Laboran negocios de la Costera de manera normal pese a la marcha de normalistas

A diferencia de la manifestación anterior, empleados y comerciantes de los establecimientos por donde pasó el contingente expresaron su apoyo a la demanda de la presentación con vida de los 43 estudiantes de Ayotzinapa

Aurora Harrison

A diferencia de la marcha que normalistas, maestros de la CETEG e integrantes de organizaciones sociales hicieron el pasado 17 de octubre, en la que se llevó a cabo ayer los negocios de la avenida Costera estuvieron abiertos, incluso en algunos los empleados regalaron agua a los manifestantes, otros manifestaron su apoyo y demandaron a la autoridad que aparezcan los 43 estudiantes.
En el trayecto del contingente, de la Base Naval al Palacio Municipal, la gente observaba a los manifestantes y en las tiendas Oxxo, donde la vez pasada pintaron mensajes con pintura de aerosol, ahora los trabajadores tomaron precauciones y cerraron sus puertas pero no dejaron de atender a los clientes, mientras que los bancos laboraron de forma normal.
Los empleados de los negocios justificaron que en la marcha pasada cerraron por temor de que los inconformes hicieran vandalismo, pero que al ver que la caminata fue pacífica esta vez decidieron abrir, solidarizarse y pedir a las autoridades federales, estatales y municipales respuesta a su demanda.
Restaurantes, comercios, bancos y tiendas de autoservicio ayer laboraron de manera normal, incluso algunos empleados se organizaron para regalar agua, gorras y sombreros a quienes iban en el contingente, mientras que otros tomaron precauciones y cerraron sus cortinas en lo que pasaba para volver a abrir.
Aunque hubo algunos negocios que sí cerraron como heladería Santa Clara.
En el bar La Chopería, ubicado frente al edificio Oceanic 2000, los trabajadores sacaron una mesa donde colocaron botellas con agua y las regalaron a los manifestantes.
Ahí el empleado Sergio Godínez declaró que “como ciudadano estoy de acuerdo en exigir muchas veces ante el gobierno lo que ha dejado de hacer, esto es parte no nada más de los desaparecidos, es parte de la sociedad que está harta de la inseguridad”.
“Es un reflejo de tantos años de desinterés del gobierno hacia el pueblo, esto es un reflejo de eso, y siempre que las manifestaciones sean de manera pacífica habrá apoyo. El turismo es cierto, se afecta, pero al final la ciudadanía es quien pone a los buenos o malos gobiernos y esto es un reflejo de que hemos tenido malos gobiernos”, señaló.
Metros más adelante, en el restaurante de mariscos Paco’s la gerencia decidió cerrar las puertas y desde adentro los empleados observaban la marcha, lo mismo que en la tienda Señor Frog’s, a un costado del Centro Cultural Acapulco, donde hasta taparon con bolsas de plástico los vidrios y las ranas que están afuera.
Metros más adelante, en la tienda Comercial Mexicana de Costa Azul los trabajadores regalaron botes con agua de litro y medio, y el supervisor José Luis Escalante indicó que los apoyan porque “todos somos un pueblo y esta es una forma de que nosotros le demos nuestro respaldo, además vienen acalorados”.
Abundó que “está muy bien el movimiento que hacen, ellos tienen derecho de exigir la presentación con vida de sus familiares, todos los acapulqueños estamos con ellos”.
Explicó que la vez pasada no les regalaron agua porque la marcha se realizó en el carril del parque Papagayo a la Base y en esta ocasión fue al contrario.
Nuevamente del restaurante 100%Natural los empleados les regalaron agua a los manifestantes, y en el mercado de La Diana los comerciantes sacaron unas cartulinas con leyendas que decían: “Estamos con ustedes hasta encontrarlos, fuera el mal gobierno”.
“Anteriormente se habían manifestado ellos con violencia y teníamos miedo pero vemos que ellos no afectan al pueblo, simplemente contra el gobierno y mientras siga así vamos a estar con ellos apoyándolos hasta que encuentren a los estudiantes”, declaró el comerciante Diego Arredondo, quien cargaba una cartulina que decía “Estamos con ustedes”.
Mientras en el mercado El Pueblito los comerciantes regalaron al contingente sombreros de palapa y gorras para que se cubrieran del sol, y aceptaron que la vez pasada no abrieron por el miedo de que se metieran a los negocios y causaron daños, pero que en esta ocasión decidieron apoyar.
“En la marcha que hubo vimos que no venían agresivos e incluso platiqué con unos y dijeron que no venían a hacernos mal, por eso es que decidimos abrir, porque creemos que la lucha de los jóvenes es justa, que pidan la aparición con vida de sus compañeros, y a las autoridades les exigimos que haya tranquilidad”, indicó la comerciante Estefanía Salas.
En el Centro los negocios laboraron de manera normal y las personas salieron a realizar sus actividades, e incluso si había trafico caminaron.
En la marcha pasada, que se realizó de la Calzada Pie de la Cuesta al Centro de Convenciones, varios jóvenes realizaron pintas en tiendas Oxxo y esta ocasión en algunos negocios pintaban un rostro del presidente de la República, Enrique Peña Nieto, y una leyenda que decía “Fuera”, “Asesino”, y “Ayotzi vive” y “Aguirre asesino”.
Además escribieron mensajes en la oficina recaudadora de la Secretaría de Finanzas de Costa Azul, en el Instituto Nacional de Migración, en el Centro de Convenciones, en la glorieta de La Diana Cazadora y en algunas paradas escribían: “Peña asesino”; en la pared de la tienda Blockboster, así como también en el pavimento de la avenida Costera y en vehículos de Telmex.
La circulación de los automovilistas se realizó en el carril Centro–Base, y durante el trayecto eran los estudiantes de Ayotzinapa quienes se colocaban en los cruces para indicar que no se podía circular porque pasaría la marcha.
Atrás del contingente venían unos 40 autobuses de región de Costa Chica y Centro, en los que se regresarían los manifestantes.