CARTAS (¿De dónde va a sacar los votos Chavarría para ganar una elección interna?, pregunta Dávila)

Señor director:

Quisiera que me diera la oportunidad de que la sociedad guerrerense conozca una versión diferente a la del señor Tenorio Galindo quien publica un artículo llamado “El CEN del PRD, un nuevo actor” el día 12 del presente.

En el afán de ser concreto y puntual para ahorrar espacio, los aspirantes a ser candidatos del PRD ya han establecido su posición y el porcentaje de simpatizantes que cada uno tiene. En este tenor Zeferino Torreblanca es quien mejor se ha posicionado en las preferencias de los electores, según es del dominio público.

Es cierto que las encuestas pueden ser inventadas para usarlas como parámetro, pero no así las concentraciones masivas, como las de Torreblanca y Armando Chavarría en Acapulco. Se las  recuerdo ahora:

1. Armando Chavarría: 5 mil.

2. Zeferino Torreblanca: 35 mil.

Lo curioso es, como lo dije antes en este prestigiado diario, que estas concentraciones mantienen los mismos volúmenes estadísticos que todas las encuestas mensuales.

El problema en sí no es el pleito por decidir entre encuestas y elección abierta el 15 de agosto, sino la sospecha cada vez más confirmada de que el PRI tiene metidas las manos en el proceso democrático del PRD para elegir a su candidato, y abiertamente a favor del senador Armando Chavarría Barrera.

Las sospechas rebasan la aparente seguridad que manifiesta el senador en demostrar hasta el 15 de agosto una fuerza ciudadana que lo va a respaldar y que hasta hoy no lo ha hecho.

La congruencia y la sensatez nos diría que si el senador está seguro de que tiene esa preferencia ciudadana en el estado de Guerrero, seguramente se reflejará y resultará el ganador indiscutible en las encuestas que su propio partido ya está levantando.

Los resultados de las encuestas que simpatizan con los precandidatos del PRD, seguramente han estado respaldadas por los simpatizantes del PRD y entre perredistas, Armando Chavarría apenas ha logrado llegar al 7 por ciento de las preferencias. ¿De dónde saldrán las cien mil preferencias en las urnas a realizarse el 15 de agosto, como no sean de votantes priístas?

Esas son las suspicacias que tenemos los demócratas de Guerrero y nuestra nada facciosa convicción de que el PRI tiene metidas las manos concretamente en la candidatura del senador Chavarría.

No se trata de ganar por ganar una candidatura de un partido cualquiera, se trata de que gane la democracia, una democracia a la que hay que cuidar porque nos ha costado muchas vidas humanas en Guerrero; se trata de cambiar un estilo de vida que nos ha degradado y envilecidos como humanos, de eso se trata, no se trata simplemente de una encuesta o una elección abierta, por favor, se trata esta vez de nuestro futuro inmediato.

Atentamente

Juan José Dávila Ibarra