguez a hacer su trabajo porque “no basta con detener a graperos”

A cuatro años de que fuera asesinado el ex contralor del estado, José Manuel Armenta Villegas, su hijo José Manuel Armenta Tello consideró que la investigación ha sido “lenta”, por ello exigió al delegado de la PGR, José Alberto Rodríguez Calderón, “que haga su trabajo porque no basta con detener a graperos”.

José Manuel Armenta Villegas y su chofer, Francisco Pérez Barrera, fueron asesinados el 31 de julio de 2000, sobre la carretera número 130 Cuautla-Izúcar de Matamoros, cerca de la comunidad de Agua Dulce en el estado de Puebla.

En agosto de ese año la PGR atrajo el caso, aunque las investigaciones continuarían en la delegación de Guerrero, ello porque el ex contralor era servidor público de esta entidad.

Pero este sábado el hijo del ex contralor, José Manuel Armenta Tello, entrevistado luego de la misa por el cuarto aniversario luctuoso en la catedral de Santa María de la Asunción, consideró que hasta hoy “no hay ningún resultado, el año pasado fue la misma situación, pero vamos a esperar hasta que las autoridades que tienen el caso lo resuelvan”.

Asimismo, indicó que las investigaciones de la delegación de la PGR sobre el homicidio de su padre, además de ser “lentas” no han dado “ninguna” satisfacción a su familia; “parece que el actual delegado –de la PGR, José Alberto Rodríguez Calderón– ha estado más preocupado por cuestiones sociales”.

Armenta Tello, quien es secretario privado del gobernador René Juárez Cisneros, mencionó que la única información que conoce del delegado de la PGR es “lo que se dice a través de los medios de información. El ha afirmado que el caso está estancado y es difícil”.

Las declaraciones del delegado estatal, –dijo– distan mucho de lo que esperamos de un funcionario que tiene a cargo una delegación y que lleva la investigación del caso de mi padre.

Citó que en un informe que solicitaron a la PGR “sólo nos informaron que el caso, por ser un delito grave, está dentro de los casos por los que se ofrecen recompensas a quien aporte pruebas para resolverlo, es lo único que nos han dicho”.

Indicó que la PGR tampoco les ha hablado de algún presunto responsable, “no sabemos nada absolutamente”. En tanto que sobre el móvil “lo único que dicen es que fue por cuestiones de su trabajo, mi padre no era un hombre de problemas, no era un hombre que tuviera pelitos con nadie, únicamente se dedicaba a hacer su trabajo, que era fiscalizar los recursos del estado”.

Aseguró que a pesar de la lentitud en las investigaciones “hemos guardado silencio, hemos sido respetuosos porque nosotros no somos de marchas ni de manifestaciones eso nos inculcó mi padre, hemos esperado y respetado a las instancias correspondientes”.

Lo que sí hicieron –agregó– “aportar los elementos requeridos por la PGR, información sobre si sabíamos que tuviera algún problema o si tenía algún enemigo, cómo era su vida, en sí datos generales”.

Luego llamó al delegado de la PGR “para que haga su trabajo, “sé que para un funcionario público el dar información sobre detenciones muestra los frutos que rinde su trabajo, pero no sólo basta con detener graperos”.

Agregó que el homicidio de su padre “es el homicidio de un servidor público, un hombre de familia, una persona seria responsable y es un crimen que al menos la familia espera que se absuelva”.

Sobre una posible investigación que realice la familia por cuenta propia, la viuda del ex contralor, María Teresa Tello de Armenta, respondió: “nada lo regresaría vivo y nos pondríamos en peligro nosotros, Dios que se encargue de eso y la justicia, nosotros no vamos a vivir con un resentimiento porque nada devolverá a mi esposo”.

A la misa, que se llevó a cabo este sábado en la catedral de Santa María de la Asunción, ademas de los hijos y viuda del ex contralor acudieron el secretario de Desarrollo Rural, Héctor Manuel Popoca Boone; secretario de Desarrollo Social, Heriberto Huicochea Vázquez; el secretario de Finanzas y Administración, Rafael Acevedo Andrade; el procurador de Protección Ecológica, Ernesto Vélez Memije, así como la esposa del ex priísta Carlos Sánchez Barrios, Aurora García.