Los cuerpos de las fosas de Pueblo Viejo no son de normalistas; cuatro son del Edomex, dice Murillo

Redacción

Chilpancingo

El procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, informó que cuatro de los 28 cuerpos calcinados, localizados el 4 de octubre en seis fosas clandestinas de Cerro Gordo, en Iguala, ya fueron identificados y corresponden a personas originarias del Estado de México.
En la conferencia de prensa que ofreció ayer, el funcionario federal aseguró que las cuatro personas antes de su muerte, fueron detenidas por Policías Municipales de Iguala cuando pretendían ingresar a ese municipio de la región Norte de Guerrero.
Recordó que de los 28 cuerpos localizados en esas fosas ninguno corresponde a los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.
“Los peritajes realizados nos han permitido tener la certeza de que los restos encontrados en esas primeras fosas, las de Pueblo Viejo, no son las de los jóvenes estudiantes y también se ha logrado determinar la plena identificación de cuatro de las personas que se encontraban en esas fosas, las cuales fueron asesinadas en el mes de agosto, es decir, un mes antes de los hechos”.
En la sesión de preguntas y respuestas de la conferencia en la que dio a conocer los avances de la investigación según los cuaes los 43 normalistas desaparecidos fueron ejecutados y quemados en el basurero de Cocula el mismo 26 de septiembre, Murillo aclaró que las cuatro cuerpos identificados de los 28 hallados en las primeras fosas son de personas originarias de un municipio del Estado de México e iban de visita a la ciudad de Iguala cuando desaparecieron, según lo dicho por sus familiares.
“Cuando hicimos el análisis de esas primeras fosas sacamos el ADN de todos, cuando no coincidió con ninguno de los que estamos buscando, tuvimos la obligación legal de determinar quiénes son y empezamos a hacer investigación al respecto”.
Murillo Karam dijo que en el grupo de cuatro cuerpos había ADN de padre e hijo, por lo que indagaron en la base de datos con la que cuentan para detectar cuántos casos de padre e hijo desaparecidos encontraban.
“Encontramos dos casos, y en uno de ellos la esposa dijo que sí, efectivamente, su hijo y su esposo habían desaparecido, pero que antes de desaparecer le habían llamado para decirle que los estaba deteniendo un retén de la policía de Iguala, a partir de ese momento no volvió a saber absolutamente nada de ellos”.
El 6 de noviembre, Excélsior publicó que en el mes de agosto, Luis Alfredo, de 21 años, su papá Gildardo Lagunas, de 51 años, junto con sus primos Marlene Hernández, de 28, y José Luis Cruz, de 29, salieron rumbo a Guerrero para acudir al funeral de su abuelo y nunca más regresaron. De ellos son los cuerpos identificados por la PGR que fueron encontrados en las fosas clandestinas de Cerro Gordo.

Un caso similar de desaparición

El pasado 23 de junio, en estas páginas se publicó el caso de una familia de cinco miembros, entre ellos un herido de bala,  que desapareció en la carretera Iguala-Teloloapan.
Se trata de Félix Aguirre Román, Gregoria Martínez Delgado, María Guadalupe Aranda Rabadán y Mauro Aguirre Martínez quienes trasladaban en un vehículo particular a Ismael Aguirre, el herido de dos balazos en el tórax, para que recibiera atención médica en el hospital general de Iguala, sin embargo nunca llegaron.