Definen el Plan de Gobierno que defenderá el candidato del PRD

 La transparencia en el manejo de los recursos y la atención a la pobreza, bases de la propuesta. Sobresalen planteamientos de asesores de Armando Chavarría y Zeferino Torreblanca en el foro El Gobierno que Guerrero necesita

 Aurelio Peláez  

Transparencia en el ejercicio de los recursos públicos, su fiscalización por parte de la sociedad, redefinición de las políticas públicas y la atención a la pobreza como política de Estado, fueron parte del perfil que ciudadanos, investigadores universitarios y dirigentes perredistas perfilaron para el próximo gobierno estatal –hipotéticamente perredista–, en el foro El Gobierno que Guerrero necesita.

El foro, organizado por los comités estatal y municipal del PRD, y llevado a cabo ayer en Acapulco, contó con la presencia del presidente nacional de ese partido, Leonel Godoy Rangel.

Asesores cercanos a los aspirantes Armando Chavarría Barrera y Zeferino Torreblanca Galindo, llevaron mano en la definición del debate sobre el Plan de Gobierno que defendería el próximo candidato del PRD a gobernador del estado. Ningún cruce de fuego, ninguna mención a alguno de los aspirantes, se presentaron a lo largo de la reunión.

Aunque el tema fue sobre todo en cuanto a políticas públicas y la asunción de un nuevo programa más “de izquierda” en el próximo nuevo gobierno, no faltaron o ingenuos o vivos, como los representantes de la empresa Worley –con matriz en Canadá-, dedicados al reciclamiento de basura, que de plano llegaron a ofrecer sus servicios al futuro nuevo gobierno estatal.

Al foro asistieron un centenar de personas y se presentaron unas 20 ponencias. No obstante, el encuentro se prolongó por unas cuatro horas. En el presídium, con Leonel Godoy, estuvieron Rosario Tapia y Amílcar Sandoval, integrantes del CEN del PRD, así como Martín Mora y Hermilo Mejía, presidente y secretario general del Comité Ejecutivo Estatal –este último moderador del encuentro–, la presidenta perredista en el puerto, Beatriz González Hurtado, y el presidente del Consejo Estatal, Adolfo Plancarte Jiménez.

Entre los asistentes, estuvieron los intelectuales de los bandos de Chavarría y Zeferino Torreblanca. Por Chavarría los profesores universitarios Rafael Aréstegui Ruiz y Demóstenes Lozano, y de los aliados del bando lopezrrosita, el subdirector de Desarrollo Urbano, Domitilo Soto; el ex director de Comunicación Social, Roberto Camps; el director de Ecología –quien se retiró sin poder presentar su ponencia– Miguel Balleza, y el diputado local Mauro García Medina.

Por Zeferino, Leoncio Domínguez Covarrubias, Rosa Icela Ojeda, Rogelio Ortega Martínez, y el viejo dirigente universitario Pablo Sandoval Cruz; también los maestros democráticos cercanos al ex alcalde de Acapulco como Gerardo García, Gil Florente y Robespierre Moreno. Se acercaron, aunque no presentaron ponencia, el presidente del Frente Cívico Acapulco, Julio Ortega, y el diputado federal suplente Carlos Álvarez Reyes.

Del equipo del aspirante Ángel Pérez Palacios, estuvo su coordinador de campaña en Acapulco, Humberto Sevilla, aunque no participó. Por el bando de Félix Salgado Macedonio se sigue adoleciendo de intelectuales que le defiendan. No hubo nadie cercano al Toro sin cerca.

Gobiernos priístas empobrecieron a Guerrero: investigadores universitarios

“Ojalá y que lo que se diga aquí no pase como lo que pasó en el foro La Universidad que Guerrero necesita” –señaló el ex director de la Facultad de Filosofía y Letras de la UAG, Leoncio Domíngiez Covarrubias, quien hace 14 años organizó un foro parecido.

