Muy clara, la responsabilidad del gobierno en el caso de los normalistas, dice Garfias

En un mensaje, llama a la participación social para construir la paz en el estado

Karina Contreras

El arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, dijo que la responsabilidad de las autoridades en los hechos de Iguala, en los que tres normalistas fueron asesinados y 43 desaparecidos, está muy clara y la exigencia de que cumplan con sus obligaciones es legítima.
Señaló que no se debe llamar a la violencia sino al diálogo, que siempre es importante y fundamental para resolver cualquier situación.
Sobre las marchas por la presentación de los 43 normalistas desaparecidos, dijo que es importante que las autoridades busquen el acercamiento para que haya el diálogo pertinente con los que se están manifestando.
En conferencia de prensa el prelado católico anunció el encuentro 23 de la Ultreya Nacional de Cursillos de Cristiandad, donde estarán más de 10 mil católicos de todo el país y del extranjero, que inició este viernes y concluirá el domingo.
Garfias Merlos explicó que el encuentro anual tiene la finalidad de compartir las experiencias de evangelización que se realizan en los diversos ambientes locales para transmitir el Evangelio.
Durante su mensaje, el prelado católico hizo un llamado a la participación social para construir la paz en Guerrero.
Dijo que no deja de causar dolor y desconcierto el largo tiempo transcurrido desde la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, quienes fueron atacados el 26 de septiembre por policías municipales de Iguala y Cocula en complicidad con sicarios del cártel de Guerreros Unidos.
Dijo que duele a todos esos hechos condenables e hizo un llamado a la sociedad a participar para la construcción de la paz.
Dijo también que la responsabilidad de las autoridades está muy clara y la exigencia de que cumplan con sus obligaciones es legítima.
Agregó que las marchas y demás manifestaciones si se realizan de manera pacífica son necesarias, pero insuficientes, pues se necesitan acciones para reconstruir del tejido social, para la organización y para el esfuerzo cotidiano por la paz.
En la sesión de preguntas al jerarca católico se le preguntó por el llamado que hicieron los empresarios al gobierno para que aplique la ley ante marchas y bloqueos, y dijo que el llamado a todos es que se vayan buscando los espacios de diálogo, que siempre es importante y fundamental para resolver cualquier situación.
“Más en este momento yo seguiré insistiendo en que las autoridades busquen a las organizaciones que están haciendo las manifestaciones, los líderes que están organizando a los que se están manifestando, buscar el acercamiento y se haga el diálogo pertinente”, expresó.
Sobre la detención del ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca, y su esposa María de los Ángeles Pineda, el arzobispo Carlos Garfías comentó que es algo que a todos da la posibilidad de que se tengan noticias ante la crisis que se ha generado  por la desaparición de los jóvenes, pero también por otro lado está el hecho de los señalamientos concretos que han cometido y en ese sentido a toda la sociedad le da esperanza que se pueda realmente atacar al crimen organizado.
Dijo que ojalá se “pueda tener noticias buenas en cuanto a saber qué sucedió con los jóvenes desaparecidos, que ha generado la crisis en la que nos encontramos. Detenidas estas personas significa que se pueda encontrar luz en el camino”.
Agregó que desde el inició la Iglesia ha dado acompañamiento a las víctimas de la violencia y que “han decidido ir expresamente a buscar a las familias de las víctimas, pero desde el principio hemos ofrecido ya nuestro acompañamiento y hemos ofrecido lo que nosotros tenemos como iglesia, que es dar consuelo, dar esperanza”.
Dijo que la iglesia desarrolla una campaña de oración permanente en tres capillas expiatorias, las 24 horas del día, y señaló que es necesaria la reconstrucción, y “quien quiera seguir promoviendo la violencia lo puede seguir haciendo. Nosotros queremos buscar alternativas y ofrecer caminos para restablecer la sociedad”.
Sobre el cambio de gobernador y las manifestaciones, el prelado dijo que con cada hecho que va sucediendo se torna crítica la situación.
Los cambios significan la posibilidad de encontrar el camino de solución y “creo que el relevo del gobernador se aprecia y se sigue teniendo esperanza que este nuevo gobierno pueda encontrar el camino para resolver esta situación y todos así lo anhelamos”. Indicó que por eso insistía en que todos colaboren y se unan para lograr la paz, donde la iglesia está dispuesta para apoyar.
Agregó que cuando alguien pida a la iglesia que colabore como interlocutor lo va a hacer, por “nuestra cuenta meternos en el asunto no nos toca, es algo muy puntual, lo que a nosotros nos toca lo estamos haciendo, llevando consuelo, ateniendo a las víctimas, a los familiares de los muchachos desaparecidos; lo que esté al alcance como iglesia lo haremos”.
Sobre la violencia que se ha recrudecido en Acapulco, el arzobispo Carlos Garfias comentó que es lamentable y que espera que se sigan teniendo mejores condiciones de seguridad.
Durante la conferencia de prensa, el presidente nacional del movimiento de Cristiandad, Juan Adolfo Moguel Ortiz, informó que al encuentro católico llegarán más de diez mil personas y que desde hace dos años se tiene previsto, que lo único que pidieron fue seguridad; que como iglesia “tenemos que unirnos para asumir la responsabilidad que nos toca como movimiento y de una manera solidaria hacer oración por la región”.