En Acapulco, un delegado del PRI que ha recuperado ayuntamientos perdidos

Entrevista con el diputado poblano Víctor Hugo Islas

Aurelio Peláez

Antecedido con una fama de duro, con una hoja de servicios al PRI como delegado en varios estados y municipios del país para “recuperar” ayuntamientos perdidos –entre ellos el simbólico de la izquierda, Juchitán, Oaxaca– el diputado federal poblano Víctor Hugo Islas Hernández es desde hace un mes delegado del CEN del PRI para Acapulco.

De su trabajo en Acapulco, de remontar la diferencia que el PRD le ha sacado al PRI en las últimas elecciones –hasta 50 mil votos en la elección de presidente municipal en octubre del 2002– depende que el priísmo retenga el gobierno de Guerrero.

De 52 años, oriundo de la ciudad de Puebla –que gobierna el PAN– Víctor Hugo Islas cuenta también con un amplio currículum político-administrativo. Ha sido dos veces diputado local, tres veces diputado federal y una senador de la República. Ha trabajado con Manuel Bartlett en Gobernación, cuando éste era director; con Leopoldino Ortiz Santos en San Luis Potosí, aunque es cercano al líder nacional del PRI, Roberto Madrazo.

Como delegado del CEN ha estado en Nayarit, Tabasco, Oaxaca, y cuenta que ha entregado buenos resultados.

Venimos a coordinar

–¿Qué importancia representa Acapulco en la estrategia del PRI para ganar Guerrero?

–Para el PRI reviste una gran importancia por lo que representa electoralmente, políticamente, y por lo que representa para el país, que es la ventana de México al mundo. El propio Roberto Madrazo ha considerado muy importante y conveniente que un representante de él esté aquí, se sume a los trabajos del partido, a los trabajos del candidato Héctor Astudillo Flores, y diseñe no nuevas estrategias, porque los delegados no venimos a imponer criterios o a enseñar el hilo negro a los que ya lo saben. Los delegados venimos a coordinar los esfuerzos, a valorar esos esfuerzos.

–¿No es una empresa difícil o casi imposible después de perder casi cinco procesos electorales consecutivos en Acapulco?

–Parte del triunfo es no pensar en la derrota, y cada proceso electoral tiene sus características. Creo que algo que fortaleció al PRI en Guerrero es que cuando se hizo la selección y la elección de nuestro candidato no hubo resquebrajamiento. Entonces esa fue una cosa que la gente está observando en este momento.

–Hace seis años, el PRI ganó la gubernatura por apenas dos puntos con respecto al PRD, ¿prevé otra vez una elección cerrada?

–Yo creo que ahora el PRI va a ganar por otro porcentaje, y lo creo porque la gente que va conociendo a Héctor Astudillo va confiando en él, va teniendo la oportunidad de decir ‘es como nosotros’, forma parte de la sociedad guerrerense’, ‘forma parte de una familia bien constituida’ y eso da como resultado que la gente le tenga confianza. Cuando la gente analiza y es que es hijo de un destacado maestro, o que su esposa es una mujer reconocida en el ámbito educativo, que tiene una prestigiada escuela en Chilpancingo, te darás cuenta que esa pareja va a formar parte de la sociedad guerrerense, como ya lo forma y va a dar resultado que se hagan cosas muy importantes.

Por el voto de la sociedad

–¿Es decir que el voto duro no sería suficiente para el PRI en esta elección?

–El voto duro en el PRI es parte muy importante, por eso también estamos en el reagrupamiento de nuestras fuerzas, invitando a la unidad de la militancia, el voto duro forma parte de la importancia que tiene una elección, pero ya nos hemos dado cuenta en los procesos electorales que hemos vivido, que para que ganemos una elección necesitamos el voto duro en primer término, pero también tenemos el voto de la sociedad, necesitamos pedirle a la sociedad que nos dé su apoyo y nos dé su confianza.

–¿Ese voto de la sociedad es el que marca la diferencia en las elecciones?

–Ese voto cuando se le plantean cosas reales y efectivas, ese voto acepta participar. Antes ganaba el candidato que era postulado por nuestro partido simplemente por traer el escudito en sus fotografías. Ahora el candidato de nosotros gana por el partido, pero gana también por él mismo, gana por la propuesta que él tenga, por la sensibilidad con que se desenvuelva, por la humildad y por hacerle llegar a la gente su plataforma política de gobierno.