Los ponentes, sobre todo los investigadores universitarios, coincidieron en que los gobiernos priístas dejaron en la pobreza al estado. Don Pablo Sandoval Cruz, luchador por la autonomía de la UAG a principios de los sesentas, señaló en su ponencia Federalismo, que “un ciclo ha terminado y comienza uno nuevo”, y sostuvo que los gobiernos priístas se caracterizaron por la corrupción y la ineptitud, y que el nuevo modelo de gobierno debe tener como base la transparencia, la planificación estatal y el respeto a los derechos humanos.

Se manifestó por un futuro gobierno en donde desaparezca la partida secreta, el presupuesto para el DIF, “del que nadie sabe nada”, que haya una revisión de la cuenta pública por los ciudadanos y que las mujeres gocen de la misma igualdad ante las leyes que los hombres.

La investigadora Rosa Icela Ojeda (Desarrollo y política social: Por una política social de Estado), propuso que en el diseño del Plan de Gobierno del candidato del PRD se integren “tres cuestiones fundamentales para el diseño de las políticas sociales del estado”, que son: reconocer la pobreza y la necesidad de combatirla como una cuestión de Estado; combatir la pobreza como una forma de contribuir a la construcción de una ciudadanía plena; diseñar junto a las políticas sociales, mecanismos de participación ciudadana para su consenso y legitimación, y establecer mecanismos claros y objetivos que permitan la evaluación y estimación de pertinencias de las políticas sociales.

Sostuvo que la transparencia y socialización de las políticas y acciones de Estado debe ser un límite a la demagogia de eslóganes como “para seguir avanzando”.

El síndico en Acapulco, Marcial Rodríguez Saldaña (La alternancia política y la reforma democrática de Guerrero), señaló que “el régimen político se ha constituido sobre las bases de la ilegitimidad”, y señaló que en la entidad “no se ha presentado la alternancia en el gobierno estatal, lo cual representa un retraso en el proceso democrático nacional, por ello, la alternancia en la gubernatura se presenta como una condición para terminar con un régimen autoritario y dar paso a un régimen democrático”.

Propuso una reforma de la Constitución política del estado, que incluya un capítulo de derechos humanos y otro de derechos ambientales; incorporar los derechos de los indígenas para que tengan representantes en el Congreso local; ampliar el periodo de los ayuntamientos a cuatro años; incluir las candidaturas independientes para los cargos de elección e incluir al gobernador como sujeto de juicio político, entre otros.

El profesor universitario Démostenes Lozano, quien presentó una investigación sobre la situación económica de Guerrero, resaltó que la entidad es la última en los indicadores de educación, salud, empleo, y primera en los de analfabetismo, pobreza e indigencia. Demandó del próximo gobierno una redefinición de las políticas económicas y una mayor atención a la pesca y a la agricultura, así como reconocer el abandono a los pueblos indígenas y dar un mayor apoyo a las regiones que habitan.

Propuso además que en el próximo gobierno se priorizara un programa de independencia tecnológica. Sobre esto último versó la ponencia de Roberto Camps (Tecnología para la Administración y la Gestión Pública).

El profesor universitario Leoncio Domínguez Covarru-bias, propuso la creación de un Instituto de Evaluación de Políticas Públicas, que permita combatir la corrupción en las instancias de gobierno, al ser un organismo que permita una fiscalización permanente de las políticas y del servicio público.

Por el grupo “Educadores por la Democracia”, el profesor Gerardo García Lozano señaló que el actual sistema escolar ha resultado insuficiente para arribar a mejores niveles de equidad, y destacó la inexistencia de un proyecto educativo global, permanente, integrado y democrático, por lo que urgió a crear una política educativa y cultural incluyente, que entre otros, reafirme patrones culturales y una identidad guerrerense.

La profesora Susana Estrada, propuso que el nuevo gobierno debe hacer efectiva las leyes que confieren una igualdad de atención a las personas con capacidades diferentes, porque hasta ahora “han sido letra muerta”, para permitirles incorporarse como iguales al desarrollo social.

El joven Carlos Álvarez, en tanto, pidió que el nuevo gobierno tome la opinión de los artistas y de los jóvenes en el diseño de las políticas de atención a la juventud y en los programas de promoción del arte.