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“Si Chavarría declina por Zeferino, yo también declino”: Rodríguez Otero

 

Aurelio Peláez

–Mira, si Chavarría declina por Zeferino yo también declino.

Quien dice esto no es un precandidato por el PRD, sino el ex presidente estatal del PAN y precandidato por ese partido al gobierno del estado, Francisco Rodríguez Otero.

El reto, en un encuentro ocasional en el Zócalo. Rodríguez Otero pasa por ahí, solo. Ya hace tiempo que dejó de ser acompañado por un guardaespalda, luego del secuestro que sufrió su padre, el empresario del Transporte, Rafael Rodríguez Esquivel, hace cuatro años.

Camina rumbo a una estación de radio, donde habría de ofrecer una entrevista. Encuentra a un grupo de reporteros hablando del tema del día, la falta de acuerdos en el PRD para tener un candidato de unidad antes de ir a una elección interna.

Rodríguez Otero inscribe al PAN en la contienda que, dice, no sería solamente PRI-PRD. Negó que el que haya un candidato por su partido fragmente a la oposición ante el PRI, y afirmó que en un proceso electoral hay una competencia donde gana el que trabaja y convence.

Del anuncio del ex presidente del PAN, Enrique Caballero Peraza, de que se inscribiría como precandidato, dijo: “Falta que lo avale el Comité Ejecutivo Nacional”, la instancia que hace seis años determinó sancionar a Caballero por irregularidades en el manejo de las cuentas del partido.

Rodríguez Otero no cree que el CEN del PAN avale el registro como precandidato de Caballero –contienda a la que también se apuntó la diputada local Porfiria Sandoval–, aunque en su caso dijo confiar en ganar la elección interna, en donde ya contaría por ahora con el respaldo de unos cien delegados.

En el caso de Caballero, “no sé que le habrán dicho sus amigos (en el PAN), pero yo no le veo chance”.

En el PAN, que cuenta con una nómina de unos mil militantes activos, el candidato lo decide el voto de los delegados, es decir, de los panistas que se inscriben formalmente para participar en la convención estatal, que usualmente no son todos.

Pero por ahora Rodríguez Otero trae una piedrita en el zapato. Escuchó en un programa de radio que el precandidato del PRD, Armando Chavarría, habría dicho que para no fragmentar el voto opositor, el PAN se debería sumar a la candidatura perredista, en el entendido de que sería la de él.

El precandidato panista se engalla: “Puedes tomarlo como una declaración, si Chavarría declina por Zeferino (Torreblanca) yo también   estoy dispuesto a declinar”, aunque asegura que va a ganar la Convención estatal.

Mira su reloj. Se despide. “Lo puedes tomar como una declaración, ¿eh? Yo sí cumplo mi palabra. A ver qué dice Chavarría”.

Luego dice: “Es más, en caso de que Zeferino no sea candidato, la ciudadanía puede optar por otro empresario”, proponiéndose.

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