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No se previene de la presencia de cocodrilos en playa de Zihuatanejo

 Brenda Escobar Zihuatanejo  

Los cocodrilos que se encuentran en el estero de playa La Ropa, en Zihuatanejo, representan un riesgo para las personas que se acercan al área, pues carece de medidas de seguridad que prevengan a los visitantes de la presencia de los saurios.

El comandante del Departamento de Bomberos y Protección Civil, Jaime Vázquez Sobreyra, informó que al igual que en Playa Linda, se mantiene una constante vigilancia para evitar incidentes.

En la bocabarra del estero, que actualmente se encuentra cerrada, no hay señalamientos visibles que alerten de la presencia de los cocodrilos; el único que había fue carcomido por la brisa del mar y ahora está tirado en el estero y sólo hay una pequeña barda construida de bambú, que a decir de los meseros y prestadores de servicios no es suficiente porque la gente se arrima sin medir el riesgo.

Desde hace dos semanas, a la orilla del estero está una cocodrila que cuida a sus crías recién nacidas, y han sido varios los curiosos que huyen espantados cuando el saurio sale de repente y emite bufidos para ahuyentarlos.

El señor Carlos Gutiérrez Farías, administrador del hotel Puerta del Mar, ubicado a un lado del estero, dijo que el problema de los saurios ya lo reportó a las direcciones municipales de Turismo y Ecología, así como a los inspectores de la Profepa, pero que no han hecho caso, “quizá esperan que haya un accidente y ahora sí actuarán”.

Añadió que hay una sobrepoblación de cocodrilos en el estero debido a lo reducido de su hábitat, y que cuando ha acudido a las dependencias a pedir que intervengan “me dicen que también en Playa Linda está el mismo problema, pero con la diferencia de que aquí los cocodrilos seguido se salen a bañar al mar”.

Gutiérrez Farías apuntó que “en realidad sí representan un peligro, pero no porque los cocodrilos ataquen a los seres humanos, sino que es la gente la que ataca a los animales, vienen y les tiran piedras o lo que encuentran para llamar su atención y eso es una agresión contra ellos porque los pueden enfadar y quizá sí se suscite un accidente lamentable”.

Y citó como ejemplo a la cocodrila que cuida a sus crías, “aunque haya aquí las cintas que dicen “peligro”, llega la gente y la provoca, por eso es necesario hacer algo antes de que empiecen a llegar los turistas y ocurra una tragedia”.

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