En bancarrota, el Ayuntamiento de Pungarabato, aseguran regidores

 Se tiene un adeudo por 3 millones de pesos por la mala administración de Ambrosio Soto, dice el priísta René Rabiela. Analizan cancelar un crédito de Banobras por 1 millón 400 mil

 Gregorio Urieta Ciudad Altamirano  

El ayuntamiento de Pungarabato, que preside Ambrosio Soto Duarte, está en bancarrota, aceptaron los regidores de Comercio y de Salud, los priístas René Rabiela Tapia y Gustavo Juanchi Quiñónez.

Indicaron que ya promueven entre los ediles priístas la posibilidad de cancelar un crédito que recién les otorgó el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), por 1 millón 400 mil pesos, destinados a la elaboración de un plano rector de Ciudad Altamirano, que tendrá un costo de 800 mil pesos.

Recientemente el alcalde Ambrosio Soto Duarte hizo público un déficit presupuestal por 3 millones 700 mil pesos, por lo cual no se ejecutará más obra pública para el presente año, sólo las que ya se comenzaron.

En entrevista, los regidores externaron su preocupación por el alto endeudamiento a que ha llegado el Ayuntamiento, debido a una “pésima administración” de los recursos municipales.

Juanchi Quiñónez y Rabiela Tapia manifestaron que el alcalde hace una serie de acciones que significan gastos sin sentido, que han devenido en un alto endeudamiento.

“Al finalizar el año llegaremos a una deuda de unos 7 u 8 millones de pesos que no tenemos de dónde pagar”, dijo René Rabiela.

Explicó: “se tiene una deuda de 3 millones 700 mil pesos, pues hay una demanda por despido de trabajadores que ya surtirá efecto, por 1 millón 200 mil pesos; se deben 300 mil de luz, más el pago de aguinaldo, que ser de las participaciones”.

Indicó que “si consideramos que no podemos destinar recursos esa deuda llegará intacta y a mí me dará vergüenza terminar el periodo así, pues significaría que no fuimos capaces de ordenar esto”.

Mientras que Gustavo Juanchi señaló que en la administración se han cometido varios errores, entre ellos la construcción de un “relleno sanitario” que fue un fraude.

Agregó: “entre otras irregularidades están el pago de diversas cantidades por iguales conceptos, el costo de los explosivos para el depósito. Actualmente se construye otro con un costo mucho menor. No se justifica el gasto”,

Anunció que ya solicitaron una supervisión de las obras a colegios de ingenieros y arquitectos de la región.

Por su parte, el síndico Juan Carlos Palacios informó que ya solicitaronauditoría administrativa física, contable a la administración, pero –al igual que sucedió en Arcelia, Coyuca de Catalán, y Ajuchitlán– la Contaduría del Congreso y del gobierno del estado les ha dicho que ya se hicieron auditorías y que las observaciones fueron entregadas al alcalde Ambrosio Soto Duarte. Observaciones que los regidores y el síndico desconocen.

Por ello los regidores han consultado entre sus compañeros de fracción, los también priístas Marcos Arellano Aparicio y el síndico Juan Carlos Palacios Sebastián la conveniencia de cancelar “de inmediato” el crédito solicitado a Banobras, para no amumentar la deuda del ayuntamiento. “A Jorge Arturo ni preguntarle”, dijeron del regidor de Obras Públicas”.

De ello, el edil Marcos Arellano Aparicio se dijo en desacuerdo en suspender el crédito, pues él aprobó la solicitud en Cabildo, mientras que el síndico Carlos Palacios Sebastián manifestó que ya autorizado el crédito se pagarán intereses sobre ello, por lo que considera inconveniente no ejercerlo.

Por su parte, los regidores perredistas y panistas, Salomé Bartolo, Saúl Vera Juárez y Alejandro Urióstegui señalaron que desde hace dos semanas se comprometieron a elaborar un documento para entregarlo al Congreso del Estado, en el cual informan de la situación en el Ayuntamiento.