Deben modernizarse los congresos locales para ser más eficaces: investigadores

 El 84.64 por ciento de los diputados en los congresos locales del país no tienen experiencia previa como legisladores, afirman Juan Carlos Córdova González y Luis Raigosa Sotelo, coautores del libro El Poder legislativo estatal en México

 Aurelio Peláez  

Los congresos de los estados están obligados a modernizarse y a trabajar con mayor eficiencia, para ser un contrapeso real de los ejecutivos estatales en los nuevos modelos políticos de alternancia, afirmaron Juan Carlos Córdova González y Luis Raigosa Sotelo, coautores del libro El Poder legislativo estatal en México.

El libro, coordinado por Roberto Balkin, profesor de la Universidad del Sur de Nueva York (SUNY), en su extensión en la Ciudad de México, fue presentado ayer en las instalaciones del Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano, acto en el cual estuvo la directora de esta institución, Rosa Icela Ojeda, así como el director del Instituto de Estudios Parlamentarios Eduardo Neri del Congreso local, Crescencio Almazán Tolentino.

El trabajo, que se compone de siete ensayos que abordan temas relacionados con los congresos locales, recibió el apoyo de los institutos de investigaciones legislativas de Guanajuato, Estado de México, Morelos, Querétaro, San Luis Potosí y Sonora. Asimismo, el proyecto promovido por la SUNY, contó con el respaldo de instituciones académicas como el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), y la Universidad Anáhuac del Sur.

En su presentación, Robert Balkin explicó el interés de la Universidad del Sur de Nueva York por el apoyo a las instituciones mexicanas, y en ese sentido los ensayos son una fotografía que le permitiría a los Congresos a compararse con los demás.

Añadió luego que México está ante la gran oportunidad de experimentar la pluralidad política, y señaló que el fortalecimiento de las instituciones requería de aprovechar la experiencia legislativa y promover un servicio de carrera legislativo.

La reelección de diputados locales, fue uno de los temas tocados por la investigación. Juan Carlos Cordova refirió el ensayo de Alonso Lujambio, quien en su investigación recuerda que la disposición constitucional que desde 1933 impide la reelección de diputados locales, “en los hechos la prohibición milita agresivamente en contra de la constitucionalidad de los Congresos locales, de la profesionalización de sus miembros, de la calidad de las leyes, de darle continuidad a los trabajos –urgentes– de control evaluatorio de las políticas públicas, e incluso con la posibilidad de la responsabilidad política de los legisladores ante sus electorado, al reiterarle o reiterarle su apoyo al fin de su periodo.

Así, según la investigación de Lujambio citada por Córdova, en los congresos locales de México el 84.64 por ciento de los diputados locales no tienen experiencia previa como legislador, ya sea local o federal, por lo que tienen un carácter de amateur, además de que la investigación misma desechó el mito de que los legisladores locales anden brincando constantemente de una curul local a una federal.

Cordova recordó asimismo que la posibilidad de la reelección se limitaba usualmente a las cúpulas, pero quienes la ejercían fue en tiempos en los que no existía la posibilidad de la alternancia, y además quienes fueron sus beneficiarios generalmente no dejaron un legado legislativo.

En la presentación del libro, Rosa Icela Ojeda señala como “un punto nodal” del mismo el ensayo de Juan E. Pardinas, donde resalta la insuficiencia de los congresos para la rendición de cuentas, y en la que se afirma que “la mayoría de los organismos encargados de la rendición de cuentas a nivel local ya no responden a las expectativas de transparencia de una democracia moderna”, lo que señaló la investigadora universitaria refleja un problema grave “tanto que en la descentralización del gasto beneficio a los gobiernos locales, proporcionándoles recursos excedentes no etiquetados, de los cuales los ejecutivos locales pueden disponer discrecionalmente, y más discrecionalmente si el gobernador conserva hábitos propios de la presidencia imperial”.

En su intervención, el director del Instituto de Estudios Parlamentarios, Crescencio Almazán, señaló que los Congresos están obligados a modernizarse, tanto para realizar un mejor trabajo legislativo, como para ser un real contrapeso de poder.