–¿Cómo llegar a conquistar ese voto cuando hay la idea de un PRI que ha sido responsable de crisis económicas, de un PRI viejo, con mañas…?

–Hay veces que cuestionan mucho al PRI, se sataniza mucho al PRI, pero la realidad es que en el PRI todos los días hacemos labor política, de una u otra manera, algunas veces no se ve, algunas veces no se sienten y como oposición tenemos varias dificultades, económicas, de desaliento, pero lo más importante es que el PRI está cumpliendo una función y en este momento, todos los actores políticos están trabajando en torno a algo muy importante: fortalecer al partido, organizar al partido, reagrupar el partido, y hacer que Héctor Astudillo llegue hasta los rincones más apartados.

Acepta el reto de Acapulco

–¿A usted se le ubica en el ala dura del PRI?

–Lo que pasa es que cuando ha habido algunos planteamientos que yo considero que no son los adecuados, he levantado mi voz y he reclamado. Soy una persona firme en mis convicciones y si acepté el gran reto de venir a Acapulco, es porque sé que las cosas no estaban fáciles, y los retos son los que a mí me toca lograr y salir adelante. Mis dos últimas elecciones, la local y la federal, estaba yo muy abajo en los porcentajes, en la local 22 puntos abajo y en la federal 32 puntos, remontamos eso en base a una actividad directa, efectiva, real, recordándole a la gente lo que hicimos, porque a veces la gente recuerda lo malo pero no lo bueno.

–¿Sabe ganar entonces?

–Sé ganar, pero la política moderna de ahora es de circunstancias, y las que tenemos en Acapulco y en las siete regiones de Guerrero dan como resultado que Astudillo sea el que en su momento, cuando los tiempos políticos nos lo permitan, le diga a los guerrerenses que quiere gobernar para servirles.

–A Acapulco viene a ganar…

–En Acapulco vamos a luchar sin ninguna actitud triunfalista, porque a la gente le molesta. Vamos a dar nuestro mejor esfuerzo, para que la gente que estaba con nosotros regrese, para que los jóvenes, las mujeres que están pensando votar, se den cuenta que Astudillo es el candidato de los jóvenes.

En el PRD, ricos contra pobres

–¿Qué escenario tienen del PRD, están pensando en algún candidato en particular?

–Ya lo dijo Héctor Astudillo ante nuestros compañeros, nosotros no tenemos que meternos en algo que no nos corresponda. Ojalá a ellos les salga bien su proceso, ojalá y ya no se estén desgastando en ese enfrentamiento que hay entre ricos y pobres, porque veo que hay una gran incongruencia en el PRD. No siento que en un partido que ha manifestado que abandera las causas populares esté gente que no pertenece al mismo estrato social. Vemos que no le va a dar buenos resultados a ese partido, pero nosotros no le apostamos a ningún candidato. Astudillo está fuerte en sus convicciones y en sus propuestas, y ha dicho que con el que venga está listo para argumentar conocimientos.

–¿Prevén una alianza opositora anti-PRI?

–Yo creo que ese antipriísmo que durante mucho tiempo estuvieron fomentando varios partidos, les dio resultado en la elección presidencial, pero ante el fracaso del gobierno de la República muchísima gente se desilusionó, y ha estado comparando los gobiernos emanados del PRI con los que han estado surgiendo

–Ahora es delegado propiamente de un partido no de un gran aparato que estaba en la Presidencia. ¿El PRI se asume como partido?

–Lo está asumiendo desde el momento en que el PRI no tiene dinero, que nos aplicaron una multa y a pesar de los argumentos de los Amigos de Fox es risible la del PAN, como también al PRD por el caso Ahumada que dio dinero a las campañas. Lo primero que tiene que hacer el PRI es decirle a su militancia ‘no tenemos dinero, pero tenemos una gran voluntad, corazón y coraje’, y porque ahora sí queremos que esos priístas que nos dieron 79 mil votos en la pasada elección, nos ayuden, porque si los multiplicamos por dos o más personas tendremos más de 140 mil votos, eso es lo que tenemos que hacer. Yo les he dicho en las reuniones que hemos tenido con nuestros compañeros, si de acá salimos fortalecidos los 50 y nos ponemos la camiseta no habrá nadie que nos detenga, y lo más importante es que estaremos sentando las bases de que lo que debe ser el PRI en Guerrero.