Ofrece Ortega justicia para los normalistas y castigo a responsables de la matanza de Iguala

*Habrá diálogo permanente para la resolución pacífica de los conflictos, no criminalizará el movimiento social y promoverá la liberación de activistas presos, promete el gobernador sustituto. Acordó con Aguirre que se forme una comisión de notables para hallar la verdad de lo que pasó en Iguala, dice

Hugo Pacheco León

Chilpancingo

El gobernador sustituto, Rogelio Ortega Martínez, ofreció en su toma de protesta en el Congreso del Estado, diálogo permanente para la resolución pacífica de los conflictos, que no criminalizará el movimiento social, liberará a líderes sociales presos, creará una comisión de notables para llegar a la verdad histórica de lo ocurrido en Iguala, y pidió al presidente Enrique Peña Nieto todo el apoyo de las instituciones.
Aseguró que su prioridad será buscar justicia para estudiantes normalistas, castigar a los responsables materiales e intelectuales del asesinato de tres estudiantes, un joven deportista y dos civiles, y encontrar a los 43 estudiantes desaparecidos.
Tales compromisos los hizo en su toma de protesta al mediodía de este domingo en sesión solemne.
Arropado por sus compañeros de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) encabezados por el rector Javier Saldaña Almazán, así como los jefes de las corrientes del PRD y funcionarios del ex gobernador Angel Aguirre, Ortega se explayó en un discurso de 46 minutos que fue interrumpido en varias ocasiones por los aplausos.
Sobre todo cuando hizo sus anuncios: “Le tomo la palabra al doctor Javier Saldaña Almazán y a los ministros de culto religioso, en su interés para constituir una comisión con la alta calidad moral de estas instituciones, para que nos ayuden como coadyuvantes”.
“Han hecho oración y un llamado humanitario, para que las personas que mantienen retenidos a los 43 normalistas se sensibilicen y atiendan el clamor del pueblo de Guerrero, que les pide que devuelvan con vida a los 43 jóvenes”.
Argumentó que los gobernantes no podrán transitar con la frente en alto si no encuentran a los responsables intelectuales y a los responsables materiales.
A diferencia del gobierno de Angel Aguirre, quien persiguió a los luchadores sociales, Rogelio Ortega se comprometió: “Asumo ante esta soberanía el compromiso público, con todas y todos los guerrerenses, de no criminalizar la protesta social, sino atender sus demandas con prontitud, canalizarlas por el cauce de la concordia y el diálogo permanente, para que la resolución pacífica de los conflictos sea nuestra divisa”.
A las organizaciones más golpeadas por el aguirrismo como los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) e incluso los “movimientos antisistémicos”, el gobernador les dio su mensaje.
“Les quiero manifestar públicamente la disposición de este nuevo gobierno de la ciudadanía, este nuevo gobierno de la reconciliación de las y los guerrerenses, nuestra disposición al diálogo para allanar diferencias, para construir juntos el destino del pueblo de Guerrero, porque Guerrero nos necesita a todas y todos”.
Por los presos políticos, que dejó en sus cuatro años de gobierno Angel Aguirre, anunció: “Haremos todos nuestros esfuerzos y coadyuvancia para lograr la libertad de los guerrerenses recluidos, dirigentes y luchadores sociales recluidos en prisión, con apego a la ley, con apego al derecho y con apego a la justicia”.
Ante los pendientes de los gobiernos anteriores, Rogelio Ortega precisó: “En este momento es fundamental la garantía de la vigencia de la ley. Nada ni nadie debe estar por encima de ella”.
Recalcó que el eje central del estado democrático que propone será la protección, garantía y realización de los derechos humanos y de las libertades fundamentales.
Como era ya conocido que uno de sus promotores a la gubernatura fue el propio ex gobernador, Angel Aguirre, dio a conocer: “En conversación con el licenciado Ángel Aguirre, me pidió que a la brevedad presentara a ustedes una propuesta para integrar una comisión de notables, de personas de absoluta credibilidad, que investiguen a fondo los sucesos de Iguala, para que podamos nosotros no hacer linchamientos, pero sí indagar la verdad para que se aplique la justicia”.
Rogelio Ortega, que por primera vez se para frente a la tribuna de un legislativo, puesto que no ha sido nunca ni diputado, al fin universitario, aprovechó la ocasión para celebrar la presencia del rector de la UAG, Javier Saldaña.
“Muchas gracias por la confianza depositada en mi persona, para asumir la conducción del Poder Ejecutivo del Estado Libre y Soberano de Guerrero. Estoy comprometido con ustedes”.
