Anuncian protesta en Nueva York por el secuestro del periodista Aguilera Lucas

La periodista Ernestina Aguilera, hermana del editor de la revista Mundo Político, Leodegario Aguilera Lucas, quien fue secuestrado el 21 de mayo por tres hombres armados en el kilómetro 10 de la carretera Acapulco-Zihuatanejo, hizo un llamado urgente de solidaridad a los medios de comunicación y las organizaciones defensoras de los derechos humanos, para protestar por el secuestro de su hermano.

En una carta dirigida a la Comisión de Derechos Humanos en las Naciones Unidas, a Amnistía Internacional, a Human Rights Watch y a la Corte Penal Internacional, a las organizaciones de protección a periodistas y a la opinión, pública, Aguilera llamó a las autoridades para el esclarecimiento del secuestro e invitó a la marcha en protesta por estos hechos, que se llevará a cabo este domingo, frente a la sede de las Naciones Unidas en Nueva York, paralela a la marcha silenciosa que se llevará a cabo en la ciudad de México contra los secuestros.

En el documento afirmó que “después de 28 días” del secuestro de su hermano, ni el procurador de Justicia Jesús Ramírez Guerrero, ni el gobernador René Juárez Cisneros han resuelto nada.

Dijo estar preocupada porque su hermano “está enfermo, y estaba por ser intervenido con urgencia por un problema de la próstata en esa semana que se lo llevaron”.

Da a conocer algunos encabezados de notas recientes publicadas por el periodista secuestrado: “Los secuestros en Guerrero se gestan desde una oficina de la Procuraduría de Justicia”, “Víctimas del secuestro. La policía del estado bajo el velo de la sospecha”. “La mafia apoya a Armando Chavarría”. “Agustín Montiel es un sátrapa que tiene que ser guzgado también por sus crímenes en Guerrero” y propuso abrir una línea de investigación relacionada con los contenidos de esas notas.

Señaló que Leodegario Aguilera “es un profesional que se ha distinguido por un periodismo serio, responsable y siempre en defensa de aquellos que menos tienen, tocando intereses de los que se sienten poderosos, de aquellos que con su dinero compran conciencias, pisotean y desaparecen a cuanta gente se les antoja”.