Reconoció el porqué estaba ahí: “Este momento es especialmente relevante, marcado desafortunadamente por la tragedia de los hechos que ocurrieron los días 26 y 27 del mes pasado, en Iguala de la Independencia”.
Y vino su compromiso: “Grande es la agenda gubernamental de los rezagos y de las grandes necesidades del pueblo de Gurrero, pero quiero comprometerme con ustedes, y dirigir un especial mensaje al pueblo de Guerrero, a la nación y al concierto internacional de las naciones que tienen puestos sus ojos en nuestra entidad, que será desde este momento mi principal prioridad atender el reclamo justo para que se haga justicia ante los asesinatos de una señora, tres normalistas y un joven del equipo Avispones, que perdieron la vida”.
“Expresar mi duelo sincero, mi solidaridad con las madres, los padres y las familias que perdieron a estos jóvenes”, agregó.
Se comprometió a trabajar “incansablemente” para hacer todo lo que está a su alcance, junto con las autoridades locales y federales, para encontrar con vida a los 43 jóvenes desaparecidos.
“Quiero decirles a los jóvenes de la escuela Normal Rural de Ayotzinapa, con quienes he tenido la fortuna de convivir y trabajar, y dialogar con ellos, desde que fui presidente de la Federación Estudiantil Universitaria Guerrerense y cuando trabajé en la Subsecretaría de Educación Media Superior y Superior del estado de Guerrero, que confíen en la palabra de Rogelio Ortega”.
Ofreció trabajar junto con ellos, “en un diálogo franco, abierto, de cara a la sociedad, para que sus demandas sean atendidas”.
A las señoras, a las madres, a los padres, a los familiares de los 43 jóvenes desaparecidos, les dijo estar hermanados “en la fe que mueve montañas, en la esperanza que nunca muere”.
“Lo que nos corresponde, como autoridades, es comprometernos en la búsqueda de los muchachos, y le pediremos al presidente de la República, al licenciado Enrique Peña Nieto, que nos ayude, que Guerrero necesita en este momento de todos los recursos de las instituciones del Estado mexicano”.
En su llamado a la clase política, dijo: “Todos y todas, desde donde estamos, tenemos mucho que aportar a la solución de los problemas de Guerrero, porque sé que cuento con los liderazgos de todos los partidos políticos y sus militancias, porque habremos de involucrar en esta ruta a las y los empresarios, a los movimientos sociales, a quienes realizan el quehacer cotidiano de la educación”.
Luego se refirió a la UAG: “Acepté este desafío porque tenemos en estos momentos difíciles del estado de Guerrero, donde se ha empoderado la delincuencia organizada, una universidad blindada, una universidad con una comunidad de más de 80 mil guerrerenses, una universidad unida y trabajando en lo que es su sustancia, la academia, la investigación y la vinculación con su entorno”.
Pidió a los diputados que le ayuden a reunirse con los presidentes de sus partidos en Guerrero, “para tocar puertas y conseguir recursos especiales para Guerrero”.
Los comprometió a otorgar “un subsidio decoroso y generoso a la Universidad Autónoma de Guerrero, que se lo merece, porque ha dado cuentas claras de su rendimiento, porque en año y medio de la gestión del doctor Javier Saldaña Almazán, la colocó ya entre las 29 universidades del país”.
Presumió que en estos momentos de crisis, en estos momentos de ingobernabilidad, la UAG está en paz y trabajando, y eso coadyuva a la gobernabilidad.
Sobre el proceso electoral, que fue una preocupación del PRI, les respondió: “No podemos llegar a enero con una crisis de ingobernabilidad, tenemos que llegar en armonía, tenemos que llegar poniendo por delante el interés de Guerrero”, porque en ese mes inician los proceso internos de partidos para definir candidatos.
“Cuando ustedes estén terminando su gestión, yo estaré terminando también el encargo que hoy ustedes me han dado, cuando llegue ese día quiero que tengamos el reconocimiento del pueblo de Guerrero, porque fuimos capaces de sacar adelante un proceso electoral en orden, civilizado, en paz”.
“Su amigo Rogelio Ortega, su gobernador, el gobernador de las y los guerrerenses, se compromete a tener una conducta absolutamente imparcial”, aseguró.
Anunció entonces, que para hacer cambios en el gabinete deben apoyarlo para buscar y encontrar mujeres y hombres de Guerrero, dispuestos a trabajar con vocación de servicio, con entrega, de reconocida probidad y honradez.
Además pidió a la ciudadanía y clase política, tener “una gran lupa para observar a profundidad las candidaturas que vamos a postular, para que nunca más en el estado de Guerrero tengamos gobernantes como el que tuvimos en Iguala. Es mejor prevenir que lamentar”.

Que Peña Nieto ayude en la reconstrucción del tejido social

Sobre su relación con el presidente de México, consideró que en este momento a Enrique Peña Nieto le pide “su decidida y generosa participación en las tareas de reconstrucción del tejido social de Guerrero, la búsqueda de la armonía, la concordia y la paz”. “Si le va bien a este gobierno, la va bien a Guerrero; si le va bien a este gobierno y a Guerrero, le va bien a México; si le va bien al presidente Enrique Peña Nieto, le va bien a México. Señor presidente, en este momento crucial para la reconstrucción de la paz, la armonía y la gobernabilidad democrática, necesitamos de todo su apoyo”.
Dio a conocer que en el enfoque de políticas de género, para atender a las mujeres, pidió el apoyo de sus esposa (la ex comunista y académica universitaria), doctora Rosa Isela Ojeda Rivera, “para que las mujeres de Guerrero encuentren en este gobierno todos los espacios para su promoción política, para su promoción social, como empresarias, como actores que nos ayuden a la recomposición del tejido social de nuestra entidad”.
Además le pidió que trabaje día a día, con ahínco para entregar buenas cuentas, sobre todo en el ámbito de la actividad que le corresponde, que son los más necesitados.
“Los niños, los desposeídos, los adultos mayores en condiciones de orfandad, para que lo que decía el Siervo de la Nación lo hagamos nosotros todos los días: combatir la indigencia y moderar la opulencia”, aseguró.
Dijo que pedirá a los empresarios, para que con un sentido altruista y generoso, cooperen, aporten, para los niños adolescentes que debería estar estudiando, que deberían tener un comedor en la escuela, una beca para permanecer y realizar sus estudios y culminarlos, y “ser guerrerenses y profesionales exitosos”.
Dijo que hará justicia a los pueblos originarios, que saquen del rezago “a nuestra gente que vive en las regiones más marginadas y que provienen de nuestras grandes raíces, del México profundo del que hablaba el maestro Bonfil Batalla”.
También puntualizó que dará continuidad, “a la gran obra proyectada y puesta en marcha por el licenciado Ángel Aguirre Rivero, en especial con esta obra de gran impacto y que habrá de darle una nueva fisonomía a la gran ciudad y puerto de Acapulco: el Macrotúnel y el Acabús”.
Así como las obras que se están realizando en Chilpancingo y en Acapulco, “de un drenaje que hacía muchos años no se construía y otro absolutamente deteriorado”.
Propuso, como una apuesta para Guerrero, la educación y la cultura, pidió ayuda a los diputados para gestionar recursos, para traer a Guerrero los festivales de la cultura, no sólo en Acapulco, sino en todas las regiones del estado de Guerrero, dado que están a tiempo para meter proyectos.
Entonces provocó risas y aplausos que relajaron la solemnidad del momento, por dar a conocer la familia numerosa que tiene, cuando dijo que no podía terminar su intervención sin pedirles a sus hijas Marxitania, Aleida, Jimena, Carina, Frida, Fernanda y Ma-nuela, y a su hijo Osvaldo, que le ayuden a diseñar políticas para la juventud.
También hizo un reconocimiento a su madre, la profesora Rosaura Martínez Ríos, y comentó cómo se hizo maestra pese a la oposición familiar.
“Gracias, señoras y señores diputados por la oportunidad que le han dado a este hijo de una maestra rural para gobernar Guerrero, junto con todas y todos ustedes”, aseveró.
Se despidió lanzado el grito de “¡Viva Guerrero! ¡Viva la democracia y los guerrerenses! ¡Vamos por la reconstrucción de Guerrero! ¡Vamos por la paz, la dignidad y la armonía que necesita nuestro heroico estado de Guerrero!”.
“Su gobernador trabajará día a día por ustedes, para engrandecer a nuestra patria chica, la patria de Guerrero, Álvarez, Altamirano; la patria de todos nuestros próceres”, culminó.
Luego, al despedirse, como lo acostumbran los priistas en su pasarela, los líderes de las tribus perredistas, diputados y periodistas, se formaron para darle su abrazo y felicitaciones.
Los diputados abandonaron rápido la sesión. El gobernador ya les había prometido que respetará los acuerdos contraídos con Angel Aguirre.